"El modelo de juego es tan fuerte como el más débil de sus eslabones". Fran Cervera
Crónicas 2015-2016 / Internacional / Champions League 2015-2016 / Fútbol
1.- Hay victorias que por el marcador final pueden llevar a equívoco. El fútbol es un juego de momentos, y cuando mejor estaba el Shakhtar llegó el error de su portero Pyatov y el gol de Benzema. El Madrid había hecho antes unos primeros 20 minutos francamente buenos, con fluidez en la circulación, intercambio permanente de posiciones arriba y buenas incorporaciones de los laterales, pero llevaba ya varios minutos perdiendo fuelle. Debe estar satisfecho con la victoria, pero analizando los aspectos positivos y negativos que dejó el partido, de ambos hubo.
2.- El Shakhtar es un equipo de autor, y ese no es otro que Mircea Lucescu. El veterano técnico rumano lleva en el equipo ucraniano desde 2004 y temporada tras temporada se va adaptando a la venta de sus mejores futbolistas. Se arma siempre en torno a un sistema 4-2-3-1. Este año, pese a que tiene menos calidad que en otras temporadas, sigue teniendo jugadores interesantes. Es un equipo con un punto camaleónico. En el torneo local asume su condición técnica superior y es un conjunto asociativo, que toca bien y domina al rival a través de la posesión. En la Champions, ante rivales como el Real Madrid, el contexto es muy distinto. Durante la primera media hora asumió un rol más contragolpeador porque tiene jugadores capaces de hacer daño también así.
3.- El Madrid formó con su clásico 4-2-3-1 en fase ofensiva, habitual con Rafa Benítez, mutando a un 4-4-2 en defensa, ideal para que el equipo no se parta. El Madrid se instaló en campo contrario de inicio; Kroos y Modric estuvieron finos en la distribución, Isco y Cristiano Ronaldo participaron con asiduidad en los ataques, cada uno en su estilo, y Benzema se fue asociando con cualquiera que pasara por allí. El resultado de todo lo comentado fue un buen primer tramo de partido blanco, aunque sin acierto de cara a gol. La mejor jugada la dibujó Cristiano Ronaldo con varios regates por dentro para terminar asistiendo a Benzema. Karim intentó congelar a cuantos defensas se interponían en su camino y, finalmente, tras varios amagos su disparo se le fue arriba.
4.- El Shakhtar asomaba de cuando en cuando y con cierta timidez en campo contrario. Con el paso de los minutos el menor ritmo de juego del Madrid se fue convirtiendo en su mejor aliado. Alex Teixeira, el mejor jugador del equipo en la actualidad, no pudo encarar nunca con peligro por su carril central ni exhibir sus magníficas condiciones para la conducción. Sin embargo, Marlos, a pierna cambiada en la derecha, y Taison, con su cambio de ritmo en la izquierda, sí emitían señales de vida. El partido estaba en esas vicisitudes cuando en tres minutos se lesionó Gareth Bale y llegó el error de Pyatov que significó el tanto de Benzema. Cambió el escenario radicalmente.
5.- Rafa Benítez acertó con la entrada de Kovacic por Bale. Envió a Isco al costado izquierdo y juntó tres medios de buen pie por dentro: Kovacic, Kroos y Modric. Carvajal y Marcelo equilibraban a buena altura con sus subidas al ataque. El Madrid ya no asedió en los últimos 15 minutos del primer acto al Shakhtar, pero el conjunto ucraniano tampoco fue capaz de dar un paso adelante y confirmar las buenas sensaciones que había comenzado a dejar antes del error de Pyatov.
6.- Cuando solo habían transcurrido cinco minutos de la segunda parte, Stepanenko vio la segunda cartulina amarilla por una dura entrada abajo sobre Sergio Ramos. La expulsión significó la defunción definitiva del Shakhtar. Ya con diez hombres sobre la hierba y sus extremos muy atrás, especialmente Taison, que retrasó su posición, casi como doble lateral izquierdo por delante de Azevedo, la solución que dispuso Lucescu para minimizar los daños de estar con un hombre menos, y sumado al hecho que el Madrid acumulaba muchos jugadores de talento en tres cuartos de campo, el partido se convirtió en un monólogo blanco.
7.- Dos penaltis casi consecutivos (minutos 55 y 63) transformados por Cristiano Ronaldo rompieron el marcador definitivamente a favor del Real Madrid. El primero no fue porque el disparo del propio Cristiano golpeó en la espalda de Srna, no en la mano. En el segundo, el lateral izquierdo Marcio Azevedo sí embolsó el balón con el brazo. Cuestiones arbitrales al margen, el guión del partido ya era muy difícil de variar para los jugadores de Mircea Lucescu.
8.- Con Isco al mando de las operaciones y Cristiano desatado con metros por delante, más el criterio y ayuda inestimable de Benzema, el Madrid fue salpicando el partido de ocasiones hasta final. Llegó el cuarto tanto de la noche, de nuevo obra del portugués, que aprovechí de cabeza un rechazo de Pyatov. A nivel general quizá le faltó un punto de ritmo y continuidad en el juego al Madrid. Lucescu fue haciendo cambios. El centrocampista Malyshev por el extremo Taison, el talentoso mediapunta Kovalenko por el otro extremo, Marlos, y el brasileño y también mediapunta Bernard por el delantero centro Gladkiy, casi inédito en el partido. Ninguno de los tres pudo ya influir en el encuentro.
y 9.- Lo peor para el Madrid fue el capítulo de lesiones. A falta de los exámenes médicos, Bale, Varane y Sergio Ramos se retiraron con molestias de diversa índole. Pepe y Nacho fueron los centrales que terminaron el encuentro. Hay que destacar el buen nivel exhibido por Carvajal, que estuvo magnífico en defensa y en ataque. Los ocho goles en dos partidos de Cristiano Ronaldo, mantener la portería a cero un partido más y la exuberancia del marcador son conclusiones positivas para el Real Madrid. Pero le faltó constancia en el ritmo de juego y automatismos ofensivos pese a que tiene múltiples soluciones. Siempre es mucho más fácil mejorar cuando los resultados acompañan y el viento sopla a favor.
* Alberto López Frau es periodista.
– Foto: AFP
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