Zúrich 2012: el atletismo vuelve un año más a su catedral

por OSCAR FERNANDEZ VILLAR el 28 agosto, 2012 • 21:55

Grossmünster es una catedral de estilo románico situada en Zúrich, pero la ciudad suiza tiene otra catedral, una catedral atlética. Nos referimos al Letzigrund-Stadion cuando se disputa la Weltklasse. La competición nunca defrauda; las 25.000 entradas llevan vendidas meses, el lleno está garantizado año tras año y los precios a pagar no tienen que envidiar nada a los más caros de otros eventos deportivos: hay entradas que rondan, al cambio, los 120 euros. El Letzigrund ha sido testigo de 25 récords mundiales, la mayoría antes de su remodelación en 2006. Los últimos fueron los 9.77 de Asafa Powell en 2006 (en tan sólo 6 años Bolt ha conseguido que esta marca parezca irrisoria) y en mujeres el de Iisinbaeva: 5.06 en el 2009. Este mismo estadio será el que acoja el próximo campeonato de Europa que tendrá lugar en el 2014.

Una semana más tarde de que Lausana fuera el epicentro del atletismo mundial, Suiza vuelve a ser el centro de atención. En Lausana comprobamos, un año más, que a Blake no se le hacen largas las temporadas y que al igual que el año pasado compite mejor en las reuniones de finales de agosto y principios de septiembre que en los grandes campeonatos. Su marca de 9.69 lo coloca como el segundo hombre más rápido de la historia, empatado con Gay. Usain Bolt demostró seguir estando en un extraordinario momento de forma. Más allá de los dos grandes protagonistas, la reunión contó con pruebas excepcionales como la altura masculina, que tuvo a tres atletas por encima de 2.37, algo que no acontecía desde el mundial de 1993. La pértiga también sobresalió con 4 hombres en 5.80 (en Londres hubo tres ). En mujeres destacaron Harper, Jeter y Jelimo. Por contra, Birmingham decepcionó. La reunión se había hecho pensando en un intento de récord del mundo de Farah sobre las 2 millas, pero al final se convirtió en un entrenamiento. Su mujer daba a luz esa misma semana a gemelos y Farah no estaba para ritmos altos, así que pudimos contemplar una carrera sin liebres, lo que provocó ritmos lentísimos y una exhibición del británico, con un último 200 en 26.1. Los ovettianos salieron contentos de la reunión porque Farah no pudo ni con el récord británico logrado, hace 34 años, por Steve Ovett (8:13.51).

Zúrich no destaca sólo en las pruebas de velocidad. Este año se podrá ver lo mejor del atletismo mundial con 15 campeones olímpicos y 14 campeones mundiales, lo que llevará a esta reunión a ser la mejor del mundo por noveno año consecutivo. Además, es la penúltima etapa de la Diamond League y ello conlleva a que se disputen 17 finales. Las finales que no se disputen se celebrarán en Bruselas.

Bolt y Blake correrán las misma pruebas que en Lausana. Bolt se enfrentará en 200 prácticamente a los mismos rivales: Spearmon, Young, Weir y Martina. Por su parte, Blake será escoltado en el 100, a buen seguro, por Bailey o Gay.

La prueba femenina por excelencia serán los 100 metros, que contará con la presencia de tres de las más grandes atletas del momento: Jeter, Felix y Fraser-Pryce. Esta semana pasada, Jeter se quejaba de que se está infravalorando los duelos en el 100 femenino en comparación con el masculino, y no le falta razón. Las mujeres no alcanzan ni por asombro el caché de los hombres: Bolt cobra 300.000 dólares (240.000 euros) por aparición y Blake, 150.000.

Más allá de la velocidad hay dos pruebas que se anunciaban como en las que se intentaría asaltar el récord del mundo: los 3.000 obstáculos femeninos y el 800 masculino.

