Una de las principales conclusiones que mayoritariamente se pretendía extraer de la pretemporada del Barça era si Bartra estaba capacitado para enfrentarse a los mejores delanteros del mundo, dando por hecho prácticamente que contra los demás sí lo estaba, lo que no sería descabellado afirmar que se ha confirmado. Por ello, aguardábamos con expectación ver cómo se desenvolvía frente a Wayne Rooney o Zlatan Ibrahimovic para formar nuestra opinión y, sobre todo, que Tito Vilanova hiciera lo propio.
Sin embargo, él mismo nos dio de bruces con la puerta de nuestro desconocimiento al dejarle en el banquillo en ambos encuentros. Y es que dos partidos de pretemporada son totalmente insuficientes para extraer tan difícil conclusión, tanto en un sentido como en otro. En caso de que estos enfrentamientos se hubieran resuelto con un balance negativo, ¿habría de haberse crucificado a Marc y quitárselo de encima como la peste? Si se hubiera dado el resultado contrario, ¿tendríamos que hablar ya de que peligra la titularidad de Piquè, Mascherano o Puyol?
Obviamente, ambas conclusiones habrían sido erróneas, pues es demasiado pronto para juzgar, y nunca está de más recordar que llegar al primer equipo, por muy bueno que seas (a no ser que te llames Leo Messi), no significa bajarse directamente del ascensor, pues el riesgo de caída es brutal. Tener ficha con los mayores únicamente significa dar un paso más en un proceso que dista de haber finalizado.
Por ello, las experiencias fuertes demasiado tempranas en uno u otro sentido (véanse los casos de Bojan o Tello, única excepción hecha por Pep Guardiola), suelen tener fatídicas consecuencias. Esto implica que, una vez formando parte del primer equipo, se han de seguir superando etapas de manera gradual, para evitar ya sea un éxito demasiado precoz y, en consecuencia efímero, o un fracaso ante un reto mayúsculo antes de estar preparado para el mismo.
Así, antes de enfrentarse a Ibrahimovic, Bartra ha de hacer lo propio con Gameiro: duelo que saldó con éxito. Antes que con Rooney, con Welbeck: también exitosamente. Y antes de hacerlo contra los mismos, Benzema o Mario Gómez en partidos oficiales, habrá de superar primero a Aguirretxes, luego a Soldados, más tarde a Llorentes y finalmente a los primeros.
No obstante, lo dicho no quita que la pretemporada de Bartra haya sido más que notable y que le haya hecho merecedor de que se le dé la oportunidad en lugar de optar por algún fichaje que en ningún caso garantizaba un rendimiento descomunal. Eso sí, salvo catástrofe en forma de lesiones, tendrá que ir ganándose el sitio poco a poco y recordar una vez más la que tal vez sea la frase más paradigmática de Tito: “Si Iniesta no fue titular hasta los 23 años, ¿qué os hace pensar que vosotros sí podéis serlo?”.
* Rafael León Alemany. En Twitter @_rafaleon_
– Fotos: Marc Casanovas (Sport) – EFE
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