"Volved a emprender veinte veces vuestra obra, pulidla sin cesar y volvedla a pulir". Nicolás Boileau
En la décima etapa del Tour de Francia, Alberto Contador tuvo una fuerte caída que varios kilómetros después le llevó a abandonar. Tras el accidente, su participación en la Vuelta estuvo en duda hasta la semana previa, pero una vez en competición ha demostrado no tener ninguna secuela y ser el mejor de los favoritos en la contrarreloj y en la montaña. Una superioridad que la ha llevado a subirse a lo más alto del podio por octava vez en una gran vuelta y a ganarla por sexta ocasión (en el Tour 2010 y el Giro 2011 fue descalificado por dopaje). En la Vuelta a España su marca es perfecta: ha competido tres veces y en las tres ganó la carrera.
Primera semana
La Vuelta volvió a apostar por un elevado número de finales en cuesta esparcidos por toda la carrera y por una novedad al final de la misma con una corta última crono en Santiago de Compostela en lugar del tradicional final en Madrid.
En los primeros días el protagonismo se lo llevó Movistar –venció la crono por equipos y tuvo a tres líderes diferentes– y hombres rápidos como Bouhanni, Matthews y Degenkolb.
Movistar ganó la crono por equipos, Jonathan Castroviejo se puso de líder (como en 2012 en Pamplona) y le sucedieron sus compañeros de equipo Alejandro Valverde y Nairo Quintana. Este último fue el primer líder colombiano desde 2001, pero el maillot rojo solo le duró un día por una dura caída en la contrarreloj de Borja.
En los sprints dominó Degenkolb con cuatro victorias en el total de la carrera que, sumadas a las cinco de hace dos años, le colocan en el segundo lugar entre los alemanes más triunfadores en la gran ronda española, tras Marcel Wüst, que ganó 12 etapas. Pero también hubo espacio para Bouhanni, el primer francés que gana en Giro y Vuelta en un mismo año, y para Michael Matthews, que como hizo en el pasado Giro, logró etapa y liderato (que le duró tres días).
Segunda semana
El bloque intermedio de la competición comenzó con una contrarreloj individual ganada, cómo no, por Tony Martin. Este triunfo supuso un récord personal para el alemán al ganar en seis etapas contrarreloj consecutivas.
De esa crono ya salió líder Contador. El madrileño volvió a cumplir una asombrosa estadística: siempre que consigue el liderato en una gran vuelta lo mantiene hasta el final.
En la segunda semana hubo etapas y ganadores de todo tipo, sprinters como Degenkolb, jóvenes como Fabio Aru, que consiguió en Aralar su primer triunfo fuera de Italia (luego llegaría otro en Monte Castrove), veteranos ilustres como Ryder Hesjedal, que se impuso en La Camperona, e invitados inesperados como Przemysław Niemiec, que en los Lagos de Covadonga se convirtió en el primer polaco con triunfo de etapa en la Vuelta. Contador cerró la segunda semana ganando en La Farrapona, la considerada como etapa reina.
Tercera semana
Mientras Contador sentenciaba definitivamente la carrera aguantando todas las embestidas de Froome en Ancares, otros corredores, como Degenkolb y Aru repetían su día de gloria y otros lo tenían por primera vez en una grande, como Adriano Malori en la crono final que afrontó sin lluvia, lo que no pudieron decir todos los corredores.
Pero en esta tercera parte de la carrera hubo otro protagonista, el australiano Adam Hansen, ganador de etapa en Cangas del Morrazo y que, por tercer año consecutivo, completó Giro, Tour y Vuelta. Hansen, que también hizo la Vuelta 2011, por lo que lleva diez grandes seguidas completadas, es el tercer corredor que acaba todas las grandes en tres años consecutivos, tras los españoles Bernardo Ruiz (1955-1957) y Marino Lejarreta (1989-1991).
El campeón
El tercer triunfo en la general de la Vuelta de Alberto Contador le permite igualar el récord de la carrera que comparten Tony Rominger y Roberto Heras (a este último sin contarle la edición de 2005, ganada en la carretera, perdida por dar positivo y a la espera de una resolución judicial definitiva).
Contador está entre los más grandes de las vueltas por etapas siendo el sexto corredor que ha conseguido al menos seis triunfos, tras Merckx (11), Hinault (10), Anquetil (8), Coppi (7) e Indurain (7), y el único de todos ellos que tiene un palmarés dominado por la Vuelta a España.
