Mundial 2014 Calificación / Selecciones / Fútbol 2012-2013 / Fútbol
1.- La superioridad de España como conjunto sobre Finlandia no se puede cuestionar. El partido tenía un escenario claro y previsible: España con el balón y Finlandia defendiendo en su campo. Después España debía atacar bien y casi nunca lo logró, Finlandia se defendió con orden y al final tuvo el premio de conseguir un empate a uno sorprendente respecto a la diferencia real entre uno y otro, pero no tanto tras ver lo sucedido sobre la hierba de El Molinón.
2.- Que España iba a tener el balón era algo obvio, pero después tenía que atacar bien y casi nunca lo hizo. España formó con Busquets por delante de la línea de cuatro defensas, con Iniesta cerca de él en la elaboración. Cazorla, Cesc y Silva intercambiaban sus posiciones y el Guaje Villa buscaba espacios donde era casi imposible lograrlos.
3.- Finlandia sólo tiene un registro y lo cumplió como era esperado. Dos líneas de cuatro y Pukki como hombre más adelantado, pero en campo propio durante todo el primer acto. Pukki no es delantero centro aunque en el Schalke 04 ya ha jugado ahí tras la lesión de Huntelaar. Finlandia mantuvo el orden en todo momento y el paso de los minutos le permitió creer cada vez más en su propuesta, aunque tampoco podía cambiarla.
4.- España no atacó bien por varios motivos. El primero porque sus laterales, Arbeloa y Jordi Alba estaban y no aparecían, Cazorla se ahogaba en los amagos, Cesc no tenía ningún espacio que atacar y las combinaciones entre Iniesta y Silva necesitaban de tal precisión que las posibilidades de éxito eran de una entre mil. Para colmo de males, Villa se movía por la frontal siempre en línea sin posibilidad de que le llegase un balón.
5.- España no ganaba casi nunca la línea de fondo con ventaja y en las pocas ocasiones que lo hizo, especialmente con Arbeloa en la banda derecha, los centros carecieron de precisión. Finlandia despejaba, Busquets recuperaba pero el segundo y el tercer pase de la jugada ofensiva se dirigía hacia la trampa una y otra vez.
6.- El 0-0 al descanso era consecuencia directa de lo visto sobre el césped. Se puede tener la posesión como hecho contrastado pero no extraer ninguna ventaja de ella y hoy a España le ha pasado eso en todo el primer acto. El partido pedía desequilibrio por fuera y quizá una referencia más clara arriba. Entró Pedro por Cazorla para agitar la banda izquierda.
7.- Antes que el cambio se pudiese notar, Sergio Ramos, en su partido número 100 como internacional, adelantó a España de cabeza a la salida de un córner que botó Silva. Los primeros minutos tras gol hacían presagiar que podrían llegar más. Negredo entró por Villa quizá buscando esa referencia de ‘9‘ puro y Mata sustituyó a Cesc, que jamás pudo atacar un espacio en el día de hoy.
8.- El problema de España tras marcar fue su incapacidad para mantener un ritmo alto, al menos para instalar sus jugadores en campo contrario y recuperar más arriba. Eso permitió a Finlandia sufrir algo menos y amagar con asomar. En la única jugada elaborada de todo el encuentro por parte finlandesa, una combinación en tres pases género un centro desde la banda izquierda que Pukki envió a la red atacando un espacio. ¿ Les suena?
9.- Tras el gol del empate, España subió el ritmo de nuevo pero con un mal compañero de viaje, la precipitación. Aún así tuvo hasta tres ocasiones de hacer el segundo gol, pero finalmente no llegó. Román Eremenko, el buen mediapunta del Rubin Kazan, apareció de nuevo en la segunda y única contra que pudo dibujar Finlandia, pero Busquets se interpuso en su disparo.
y 10.- Es previsible que España recupere a Xabi Alonso y a Xavi Hernández de cara al martes en Saint-Denis. Por encima de otras consideraciones, están llamados a ser clave para atacar mejor. El dominio del balón no será tan contundente como ante Finlandia, pero España tiene que atacar mejor de lo que lo ha hecho hoy para lograr una victoria en tierras galas.
* Alberto López Frau es periodista.
– Foto: Rafa Rivas (AFP)
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