Zaripova estaba en un estado de forma excepcional. En la presentación previa a la prueba, el director, Patrick Magyar, señaló que la atleta rusa le pidió expresamente correr sin liebre ya que cree que le perjudica más que le beneficia. Se trata de una atleta de gran técnica al paso de la valla que prefiere ir primera y afrontar el obstáculo con plena visibilidad. De hecho ya corrió sola en Estocolmo (9:05.02, segunda marca de todos los tiempos). La duda que hay sobre Zaripova es que, en el momento de escribir este texto, paradójicamente no aparece en los lista provisional de inscritas. (Y finalmente no correrá).

La sola presencia de Rudisha en una prueba garantiza que todos estemos espectantes al cronómetro, a los parciales y al resultado final. Es evidente que es de los pocos atletas que puede batir el récord del mundo. Junto a Rudisha, en la línea de salida estarán, entre otros, Kitum, Kosencha y Aman. El etíope se enfrenta por segunda ocasión este año al keniano. En Londres lo intentó seguir y acabó pagando el esfuerzo. Veremos cuál es la táctica que utiliza en esta ocasión. El estado de forma de Rudisha no se puede poner en duda. Después de Londres se refugió en la ciudad alemana de Tübingen, lugar donde tiene su centro de entrenamiento en Europa. La consecución del récord estará en buena medida condicionada por el papel de la liebre, así que todo dependerá del tiempo de pasó que logré realizar Tangui, su fiel escudero. Los parciales del récord en Londres fueron:

49.28 + 51.63 (Difrencia: 2.35) = 1:40.91

Parciales cada 200 metros:

23.5
25.8 [49.28]
25.0 [1:14.3]
26.6

La reunión de este año cuenta con una novedad: las pruebas de peso tanto masculina como femenina se disputarán fuera del estadio. Esta idea está recogida de Estocolmo, que en las últimas ediciones había optado por llevar el peso un día antes al centro como reclamo publicitario de la reunión y también como una manera de acercar el atletismo a la ciudad. Curiosamente, el año que la capital sueca trae de vuelta el peso al estadio es cuando Zúrich toma la misma iniciativa, así que el miércoles se podrá ver a Majewski y Adams lanzando en la principal estación de la ciudad helvética. La neozelandesa es muy querida en Suiza, ya que entrena desde hace dos años con dos suizos: Jean-Pierre Egger y Werner Günthör. La duda está en saber si le entregarán la medalla de oro que ganó en los JJ. OO. después de la descalificación por dar positivo en un control antidopaje de la bielorrusa Nedzeya Ostapchuk. Adams devolvió su medalla de plata al COI hace más de una semana, de igual manera que hizo la tercera clasificada, Kolodko, pero estaban a la espera de que la bieolorrusa hiciera lo mismo. El problema surge si Ostapchuk apela, lo que retrasaría la posible entrega de la medalla dentro del estadio. En caso de producirse este retraso se barajaban varias posibilidades: una es entregarla en el Park Outdoor Concert de Auckland, un macro concierto que hay en Nueva Zelanda que congrega a 200.000 personas.

Otra prueba de nivel medio extraordinario será el 5.000, que cuenta con 15 atletas que han corrido por debajo de los 13 minutos; solo faltan el mayor de los Bekele y Farah. La altura promete reeditar el duelo de Lausana con Ukhov, Grabarz y Barshim. En pértiga, Lavillenie se las verá con Otto. En las vallas, Harper demostró en Lausana que puede mejorar aún más. En el 400 femenino veremos a Richards-Ross contra la campeona olímpica en la misma distancia pero con vallas: Antyukh. Un momento especial se producirá en el 400 m.vallas ,donde el doble campeón olímpico Félix Sánchez celebrará su 35 cumpleaños compitiendo. Otros atletas destacados son Perkovic, Reese o Taylor.

Viviremos un momento histórico en la jabalina masculina cuando lance por primera vez Yego. El Letzigrund será testigo, por primera vez en su historia, de un lanzamiento de un atleta keniana.

* Óscar Fernández Villar. En Twitter: @gabyandersengz

– Fotos: Diamond League – Reuters