La primera grande disputada por Contador fue el Tour 2005; desde entonces sus participaciones en la Vuelta han sido producto de la casualidad y de la necesidad de correrla. En 2008, porque el Tour vetó a su equipo; en 2012, porque acababa de cumplir la sanción por dopaje; y en 2014, por su temprano abandono en el Tour, ya que de haberlo terminado difícilmente habría corrido la ronda española. Pero el caso es que ha tomado la salida tres veces y ha ganado las tres ediciones, un caso único en la historia de la Vuelta y que en las otras grandes solo habían hecho Eddy Merckx (ganó sus cinco primeros Tours) y Bernard Hinault (ganó los tres Giros en los que compitió).
Contador también es el tercer ciclista que ha sido el campeón en las seis primeras grandes vueltas en las que pisó el podio, tras Eddy Merckx (once primeras) y Bernard Hinault (ocho primeras).
El podio
Acompañaron en el cajón a Contador otros dos ganadores de grandes vueltas, Chris Froome y Alejandro Valverde. Este hecho, un podio formado por tres ganadores de grandes, jamás se había dado en la Vuelta a España y no ocurría desde el Giro 2009 (Menchov, Sastre, Basso).
El británico Chris Froome, que también abandonó el Tour por culpa de las caídas, compitió por la victoria hasta el final y acabó segundo, como en 2011. Froome es el séptimo ciclista que es subcampeón de la Vuelta en dos ocasiones sin haberla ganado nunca, el primero desde Carlos Sastre (2005 y 2007) y el segundo británico tras Robert Millar.
Alejandro Valverde tuvo que luchar por la general tras el abandono de Quintana y consiguió su sexto podio en la Vuelta a España, récord histórico de la carrera. Valverde es el sexto ciclista con seis podios o más entre las tres grandes pero todos ellos en una sola carrera tras Garrigou (Tour) y Simoni (7 podios), Binda, Brunero y Francesco Moser, que lo consiguieron en el Giro.
Y además…
Lucha libre masculina
Los rusos estuvieron en cinco finales y las ganaron todas. Sus cinco oros son la mejor marca de cualquier país desde Bakú 2007, cuando también Rusia consiguió seis. Uno de los rusos campeones fue Denis Tsargush en peso welter (74 kilos), tras vencer en semifinales a Jordan Burroughs. El estadounidense, que empezó su carrera profesional con 69 victorias consecutivas, sufrió la segunda derrota de su carrera (la primera fue en febrero en Estambul ante su compatriota Nick Marable) y la primera en un campeonato del mundo.
Lucha libre femenina
Japón volvió a dominar las pruebas de mujeres consiguiendo cuatro títulos en las categorías de menor peso. En las otras cuatro destacó el oro de Tserenchimed Sukhee, el segundo título mundial de una mujer de Mongolia tras el de Soronzonbold en 2010.
Entre las cuatro campeonas japonesas están sus dos leyendas, Icho y Yoshida, pese a que ambas bajaron de categoría. Saori Yoshida aumentó su récord de títulos y de medallas mundiales en cualquier modalidad olímpica de lucha, doce en doce participaciones. Yoshida ha ganado sus 59 combates de campeonatos del mundo. Por su parte, Kaori Icho, que no tiene unos números tan impresionantes en los mundiales (9 títulos y también invicta tras 42 combates), mantuvo su increíble racha ganadora, la mayor que existe actualmente en cualquier deporte: 172 triunfos consecutivos desde su ya lejanísima derrota en marzo de 2003.
Otro de los títulos japoneses fue el de Chiho Hamada en peso ligero, con el que Japón logró su 14º oro consecutivo en la prueba. Solamente la URSS, en peso ligero masculino de lucha libre entre 1974 y 1991, había ganado 14 veces seguidas en una misma categoría.
Lucha grecorromana
Acostumbrados a ver ganar a unos pocos países sorprende ver que en lucha grecorromana hasta siete tuvieran algún campeón en este mundial: Irán, Serbia, Rusia, Hungría, Francia, Cuba y Armenia (único que repitió). El de Serbia, con Davor Štefanek en peso ligero, es histórico porque es el primer título del país y el primer oro de un serbio desde Refik Memišević en Oslo 1981, cuando compitió como yugoslavo.
El anterior mundial donde siete países se llevaron algún oro en grecorromana fue el de Guangzhou 2006.
Otra de las noticias de este mundial fue el título de Mijaín López en peso superpesado, que esta vez lo disputaban luchadores de hasta 130 kilos. El cubano logró su séptima medalla en la categoría, quinta de oro. En medallas solo tiene delante a Karelin, con 9 (todas de oro), y en oros también, solo que López queda empatado con el búlgaro Alexander Tomov.
