Por mimbres no será

por RAFAEL LEON el 6 septiembre, 2014 • 11:16

Vicente del Bosque debe construir de cero un nuevo equipo, lo que no tiene nada que ver con gestionar uno ya construido (lo que ha hecho hasta ahora, con excelentes resultados). Eso implica volver a plantearse una serie de preguntas básicas para, una vez respondidas, iniciar la toma de decisiones. Veamos cuáles pueden ser esas preguntas:

1.- ¿HAY ALGUNA POSICIÓN SIN JUGADORES DE PRIMER NIVEL?

No. En todos los puestos, España tiene jugadores que pueden ser titulares en un campeón de la Champions. Unos están entre los mejores del mundo y otros, un peldaño por debajo, pero en todas las posiciones hay jugadores con calidad suficiente para formar parte de un equipo campeón. Aunque quizá pueda parecer que no en ataque, un equipo con Diego Costa, Navas, Pedro, Negredo, Llorente y, quién sabe si pronto, también Jesé, Deulofeu, Rodrigo, Alcácer o Munir tiene calidad ofensiva suficiente. No tanta como para ganar los partidos por sí sola, pero sí para hacerlo con la ayuda de un gran equipo por detrás. Y España tiene los jugadores perfectos para conformarlo.

2.- ¿CUÁLES SON LOS MEJORES JUGADORES DEL EQUIPO?

Piqué, Sergio Ramos, Busquets e Iniesta. Todos ellos pilares en las dos mejores plantillas del mundo, habiendo sido pilares del mejor equipo del mundo en algún momento y de la mejor selección. Solo Casillas puede decir lo mismo, pero hace años que su nivel dista del de un portero de élite. Quizá podría haber alguna duda con Piqué, pero su nivel no ha bajado tanto como para no seguir siendo un gran jugador y aún tiene buena edad. Además, en caso de no aclararse las dudas con él, su sustituto estaría entre Javi Martínez y Bartra, jugadores acostumbrados a la misma manera de jugar.

3.- ¿QUÉ MANERA DE JUGAR BENEFICIA MÁS A LOS MEJORES JUGADORES?

Dominar con el balón, jugando de forma ordenada, sin que los partidos sean de ida y vuelta. El ritmo y el sentido en el que deben circular el balón pueden debatirse e ir variando, pero no lo anterior.

4.. ¿ESTA MANERA DE JUGAR BENEFICIA TAMBIÉN A LOS SIGUIENTES MEJORES?

Rotundamente sí. Excepto Azpilicueta, todos los laterales son de perfil ofensivo. También a todos los centrocampistas, salvo los del Atlético de Madrid (a Cesc, jugando más arriba, sí que le beneficia esta manera de jugar). No así a alguno de los delanteros (especialmente Diego Costa), pero la misión de estos es la de complementar en lugar de condicionar, pues los mejores son otros.

5.- ¿CÓMO LOGRAR SER ORDENADO TENIENDO EL BALