Internacional / Fútbol / Crónicas 2014-2015 / Serie A
1.- Fiorentina e Inter se medían en el cierre de la sexta jornada de la Seria. Ambos equipos buscaban aparcar las malas sensaciones en distintos aspectos. Los locales no le regalaban un triunfo a sus seguidores desde el 6 de abril jugando en casa y los visitantes llegaban al encuentro tras ser goleados por 1-4 por el Cagliari de Zeman.
2.- Los de Florencia saltaron al campo con un 4-3-1-2 en el que David Pizarro era el mediocentro posicional, a su izquierda, de interior, Alberto Aquilani para asociarse y a la derecha, Jasmin Kurtic, quien cumplía labores defensivas, auxiliando a Tomovic y ocupando una parcela del campo que se hallaba por momentos exageradamente libre y apetecible. De hecho el primer gol de Khouma Babacar llegó en ese sector tras recibir de espaldas, girarse y soltar un latigazo a la escuadra sin oposición rival. Al senegalés lo acompañó Cuadrado como extremo izquierdo (con movimientos constantes en el frente de ataque) y Mati Fernández por dentro. Walter Mazzarri dispuso su típico 3-5-2, pero sin conexión entre líneas, con Yann M’Vila como mediocentro defensivo y Medel más liberado de marca y con vocación ofensiva. Mateo Kovacic fue el tercer volante y en punta, Osvaldo e Icardi.
3.- El Inter salió al partido a esperar en su campo, y los primeros minutos fueron de dominio local en la posesión, evitando riesgos. Pizarro se encargó de recuperar el balón y distribuirlo siempre con precisión, protegiéndolo de forma excelsa. El chileno estuvo superlativo, al igual que la seguridad en el primer acto de Gonzalo Rodríguez. La novedosa pero desastrosa decisión de alinear a M’Vila con Medel en la medular se vio empeorada tras el gran gol de Babacar.
4.- A los visitantes le crecían los enanos, en desventaja, sin ideas, Medel fuera de su posición y Kovacic desasistido sin poder ejercer conexión con un Icardi estático y un Osvaldo poco más participativo. El esférico le duraba escasos segundos a los pupilos de Mazzarri. La recuperación del mismo era nula, ya que se vio un equipo desalmado, desganado, sin intensidad ni capacidad de reacción. Cuadrado lo aprovechó y a los 18 minutos ajustó su disparo al palo lejano de Handanovic, tras una deliciosa jugada individual de Mati Fernández en el sector izquierdo del ataque. La Fiore ganaba 2-0 de forma cómoda.
5.- Lo mejor de los visitantes eran sus laterales, tanto Dodo como D’Ambrosio ofrecían algunas migajas de esperanza con disparos lejanos o subidas inacabadas por sus compañeros. Kovacic se desesperaba al no entrar en juego y se dejaba caer a la izquierda, pero allí lo esperaban Kurtic y Tomovic para desconectarlo. No había atisbo alguno de rebeldía y tanto en transiciones tras el robo como en ataque organizado la imprecisión estuvo presente.
6.- Babacar recibía constantemente solo y con la tranquilidad que le otorgaban para girarse o jugar de cara. Nunca se le anticiparon. Mientras tanto, las combinaciones entre el delantero africano, Mati Fernández y Aquilani hacían estragos por zonas interiores que desembocaban en Cuadrado para el desequilibrio final. El primer tiempo dejó a una Fiorentina muy superior y a un Mazzarri sin respuesta tras su discutible planteamiento.
7.- La segunda parte fue idéntica a la primera. El equipo de Milán, esperando como si el resultado fuese favorable y su rival dominando y ejecutando transiciones a placer con Babacar y Cuadrado a punto de ahondar en la herida. Solo había un equipo en la cancha. Batistuta disfrutaba en su asiento mientras su nombre era coreado por los hinchas.
8.- Ingresaba Hernanes por Ranocchia, Medel pasaba a jugar a la misma altura que M’Vila y el equipo se paraba en un 4-2-2-2 con el brasileño recién ingresado y el croata en tareas ofensivas junto a los dos atacantes. No hubo respuesta, nada cambió y Tomovic sentenció con un gol que dejó en evidencia la apatía y el desinterés del contrincante. Penetró por su flanco hacia dentro, se paseó por delante de Hernanes y Kovacic y disparó al primer palo de un Handanovic que no ofreció respuesta alguna.
y 9.- Triunfo claro e indiscutible para Vincenzo Montella y los suyos, que continúan con la escalada de posiciones en el campeonato tras perder en la primera jornada ante la Roma. Los nerazzurri tienen dos semanas para analizar errores y meditar sobre la mala imagen que dejaron en el Artemio Franchi.
* Nicolás Quiroga.
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