Con una autoridad jamás vista en el campeonato, Estados Unidos mantuvo el dominio internacional que ejerce desde 2008 y consiguió su segundo título mundial consecutivo, algo que nunca había hecho antes.
Los americanos no tuvieron rival en ningún partido. Empezaron arrasando a Finlandia por 114-55, el triunfo más amplio en un Mundial desde 1990, y acabaron resolviendo la final ante Serbia en apenas cinco minutos del primer cuarto para derrotar a los balcánicos por 129-92 (solamente la final de 1994, donde Estados Unidos ganó 137-91 a Rusia se había resuelto por más puntos).
Estados Unidos es el primer equipo de la historia que vence todos sus partidos en un mundial por al menos 20 puntos (lo ganó todo por 21 o más). En los Juegos Olímpicos sí hay varios casos, todos ellos de Estados Unidos: 1956 (30+), el Dream Team en 1992 (32+) y 1996 (23+).
Esta victoria clasifica a Estados Unidos para los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016 y amplía su enorme racha de triunfos consecutivos, 63 contando hasta los amistosos, desde la espectacular semifinal del Mundial 2006 que perdieron ante Grecia.
Los otros medallistas tienen motivos para estar contentos porque para ambos, Serbia y Francia, es la primera en la historia del país. Serbia solventó con mucha suficiencia complicados cruces ante Grecia, Brasil y Francia (aunque este último se le complicó debido al inmenso acierto de Francia desde el triple en el último cuarto) y Francia, pese a jugar sin dos de sus grandes estrellas como son Parker y Noah, derrotó a Lituania en la lucha por el bronce. Es el tercer mundial consecutivo donde dos países logran su primera medalla (España y Grecia en 2006 y Turquía y Lituania en 2010).
Phoenix Mercury logró su tercer título de la NBA femenina como los dos anteriores, ganando la liga regular y aprovechándose del factor campo en los playoffs. Phoenix, que necesitó el tercer partido en semifinales, no dio opción a Chicago Sky en la final, sobre todo en un segundo partido resuelto por 97-68 que supuso la mayor paliza en la historia de las finales de la WNBA.
Un error tonto de Marc Márquez –inclinó en exceso la moto en una curva lenta– permitió a un inspirado Valentino Rossi volver a saborear las mieles del triunfo en el circuito más especial para él, el Marco Simoncelli de Misano Adriatico, que está a escasos kilómetros de su lugar de nacimiento.
Rossi cortó la racha de 23 triunfos seguidos de los pilotos españoles en la cilindrada reina y sumó su 81ª victoria en Moto GP/500 (en total lleva 107, demasiado lejos de las 122 de Agostini como para pensar en ese record). Rossi, con 35 años y 210 días, es el piloto más veterano en vencer en Moto GP desde que Troy Bayliss venciese en Valencia 2006 con 37 años y 213 días.
Coincidiendo con el final del mundial femenino se disputaron los campeonatos del mundo por equipos. En categoría masculina, España ganó por undécima vez consecutiva (2004-2014) y en la femenina, Gran Bretaña revalidó su título de la temporada pasada consiguiendo dos victorias seguidas por segunda vez en su historia (2006-2007).
Con la trece veces campeona del mundo Laia Sanz dedicada al enduro, el mundial femenino estuvo competido hasta el final en Andorra, donde Emma Bristow, ganadora de tres de las cuatro pruebas puntuables de la temporada, se convirtió en la primera británica campeona del mundo y en la segunda distinta a Laia Sanz, siete años después del título de la alemana Iris Krämer.
La última prueba del campeonato, celebrada en León (México), sirvió para coronar a Antonio Cairoli en MX1 y para ver una remontada espectacular de Jordi Tixier en MX2 sacando partido a la lesión de Jeffrey Herlings.
Con su octavo título mundial, el sexto seguido en MX1, el italiano Antonio Cairoli ya puede mirar a los ojos del más grande de esta especialidad, el belga Stefan Everts. Ambos son los únicos con seis títulos en la máxima categoría y además los dos los han logrado de manera consecutiva, Everts entre 2001 y 2006 y Cairoli entre 2009 y 2014.
En MX2, la crueldad se cebó con Jeffrey Herlings. El neerlandés se había impuesto en 22 de las 26 carreras (en otras dos fue segundo y en Brasil no compitió) hasta que una rotura de fémur en una carrera benéfica le apartó de lo que quedaba de mundial. Herlings compitió en México aún convaleciente y sumó puntos, pero no los suficientes para impedir el primer título mundial en la carrera del francés Jordi Tixier, primero y segundo en las dos mangas de la prueba mexicana.
