El rugby español a nivel de clubes vivió en el estadio José Zorrilla el partido más importante de su historia, porque es la primera piedra sobre la que este deporte debe construir un edificio sólido.
La final, a la que El Salvador y VRAC llegaron con mucho sufrimiento, era un derbi pucelano, algo que permitió hacer algo especial: llevar el partido al estadio de fútbol con capacidad para 26.000 personas.
La respuesta de la ciudad fue asombrosa: entradas agotadas dos semanas antes del partido, estadio lleno una hora antes del comienzo y ambiente de fiesta y de sana rivalidad durante todo el encuentro. El rugby no puede dejar escapar semejante oportunidad de crecer.
La historia del derbi
El derbi VRAC-El Salvador nació a principios de los 90 con el ascenso de los queseros a la máxima categoría en 1991. Aunque anteriormente El Salvador (finalista de Copa en 1971 y subcampeón de Liga en 1971 y 1972) y el CD Universitario (subcampeón de Copa en 1975 y 1985) ya había competido por títulos.
Los primeros derbis se jugaron en la liga 1991/1992 y fueron cómodamente ganados por El Salvador (24-10 como local y 3-16 como visitante), que demostró su condición de vigente campeón de liga ante un recién ascendido.
En la temporada siguiente, el VRAC obtuvo su primer triunfo, 19-23 como visitante, pero la ansiada victoria como local se resistió hasta 1995, en medio de una serie de tres triunfos consecutivos queseros sobre los colegiales que nunca más ha vuelto a producirse en la competición liguera.
El Salvador tuvo su mejor época entre 2002 y 2007, cuando logró tres títulos de liga y otros tantos subcampeonatos, amargando el derbi a su vecino, como demuestra una serie de doce victorias en trece enfrentamientos de liga.
Los marcadores más significativos de esta rivalidad han sido, un 27-10 para el VRAC, el mayor triunfo de su historia, en las semifinales de la pasada liga. Y un 43-8 por parte de El Salvador a domicilio en 1993, victoria récord en la rivalidad. El Salvador también ha dejado a su rival a cero en cuatro ocasiones, tres en liga (dos de ellas actuando los chamizos como visitantes) y otra en la final de Copa de 2011.
Semifinales visitantes
En los últimos años parece prácticamente imposible que un club de fuera de Valladolid venza en el Pepe Rojo pucelano. Pero ese factor no existió en semifinales, ya que tanto El Salvador como VRAC Quesos Entrepinares tuvieron que jugar fuera de casa. Los colegiales ganaron en Santander al Bathco por 12-26 y los queseros se impusieron al Alcobendas por 20-25. Habían pasado cinco años de las anteriores semifinales de Copa ganadas por los visitante. En 2011 los protagonistas también fueron los dos equipos de Valladolid, con El Salvador ganando 13-27 en Gernika y el VRAC superando por 18-31 al Ciencias en Sevilla.
Aquella final fue para El Salvador por 13-0. Dejó sin anotar al VRAC, algo que no le ocurría a un finalista desde 1980 (Arquitectura 19-0 CAU, que fue otro derbi, en este caso madrileño).
La dinastía del VRAC
El Valladolid Rugby Asociación Club está en el mejor momento de su historia. No cometió ningún dispendio en las épocas de bonanza y cuando los que sí lo hicieron bajaron su nivel o desaparecieron, ellos lo aprovecharon para ganar muchos títulos. Suyas son las cuatro últimas ligas, las cuatro últimas Supercopas, dos Copas (más otras dos finales perdidas) y la tan ansiada Copa Ibérica de diciembre de 2014 que convirtió al club quesero en el primero en la historia del rugby español en lograr cuatro títulos en un año.
La final
La tensión de los derbis, más si hay un título en juego, suele provocar un juego más embarullado que vistoso, algo que se demostró a la perfección en la final copera, especialmente en la primera parte. Sin apenas opciones de ensayar por parte de ninguno de los dos bandos, el VRAC sacó partido a su dominio con cuatro golpes de castigo, por solo uno de El Salvador, pero Griffiths solo pudo encontrar palos en dos de esos cuatro y la renta al descanso para el VRAC era minúscula (6-3).
Todo cambió en la segunda mitad. El Salvador pasó a dominar el juego y obtuvo recompensa empatando el partido con otro golpe de Sam Katz y anotando el ensayo que sería decisivo por mediación de Alberto Díaz. Con el marcador en contra y con los cambios, el VRAC recuperó el dominio, pero solo fue capaz de perforar la defensa colegial con un insuficiente golpe de castigo.
El marcador final fue de 13-9 y supuso el primer título de El Salvador desde hace más de cinco años, cuando el 10 de abril de 2011 superó a su vecino en la final copera de Villajoyosa por 13-0. Desde entonces no había vuelto a ganar nada, mientras que el VRAC, desde aquella dura derrota, ha sido capaz de conquistar once títulos.
