A la tierna edad de 16 años abandonó la calurosa ciudad que lo vió crecer para embarcarse en una travesía muy habitual para los jóvenes españoles en los últimos años. Un viaje que lo llevó hasta el Liverpool de la mano de Rafa Benítez para formarse en sus categorías inferiores.
Casi cinco años después, el chico ha crecido y ya decide partidos en la Liga BBVA, donde está de paso por una ciudad muy parecida a Cádiz. El Almería acordó una cesión con el Liverpool para esta temporada y de momento la operación ha sido un win-win, aunque en las últimas semanas haya perdido el nivel mostrado en la primera vuelta.
Jesús Fernández, Suso, ha jugado en todas las categorías inferiores españolas hasta la sub-21 y ha disputado 1.652 minutos en Liga BBVA y 601 en la Premier League, además de haber debutado ya en Europa League la temporada pasada con el Liverpool, y todo esto con apenas 20 años.
Tiene un físico perfecto para desarrollar sus condiciones técnicas, es decir, destaca por ser un futbolista con una buena arrancada y mucha agilidad en el tronco inferior, donde apoya su habilidad en el uno contra uno. Su fortaleza en este ámbito radica en que es un jugador veloz y bastante fibroso, lo que le permite no ser desplazado con facilidad por rivales más poderosos que él.
Zurdo cerrado, con una calidad impresionante para entrar en diagonal al área rival, Suso tiene la capacidad de correr, organizar la jugada y después correr tras un rival para detener un avance, aunque en la fase defensiva destaca más por su ímpetu que por su calidad defensiva. Tiende a caer en la desesperación de recuperar el cuero sea como sea y ha cometido 28 faltas en la Liga BBVA y recibido 9 tarjetas, cifras impropias de un jugador de tres cuartos de campo.
Suso tuvo que madurar muy rápido debido al fútbol: a los 15 años ya estaba negociando con el Liverpool su fichaje, era el centro de atención de su club y ciudad apenas siendo un niño, y esto, con una mala gestión por parte del entorno, podría haber sido fatal para él.
Dentro del terreno de juego es un jugador capaz de tomar los galones del equipo y tomar muy buenas decisiones, aunque no lo haga constantemente, ya sea debido a la edad o porque en ocasiones su técnico, Francisco, le otorga funciones muy específicas que no le permiten descolgarse con tanta facilidad. De momento, en los partidos ante rivales superiores tiende a diluirse y pasa desapercibido, pero cuando tiene la ventaja ante rivales que no exigen mucha concentración defensiva ha llegado a ser bastante útil.
El gaditano tiene un carácter complicado, como ya se demostró en la selección española, cuando fue sancionado en la sub-17 por desobedecer al seleccionador Ginés Meléndez. A su vez, en Almería también fue relegado al banquillo un par de jornadas debido a que el día de su cumpleaños no se presentó al entrenamiento vespertino. A modo de conclusión, el año pasado fue sancionado con 10.000 libras esterlinas (unos 12.000 eruos) por la federación inglesa por bromear con José Enrique en las redes sociales al decirle “gay”.
Este ámbito es donde Suso más destaca, y por el cual puede convertirse, con el paso de los años, en un jugador decisivo. Tiene una conducción muy elegante y efectiva; su explosividad en corto y gran golpeo de balón le convierten en un gran elemento para jugar al contragolpe, aunque también posee su manejo de balón excelso y maneja muy bien el tempo ante defensas cerradas.
Además, tiene mucha calidad en el uno contra uno y llega a ser resolutivo con lanzamientos lejanos; en el Almería es el encargado de lanzar los córners y comparte faltas directas con otro especialista a balón parado como es Verza. No es un extremo de banda, pero puede funcionar como tal –en la banda izquierda– por su depurado centro y su calidad, aunque quizá le falta velocidad en carrera y le sobra –para ocupar esa posición– visión de campo y tendencia interior con balón.
En sus comienzos, Suso jugaba de mediapunta o incluso de interior, pero desde la temporada pasada, cuando Brendan Rodgers comenzó a contar con él en el primer equipo del Liverpool, comenzó a jugar como falso extremo por la derecha, y el resultado fue buenísimo. Por sus condiciones, podría convertirse en un gran ‘10’ o mantenerse en la banda, donde ha resultado bastante útil esta temporada en la U. D. Almería de Francisco.
Salvando las distancias, Suso es un jugador con características similares a las de Mesut Özil. El gaditano es zurdísimo y uno de sus movimientos favoritos es encarar hacia el centro partiendo desde la derecha para encontrar posición de disparo o para asistir al jugador de la banda contraria, al espacio. En el Almería está brillando en esa posición, con Aleix Vidal –verticalidad pura– en el extremo opuesto y con una línea de tres centrocampistas por detrás, o en su defecto, con un jugador de mucha intensidad y labor defensiva como Fernando Soriano.
Su calidad le permite ser un futbolista que, aun jugando en la banda, participa activamente en las labores de creación de su equipo. Casi todas las acciones de peligro pasan por sus botas y siempre está a la espera de un posible desmarque para tirar un pase imposible.
Cuando la defensa rival está adelantada, Suso realiza labores más ofensivas; sus desmarques suelen ser para romper al defensa rival y disfruta mucho conduciendo y regateando rivales, aunque tiende a errar pases, algo fruto de la edad. Si el equipo rival se encierra, el gaditano espera a la espalda de los mediocentros rivales e incluso suele bajar a la sala de máquinas para sacar el balón y comenzar a crear jugadas.
Tiene mucha inteligencia para leer los movimientos de sus compañeros, su golpeo en largo es muy aceptable y eso le permite ser un buen armador de contragolpes. Es habilidoso en conducción, siempre con tendencia interior, y su disparo también es peligroso para los rivales. Si trata de desbordar, lo hace siempre con regates cortos y no exhibe gran velocidad.
Es un jugador que suele arriesgar bastante en la zona de tres cuartos y que tiene pérdidas de juvenil, pero que a veces cuelga balones con la precisión de un cirujano. Suso es así. Su gran acierto en los pases le convierte en el máximo asistente de su equipo y le coloca entre los cinco mejores de la liga en ese apartado.
Suso aporta en la creación de juego y también en la fase ofensiva, todo ello con mucha calidad y con utilidad para su equipo, pero en el plano defensivo su colaboración se limita a detener contragolpes y a derribar a su par tratando de luchar por el balón.
Su nula capacidad para robar o hacer entradas le convierte en un jugador muy tarjetero y que solo realiza labores defensivas para recuperar balones cerca de él.
Donde sí puede aportar es en las coberturas puntuales al lateral. Puede cubrir una subida y detener con una infracción un posible contragolpe, pero no es apto para realizar coberturas permanentemente. Jugando por la derecha ha sabido convivir con dos carrileros que suelen ser bastante largos como Nélson –titular, actualmente lesionado– y Rafita, que en sus comienzos fue extremo.
* Roberto Testas.
– Foto: Deia
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