Two-Nil To The Atlético

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Two-Nil To The Atlético

por ALBERTO PEREZ el 18 abril, 2014 • 21:21

1.- El título de esta crónica estaba decidido dos minutos antes de que el partido terminara. El marcador final altera los términos, pero no el sentido. George Graham hizo famoso el One-Nil To The Arsenal en la década de los noventa. Este Atlético maneja tan bien ese marcador como el equipo londinense. Si además marca otro, mucho mejor.

2.- Por el Calderón pasaron durante todo el partido imágenes de título, del que se gana o el que se pierde. Las caras y primeros planos del Plus mostraban rostros de enorme tensión dramática. Algo extraño rondaba por el Manzanares. No era un partido más. Ya no queda ni uno de esos.

3.- El estado de sufrimiento extremo lleva a la ansiedad, y la ansiedad bloquea. Durante muchos minutos el Atleti corrió ese riesgo. En algunos momentos lo acusó, en la mayor parte salió demasiado bien parado para lo que podía dejarse en el camino. Hasta a la grada le costaba gritar y a Simeone controlarse.

4.- Frente al Elche se han visto las imágenes del Simeone más angustiado desde que dirige al Atleti, o al menos eso creído deducir de su lenguaje gestual. Los minutos pasaban y su equipo caminaba por el alambre. Jugar finales todas las semanas desgasta a cualquiera, y cuanto más alto estás, más miedo da caer al vacío.

5.- El líder perdió su oportunidad de pasar una tarde amena en el primer cuarto de hora. Salió bien, con más balón que nunca y combinando muy cerca del área. No tuvo grandes oportunidades, pero el Elche no salía y el aroma de que algo importante iba a pasar impregnaba la portería de Manu Herrera.

6.- Se rehízo el Elche y el Atlético se descompuso. Pueden contarse con los dedos de una mano las ocasiones en las que ese equipo con mayúsculas deja de serlo. Los de Simeone se desajustaron y sus jugadores no terminaron de entender el cambio a tres en el medio que ordenó el argentino. Cayeron a la lona y les levantó Courtois.

7.- De no ser por el belga, el Elche se habría adelantado en el marcador. Sacó dos excelentes manos a Javi Márquez y Sapunaru y desvió con la mirada un clarísimo contragolpe culminado por Carles Gil. El gigante volvió a aparecer y seguro que al Chelsea le dan ganas de llevar el contrato a los tribunales por encima de la UEFA. Por supuesto no lo harán y el martes jugará.

8.- Merece una mención el Elche. Con un delantero algo más fiable estaría en mitad de tabla. Son buenos tácticamente y juegan con buen gusto. Tocaron mucha pelota en el primer tiempo juntando a peloteros interesantes como Márquez, Coro, Rivera y sobre todo Carles Gil. Da gusto que haya equipos que no regalan los partidos contra los grandes y más después de ver la alineación del Almería en el Bernabéu.

9.- A Simeone le tocó reflexionar en el descanso. Su equipo no controlaba el partido y tenía que intervenir. Metió de entrada a Raúl García por Adrián y después a Diego por Koke y a Sosa por Villa. Menos delanteros y más centrocampistas. A partir de ahí más ocasiones, goles y juego. El rendimiento se basa en la fuerza de un bloque que juega junto. No hay más.

10.- Mejor que el Atleti no tenga tandas de penalti este año. Cumplió su media: de cada dos mete uno. Costa parecía haber agotado el cupo y el turno fue para Villa. Con el Guaje tampoco pudo ser. Cualquier equipo se viene abajo fallando el penalti que abre el partido. Este resurge con más fuerza y para liarlo más Costa tuvo su penalti para sentenciar, que esta vez metió.

11.- Lo que desatascó el partido fue la cabeza de los goles importantes. Debe ser agotador que una defensa se multiplique para neutralizar los remates de Godín y Rául García en el balón parado y aparezca otro por ahí. Ese fue João Miranda, como aquel día en el Bernabéu. Lo celebraron en el fondo, envueltos por banderas. Conmemoraron exhaustos de cansancio y tensión.

12.- El búfalo llegó herido y es un milagro que siga en pie. Le pegan sin misericordia. Hoy Rivera debió ser expulsado directamente por un latigazo sin mesura. Sin jugar un partido brillante, de hecho pareció impreciso, Costa no se va de un partido sin generar multitud de cosas positivas. Lleva 27 goles, menos que cicatrices.

y 13.- Es la hora del Chelsea. Otra final y en otra competición. El equipo ha parecido agotado en ciertas fases aunque creo que más por la tensión acumulada. Contra los de Mou será diferente porque no es tan favorito como para sentirse ansioso por no marcar. Estén como estén competirán de verdad la eliminatoria porque no hay equipo que resista más que este.