El campeonato terminó en Francia con tres campeones conocidos y un australino. En la categoría E1 venció el campeón de E3 en 2013, el francés Nambotin, el primero que consigue el título en E1 al año siguiente de hacerlo en E3 (al revés sí hay precedente con Íñigo Cervantes en 2006 y 2007).
En E2 se impuso otro francés, Pierre Renet, que ya fue campeón en 2012. Renet es el segundo en tener dos títulos en esta categoría, pero sin conseguirlo de manera consecutiva (Mika Ahola venció en 2007 y 2010).
El título de Matthew Phillips en E3 es el primero de un australiano en cualquier categoría desde 2004, cuando Stefan Merriman se impuso en E1. Y para acabar, la categoría femenina, donde Laia Sanz logró su tercer título –primera mujer que lo consigue– que, sumados a los trece que obtuvo en trial, le dejan con 16 títulos mundiales.
Volkswagen se aseguró el título mundial de marcas en Australia, a tres pruebas del final, y lo hizo de la mejor manera posible: con el primer triplete de su historia encabezado por Ogier, líder del Mundial, que superó a Latvala y Mikkelsen. Es la primera vez que una misma marca copa el podio en un rally mundialista desde Portugal 2012, cuando lo hizo Ford, y es el primero que se ve en el rally de Australia.
Otro dato descatado de la carrera fue la escasa diferencia entre los dos primeros, 6,8 segundos, la mejor en esta prueba desde el 2000, cuando Marcus Grönholm aventajó a Richard Burns en 2,7 segundos.
El quinto grande del golf femenino es, desde la temporada pasada, el Evian Championship. La ganadora fue la surcoreana Hyo-Joo Kim, que de esta manera logra su primer major. Pero Kim pasará a la historia del golf por su tarjeta del primer día, 61 golpes, 10 bajo el par del campo, un resultado de récord en la historia de los grandes, tanto en golpes como en el resultado bajo par.
El Tour Championship, celebrado en Atlanta, fue el último torneo de los playoffs del PGA Tour y también la FedEx Cup. Como la semana pasada en el BMW Championship, el vencedor fue el estadounidense Billy Horschel, que no estará en la inminente Ryder Cup. Horschel es el segundo jugador que gana los dos últimos torneo de los playoffs y también la FedEx Cup, tras haberlo logrado Tiger Woods en 2007, la edición inaugural.
Semifinales y playoffs de ascenso y permanencia en una misma semana. Francia recibirá a Suiza en la gran final tras acabar con todas las rachas de la República Checa: 11 eliminatorias ganadas y 10 victorias consecutivas de su ya mítica pareja de dobles Berdych/Štěpánek. Suiza, con Federer y Wawrinka, no dio ninguna opción a Italia en Ginebra y volverá a la final de la Davis 22 años después de perderla en Forth Worth ante unos Estados Unidos que alineó a Agassi, Sampras, Courier y McEnroe.
En los playoffs perdieron la categoría los Países Bajos y España y ascendieron Brasil y Croacia. Lo de España fue muy sorprendente porque, aunque faltaban varios de sus mejores jugadores, sus dos opciones para el individual eran superiores a las de los brasileños y además se jugaba en tierra batida. Pero perdió en Sao Paulo truncando una serie de 27 eliminatorias seguidas ganadas en tierra y volverá a la segunda categoría 19 años después.
Cuarta jornada de la competición con victorias de Australia y Nueva Zelanda. Los Wallabees ganaron por novena vez consecutiva a Argentina con un marcador muy alto, 32-25, tanto que es el primer triunfo australiano como local en el torneo recibiendo 25+ puntos desde 2004, cuando se impuso 30-26 a Sudáfrica. El duelo entre All Blacks y Springboks tuvo incertidumbre hasta el final, pero la defensa neozelandesa fue impenetrable y aumentó dos marcas: 36 victorias seguidas como local (récord absoluto en la historia del rugby) y 21 partidos seguidos sin perder entre todas las competiciones (segunda mejor racha de Nueva Zelanda y la mejor en los últimos 25 años).
En su combate de revancha ante el argentino Marcos Maidana, con tres cinturones en juego (superwelter del Consejo y welter de la Asociación y del Consejo Mundial de boxeo), Floyd Mayweather mantuvo la perfección en su carrera profesional. El estadounidense lleva 47 victorias en 47 combates, supera al galés Joe Calzaghe y se queda a dos de la mejor marca perfecta de la historia: el 49-0-0 de Rocky Marciano en los pesos pesados.
* David Fernández es estadístico.
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