Una maldición
El Salvador dominó con contundencia el derbi durante sus años dorados, pero el VRAC no está pudiendo hacer lo mismo. Por ejemplo, el VRAC ha ganado los dos derbis de una liga en una única ocasión de las 24 temporadas en las que han coincidido en la máxima categoría, la 1995/1996. Y en esta 2015/2016 tampoco podrá ser, porque en la primera vuelta El Salvador barrió al VRAC por 40-19, derrota de la que los queseros querrán vengarse el próximo domingo, esta vez en los campos de Pepe Rojo.
El VRAC tampoco ha conseguido derrotar a su rival ciudadano en la final de Copa. Se han jugado el título tres veces en tres escenarios diferentes y siempre con el mismo resultado: victoria de El Salvador. En 2006, en el Pepe Rojo, los chamizos ganaron por 34-9; cinco años después, en Villajoyosa, llegó el ya mencionado 13-0; y nuevamente, cinco años más tarde, el resultado ha sido 13-9 en Zorrilla.
Y lo más duro para el VRAC no ha sido solo perder esas finales, sino que en 240 minutos de rugby no ha conseguido ningún ensayo en sus finales coperas ante El Salvador.
Siete títulos… y seis finales perdidas
En este partido tan especial, El Salvador pudo sumar su séptimo título de Copa, lo que le deja en solitario como el cuarto club más laureado de la competición, tras FC Barcelona (16), UE Santboiana (11) y Real Canoe (10 con sus diversas denominaciones).
Esta derrota fue la sexta sufrida por el VRAC en una final de Copa, las mismas que ha tenido el FC Barcelona. El récord lo tiene la UE Santboiana con nueve.
Y además…
La NBA dio por finalizada la temporada regular con una noche para la historia. A la misma llegó San Antonio Spurs con una marca de 40-1 como local que le sirvió para igualar el récord histórico de los Celtics en 1986.
Pero en el último día los Warriors buscaban firmar la mejor temporada de la historia y Kobe Bryant se despedía del baloncesto. Los de Golden State no tuvieron ningún problema en ganar a Memphis y acabaron con un marca de 73-9, un partido mejor que los Bulls de 1996.
Lo de Bryant era imposible de imaginar, tiró 62 tiros (29 de dos, 21 de tres y 12 tiros libres) para lograr 60 puntos, anotación récord en la despedida de cualquier jugador, y ganar el partido por 101-96 a Utah. Fue una buena manera de olvidar la peor temporada en la historia de los Lakers, con 17 victorias y 65 derrotas.
Las semifinales más igualadas desde 1978 (ambas se resolvieron por menos de siete puntos, lo nunca visto en todo este tiempo) dieron paso a una final rusa: Nadezha Orenburg, debutante en finales de la máxima competición continental, contra el UMMC Ekaterimburgo. En un partido dominado desde el principio por el Orenburg, fue el Ekaterimburgo el que se hizo con el título al saber jugar mejor los minutos finales.
El UMMC es el primer club que gana la Euroliga tras perder la final del año anterior desde Gambrinus Brno en 2006. Y el segundo club de toda la historia que vence, tanto las semifinales como la final (ya sea a partido único o a ida y vuelta) por seis o menos puntos, tras el Slavia Sofía en 1963.
La estrella de las rusas, Diana Taurasi, anotó 22 puntos en la final y consiguió su sexta Copa de Europa, cuatro con Spartak Moscú y dos con el UMMC.
La mejor final de la historia, porque enfrentó por primera vez en la historia a dos equipos tricampeones continentales, Zenit Kazan y Trentino, fue también una de las más emocionantes y de las de mayor nivel de juego.
Trentino ganó los dos primeros sets por 25-23 y 25-22, pero luego, siempre dentro de una gran igualdad, fue a remolque del equipo ruso, que completó la remontada ganando 25-17,27-25,15-13.
Nadie ganaba en Final Four recuperando dos sets desde 2002, cuando Iraklis Salónica remontó al ZAKSA Kędzierzyn-Koźle polaco en el partido por el tercer puesto. La anterior remontada que garantizó el título de la Copa de Europa la logró el CSKA Moscú en el último partido de la liguilla final de 1986 ante el Parma, que ganando también habría sido campeón. Mientras que en una final propiamente dicha, a partido único, ida y vuelta o serie de playoffs, nunca había ocurrido.
Es el quinto título seguido de clubes rusos, la segunda mejor racha en la historia de la Copa de Europa, por detrás de las nueve consecutivas de los italianos entre 1992 y 2000.
Nico Rosberg dio un pase de gigante en Shanghái (China) de cara a conseguir su primer título mundial. El alemán aprovechó a la perfección todos los contratiempos de Hamilton –que salió 22º y último y tuvo que hacer cinco paradas en boxes– para lograr su sexta victoria consecutiva. La ventaja sobre su compañero de equipo ya es de 36 puntos, la más amplia a estas alturas desde el año 2000, cuando Michael Schumacher tenía 21 puntos de renta y las victorias daban diez puntos.
Rosberg es el primer piloto de la historia que acaba una temporada ganando las tres últimas carreras y empieza la siguiente con otros tres triunfos.
Solo una vez, y con accidente de por medio, alguien desperdició tanta ventaja y perdió el título mundial. Fue Niki Lauda en 1976, cuyos catorce puntos de ventaja tras la tercera carrera (con una temporada de dieciséis carreras y con nueve puntos para el vencedor de cada Gran Premio) no fueron suficientes por su terrible accidente en la décia carrera en Nürburgring y la remontada de James Hunt.
Esta semana le llegó el turno a las clásicas de las Ardenas, con la disputa de la Amstel Gold Race. En la carrera neerlandesa venció, como hace cuatro años, el italiano Enrico Gasparatto, esta vez enrolando en el modesto equipo belga Wanty Groupe Gobert. Gasparatto es el sexto ciclista que gana esta prueba más de una vez, el tercero que tarda cuatro años o más en volver a ser campeón (11 tardó Knetemann y 5 Rolf Järmann) y el primer italiano bicampeón de la carrera.
Sorpresa histórica en la octava de las diez citas de la temporada en Singapur. Kenia, país con solo dos finales en sus 113 torneos disputados, no se conformó con volver a jugar el partido decisivo sino que en él barrió a Fiyi por 30-7 para lograr el primer título de su historia. Fue, además, la segunda victoria de Kenia ante Fiyi en 30 enfrentamientos, tras los cuartos final de Londres 2013, cuando venció por 20-7.
Inglaterra cortó en semifinales del torneo de Langford (Canadá) la racha de tres títulos consecutivos de Australia y remató el trabajo en la final superando a Nueva Zelanda por 31-14 para conseguir el segundo título de su historia, tras el de Houston 2013, que fue el segundo torneo de las recién creadas Series Mundiales femeninas.
Duelo vasco en la gran final con triunfo muy contundente del gran favorito, el Bera Bera donostiarra sobre el Zuazo de Barakaldo. El resultado final de 33-17 es el más abultado en la historia de la final de Copa de balonmano femenino en sus 37 ediciones, por delante de la de 1985, en la que el Íber Valencia ganó por 24-9 al Mades Onda castellonense.
Rafael Nadal aprovechó la 100ª final individual de su carrera para ganar por novena vez en la tierra monegasca. Con este título, el español iguala el récord de 28 Masters 1000 de Novak Đoković (derrotado inesperadamente en segunda ronda por el checo Jiří Veselý) y se convierte en el primer tenista (hombre o mujer, en individuales o en dobles) que gana nueve veces un mismo Masters 1000 o su equivalente femenino Premier Mandatory/Five.
Los franceses tuvieron una destacada actuación en el torneo. Monfils llegó a la final individual, algo que no ocurría desde 2000, cuando Cédric Pioline se hizo con el título. Y en dobles, los campeones fueron Herbert y Mahut, que han ganado los tres Masters 1000 de este 2016 y son la primera pareja francesa campeona en este torneo desde Guy Forget y Yannick Noah en 1986.
Por tercera vez en la historia, las dos semifinales necesitaron del quinto punto para decidirse. Pasó en 1997, también en 2007 y otra vez en 2016, con la República Checa ganando en Suiza y Francia eligiendo tierra batida para superar a los Países Bajos y ganarse el derecho de disputar la final en casa porque su anterior eliminatoria ante las checas, las semifinales del año pasado, se jugó en Ostrava. Para ambos países será la quinta final de su historia.
Aparte de que se necesitó del doble para saber qué equipo se clasificaba, el otro aspecto que llama la atención es que Francia ha llegado a la final jugando todos los puntos posibles con tan solo dos tenistas, Caroline García y Kristina Mladenović, algo que no pasaba desde 1988, cuando la URSS disputó sus cuatro rondas previas a la final (todas a tres partidos) utilizando únicamente a Natasha Zvereva y Larisa Savchenko.
Doble triunfo etíope en la maratón de Boston gracias a Lemi Hayle (categoría masculina) y Atsede Baysa (femenina). Es la primera vez en la historia que atletas etíopes ganan en Boston en ambas categorías y también la primera vez que los etíopes vencen dos veces consecutivas en la maratón masculina de Boston, porque el año pasado el campeón fue Lelisa Desisa.
* David Fernández es estadístico.
– Foto: Federación Española de Rugby
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