1.- Se rompió una racha que parecía inacabable. El Calderón deja de ser inexpugnable esta temporada y las cosas no pasan por casualidad. Ocurrió justo el día en que dejaron de empujar todos juntos. La grada se enzarzó en una disputa que enfrentaba al fondo sur con el resto. Perjudicado: el equipo
2.- El Atlético se ha encontrado con un grave problema que tiene difícil solución. Se posiciona enfrente de los ultras mientras en la mayoría de campos siguen campando a sus anchas. Le tocó la patata caliente de lidiar con los violentos y el asunto está rompiendo la magia. O cambia el clima o el equipo se va a alejar de los títulos.
3.- El Vicente Calderón estuvo frío. Los civilizados empezaron animosos y fueron callando a falta de alguien que empiece a entonar. Se fue haciendo poco a poco el silencio porque el fondo sur estaba callado. Quien entra al campo para no animar no debe amar tanto al club como dice.
4.- Ambiente raro y partido infectado. Empezó bien el Atlético que se fue apagando poco a poco. La posesión, los robos y el agobio eran locales. Sin generar grandes ocasiones, dejaron al Villarreal sin tirar a puerta.
5.- La actuación de Pérez Montero se resume así: un gol mal anulado, un penalti no señalado, una ristra de faltas no pitadas y otras que no lo eran, tres minutos de prolongación tras pérdidas de tiempo constantes del Villarreal. Pongan ustedes la nota.
6.- Tras escamotear a los amarillos un penalti por clara mano de Gabi, se inició la segunda parte, en la que el Atlético sumó sus mejores minutos. La culminación de todo ello fue un cabezazo limpio como una patena de Mandzukic. El gol fue anulado sin motivo aparente. Ahí se acabó el Atlético.
7.- Antes la había tenido el propio Mandzukic y también Godín. Entonces apareció la frustración en el campo y en el banquillo. Los cambios solo ayudaron a partir al equipo. Se fue Gabi, que estaba por encima de la media, y entraron Griezmann y Cerci para aportar poco y contribuir al desbarajuste general.
8.- El corazón rojiblanco le llevó a perder el sitio y a usar el corazón más de lo debido. Quedaba expuesto a un contragolpe y llegaron varios. El definitivo fue culminado por una de las revelaciones del campeonato, el argentino Vietto. Bello su recorte a Godín antes de ajusticiar a Moyá.
y 9.- Se rompe una racha brutal a favor de los rojiblancos y lo que es peor: un estado de felicidad donde ir cada día al Calderón era sumar las gargantas de 55.000 personas. Tan real es que no se puede permitir ni una sola concesión al violento como que el silencio del fondo sur perjudica al equipo. Si además llega la derrota en ese primer momento, lo peor es que el grupo se crece.
* Alberto Pérez es periodista.
– Foto: Ángel Gutiérrez (Atlético de Madrid)
©2024 Blog fútbol. Blog deporte | Análisis deportivo. Análisis fútbol
Aviso legal