"Todo lo que no está creciendo está muriendo. Crecer significa aprender y transformarte cada vez en una mejor versión de ti mismo". Imanol Ibarrondo
Fútbol 2011-2012 / España / Liga BBVA 2011-2012
1.- Partido grande, intenso, arrebatador. Partido maravilloso de ida y vuelta. Los entrenadores no podrán estar descontentos porque esa ha sido su mutua propuesta. Al Bernabéu y a correr. El escenario idóneo para ambos equipos, exquisitos en la pradera amplia, el sprint prolongado y la continuidad vertiginosa.
2.- Propuesta ambiciosa de Mourinho desde la alineación, con Xabi Alonso de mediocentro único y Granero y Kaká de interiores. Un 4-2-3-1 flexibilizado a 4-3-3. Athletic bielsiano puro, plantado para saltar y correr. Con esos mimbres, el partido había de ser, obligatoriamente, un partido a la carrera.
3.- El choque de trenes ha tenido mucho de legendario y algo de desconcertante. Legendario por la despilfarrante energía que han vertido sobre el césped, que habrá terminado agotado de tanto como lo han pisado arriba y abajo. Desconcertante por el enfrentamiento entre dos iguales tan semejantes que han buscado un plan tan idéntico. Dos trenes lanzados a toda velocidad y lanzados uno contra el otro sin miramientos.
4.- En este vértigo no ha habido tiempo para la calma. Los culpables han sido, entre varios más, Özil, Cristiano y Kaká en un bando y Muniaín, Ander, De Marcos y Susaeta en el otro. Más que correr, han galopado, pasando por encima de cuanto encontraban por delante. Con precisión quirúrgica, Javi Martínez ha servido para el empalme de Llorente. Con tozudez germánica, Marcelo se ha hecho hueco entre los defensores bilbaínos para empatar.
5.- Errores en la definición han matado al Athletic, que ha llegado a someter a los locales durante un buen tramo del primer tiempo. Esos errores le han dado alas a un Madrid que sólo necesitaba una brisilla para echarse a volar. Por el camino, los medios han quedado sepultados por los corredores, que les pasaban por encima como las cuádrigas con los caídos. Los rojiblancos han tenido al Madrid contra el alambre, sostenido únicamente por la ineficiencia rematadora de los de Bielsa.
6.- El despliegue entre líneas de Muniaín ha sido un problema indescifrable para el Madrid. No parece casualidad que al equipo de Mourinho le cueste defender a los especialistas en moverse en esas zonas vacías. Los defensas marcan con precisión cuando pisan su línea del área y los medios cubren con énfasis si el rival conduce de cara. Pero cuando aparece un Muniaín entre espacios, a la espalda de los mediocentros, ahí se produce un cortocircuito que el equipo merengue no atina a atajar.
7.- Al Madrid no le ha fallado la eficacia, lo que no es noticia sino esencia de este equipo bárbaro. Tras el batacazo del miércoles y las turbulencias de la semana, cualquier otro vestuario habría salido tibio, pero el de blanco ha surgido troyano. Luchador, combativo, impertérrito ante las olas. Con ausencias, con problemas y con algún jugador lejos de la buena forma. Pero impertérrito.
8.- Cada línea ha tenido su mariscal: Ramos atrás, Özil en el enganche, Benzema arriba. Marcelo ha dado lo mejor de sí en ofensivo y lo menos bueno defendiendo. Kaká y Granero, dos ilustres ignorados, se han fajado con acierto en un escenario que le iba de cine al brasileño, pero podría haber sido una ratonera para el madrileño. Cristiano, feliz con espacios libres y poseído por el ansia, ha galopado hasta el agotamiento.
y 9.- Del Athletic, criticar una de los principios fundamentales de Bielsa: de su línea de medios siempre salta un jugador a por el rival que conduce el balón e inicia una persecución individual. La virtud de la medida es la presión asfixiante que conlleva. El defecto, los pasillos que regala. Esos marcajes individuales son un espejo de dos caras y hoy se ha caído del lado malo.
– Fotos: Víctor Carretero – Ángel Martínez (Real Madrid)
©2024 Blog fútbol. Blog deporte | Análisis deportivo. Análisis fútbol
Aviso legal