Willibald Kress: veintisiete años bajo los palos
Contemporáneo de guardametas como Ricardo Zamora, Giampiero Combi, Frantisek Planicka o Rudi Hiden, Willibald Kress fue el mejor portero alemán en la década de los treinta. Helmut Schön, compañero de equipo y posteriormente seleccionador nacional, llegó a declarar que Kress había sido el portero más grande de la historia de Alemania. Nacido el 13 de noviembre de 1906 en Fráncfort del Meno (Alemania), fue un portero completísimo. Alto para la época y muy valiente, tenía enormes reflejos, gran elegancia, mucha agilidad y se colocaba a la perfección. Recibió el apodo del Zamora de Dresdner.
Su pasión por el balompié le viene desde crío, al vivir a escasos metros del estadio del FV Amicitia 1901 (más tarde llamado Rot-Weiss Frankfurt). Allí empezó a jugar en 1917 y con solo 15 años y medio llegó al primer equipo. En un principio prefería desempeñarse como delantero centro, pero al ver que como portero tenía mejores cualidades, se decantó por la portería. A pesar de su corta edad, se hizo con un hueco en el marco, cuajando el equipo su mejor campaña en 1921-1922 al ocupar el cuarto puesto en la liga del distrito Meno del Norte, tras el Eintracht de Frankfurt, el FSV y el FC Hanau 93.
A partir de 1926, después de una nueva fusión entre su club y el FC Helvetia Bockenheim, sus brillantes actuaciones empezaron a llamar la atención en tierras alemanas, alternando, eso sí, con algún choque en el que jugó de ariete. Conoció a su gran ídolo, Heiner Stuhlfauth y a finales de década fue llamado para la selección del sur de Alemania, que disputaba la Copa Federal. Allí compartió equipo con estrellas de su región como Franz Schutz, Fritz Schaller o Georg Knopfle.
En 1932 abandonó el país y se marchó a jugar a Francia tras la suspensión de la Federación Alemana de Fútbol (DFB) a todos los jugadores profesionales. Antes de regresar a Alemania, permaneció una sola campaña en el FC Mulhouse, donde coincidió con los internacionales franceses Marcel Kauffmann y Pierre Korb.
No volvió al Rot-Weiss, sino que fichó por el Dresdner SC por su gran amistad con el futbolista Richard Hofmann. Con los rojinegros se convirtió en el mejor portero alemán del momento y logró numerosos títulos para su palmarés. La liga de la Baja Sajonia la conquistaron en seis ocasiones (1934, 1939, 1940, 1941, 1943, 1944), siendo los claros dominadores de su región, y a nivel nacional obtuvieron la Copa de Alemania en 1940 y 1941 y el Campeonato Alemán en 1943 y 1944.
En la copa de 1940 se impusieron al FC Nuremberg por 1-2 tras una prórroga y en la campaña siguiente el Schalke 04 de Fritz Szepan o Ernst Kuzorra cayó por idéntico resultado. El Dresdner SC, dirigido por Georg Kohler, era un cuadro muy rocoso donde además de Kress destacaban Karl Miller, Herbert Pohl, Walter Dzur, Helmut Schön y Richard Hofmann.
El título en el Campeonato Alemán llegó dos temporada más tarde, justo antes de que se parara la competición en 1945 por la II Guerra Mundial. En 1943 se deshicieron consecutivamente de SV Neufahrwasser y Holstein Kiel para presentarse en la final y vencer por 3-0 al FV Saarbrucken de Wilhem Sold y Hebert Winkert; y en 1944 fueron Germania Konigshutte, Borussia Fulda, First Vienna y FC Nuremberg sus víctimas en el camino hacia el título. En la final celebrada en el Olímpico de Berlín el 18 de junio de 1944 no tuvieron piedad del Hamburgo, al que apabullaron por 4-0.
El conflicto bélico mundial suspendió las competiciones futbolísticas en Alemania durante un año y no se reanudaron hasta finales de 1945. Kress fue hecho prisionero durante unos meses y tras ser liberado se enroló en las filas del FSV Frankfurt, que jugaba la Oberliga Sur. Disputó 93 partidos de liga en cuatro temporadas (1945-1949), las dos últimas siendo además el técnico del equipo, y después de veintisiete años bajo los palos decidió retirarse de los terrenos de juego.
Con la selección alemana fue internacional en 16 ocasiones entre 1929 y 1934. Debutó en un amistoso celebrado en Mannheim en el qie Alemania superó con claridad a Suiza por 7-1. Al año siguiente defendió la portería alemana en un importante choque ante la Inglaterra de Joe Bradford, David Jack o Frederick Roy Goodall. El amistoso, jugado en el Deutsche Stadion de Núremberg, diseñado por el nazi Albert Speer, concluyó en empate a tres con una gran actuación del arquero.
En 1931 fue incluido en la lista para un encuentro ante el Wunderteam austriaco que finalizó en una severa derrota para los alemanes. La estrella Matthias Sindelar le marcó tres goles y Austria derrotó a Alemania por 5-0,, un resultado que dolió mucho a los componentes del cuadro dirigido por Otto Nerz. Poco después, la DFB prohibió a los jugadores profesionales en el equipo nacional y estuvo ausente de las convocatorias durante dos años.
Selección alemana (1934)
Regresó justo antes de la Copa del Mundo de Italia 1934. No formó parte del once en el choque de la fase de clasificación ante Luxemburgo donde certificaron el pase al mundial, pero sí lo hizo contra Hungría en un amistoso previo. El seleccionador Nerz volvió a confiar en él y le situó bajo los palos en la primera ronda del mundial frente a Bélgica. Los Diablos Rojos llegaron con ventaja al descanso por 1-2, pero los alemanes reaccionaron y acabaron imponiéndose por 5-2. En cuartos de final se vieron las caras con Suecia en San Siro y, con dos tantos del centrocampista Hohmann, la eliminaron tras ganar por 2-1. Tres días después, el rival por un puesto en la final fue la Checoslovaquia de Oldrich Nejedly, Frantisek Planicka, Antonin Puc y Jiri Sobotka. Los centroeuropeos se mostraron muy superiores y con un triplete del que sería máximo realizador del torneo, Nejedly, dejaron sin la posibilidad de luchar por el título a los alemanes. Para el entrenador Nerz, el papel en la semifinal de Kress fue muy pobre y no le alineó en el enfrentamiento por el tercer lugar ante Austria ni volvió a llamarle nunca más, finalizando así su carrera internacional.
Al término de su larga carrera, y tras haber compatibilizado durante dos años en el FSV Frankfurt la labor de entrenador y jugador, se marchó a Colonia, donde realizó un curso para técnicos en la Universidad Alemana del Deporte bajo la dirección de Sepp Herberger. En 1949 fue el primer director técnico de la Asociación de Fútbol de Hesse y en 1952 regresó al FSV Frankfurt tras el despido de Julius Turnauer a mitad de campaña. Allí permaneció hasta el fin de la temporada 1955-1956, situando al equipo cada año en mitad de la tabla de la Oberliga Sur. A continuación se fue al Wormatia Worms, de la Oberliga Oeste, desde 1957 a 1959 y después tomó las riendas del Wuppertal SV hasta 1961. En verano de ese año fichó por el VfB 1900 Giessen, en el que logró sus mejores éxitos con la liga amateur de Hesse en 1963 y la copa el curso posterior. Los tres últimos banquillos en los que se sentó fueron los del Eintracht Wetzlar, el Eintracht Lollar y el Lich VfR 1920. Falleció el 27 de enero de 1989 en Giesen a los 82 años.
* Alberto Cosín.
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