Presión tras pérdida (1)

por GUILLERMO SANZ el 15 abril, 2013 • 13:58

“Éste año el Barça defiende muy mal” es una frase que he escuchado y leído tantas veces que he podido llegar a cansarme. Una frase que ha estado en boca y en los teclados de una gran mayoría de los que opinan –profesionalmente– sobre el club catalán. Lo que nadie me ha explicado, y me interesa saber, es por qué el F. C. Barcelona no recupera el balón tan arriba y por qué encaja tantos goles. Como presiento que nadie va a explicarme con precisión –porque requiere un trabajo y tiempo– las causas de que con Tito Vilanova se juega con una defensa algo más débil, he decidido analizar y explicarlo yo.

Las capturas que hay a continuación son jugadas del F. C. Barcelona en el partido contra el Paris Saint-Germain, donde se consiguió recuperar el balón rápido tras un pérdida en ataque organizado.

Os comento y me gustaría pediros que intentárais observar una serie de patrones que he encontrado en las jugadas donde se ha efectuado correctamente este tipo de presión y compararlas con las siguientes imágenes, donde he reunido una serie de jugadas donde la presión ha sido ineficaz y el equipo rival ha podido contraatacar.

Zona de pérdida: en los tres ejemplos se pierde el balón encarando a la última línea defensiva rival o incluso a su espalda, por lo que el espacio donde se inicia la presión es muy cercano o dentro del área rival.

Organización colectiva de jugadores: por detrás del balón, pero próxima a la zona donde sucede la pérdida o hay que aproximarse velozmente para poder disuadir la posible combinación con los apoyos cercanos (suelen ser los movimientos que hacen los jugadores más adelantados, es decir, Pedro Rodríguez, David Villa, Cesc Fàbregas, Andrés Iniesta y Xavi Hernández).

Coberturas y vigilancias: tras esa primera presión intensa, y por culpa de dicha aproximación a la zona con balón se pueden generar líneas de pase en espacios lejanos, que será donde normalmente vaya el balón, ya que en corto no se podrá progresar. En esta vigilancia no suele haber una marca para cada hombre, pero se debe estar entre dos jugadores, y aprovechar el tiempo que se tarda en que llegue el pase para anticipar (esta vigilancia la debe hacer Sergio Busquets, el lateral del espacio contrario y centrales).

En las próximas imágenes os encontraréis diversas jugadas y el gol encajado por el F. C. Barcelona en el encuentro frente al PSG, donde no se consiguió recuperar el balón tras un pérdida en ataque organizado. Si os fijáis, no se cumplen los puntos anteriores.

Zona de pérdida: en numerosas ocasiones el PSG consiguió robar en la línea del balón. Hicieron un trabajo defensivo de gran nivel y recuperaban ellos o se lo dejaban muy fácil a sus compañeros.

Organización colectiva de jugadores: David Villa y Xavi Hernández suelen estar por delante de la línea de balón y no muestran una especial intención de recuperarlo con velocidad. Jordi Alba, al tratar de doblar a Pedro Rodríguez, deja un gran espacio a su espalda. El caso de Dani Alves es distinto, porque suele estar pegado a la banda, muy lejos de la zona de juego y le cuesta regresar a su posición.

Coberturas y vigilancias: Sergio Busquets suele ser un trabajador espectacular trabajando para anticipar y recuperar los pases que superan a Xavi Hernández y Andrés Iniesta, pero contra el PSG se dijo que hizo un mal partido. Pues no fue así, tan sólo obedeció a su entrenador. Si uno se fija en el trabajo de Sergio Busquets, su tarea fue garantizar que Ezequiel Lavezzi no iniciase las transiciones y por ello lo persiguió ahí a donde iba –en la jugada del gol se le puede ver pegado a la banda izquierda–. Lavezzi se movía en dirección a la cal, hacia los espacios que dejaba Jordi Alba en sus internadas y, por supuesto, Sergio Busquets le perseguía. Así pues, quedaba un gran espacio entre Gerard Piqué-Adriano Correia y Xavi Hernández-Andrés Iniesta que aprovechaba Zlatan Ibrahimovic, Lucas Moura o Javier Pastore para lanzar los contraataques.

* Guillermo Sanz.

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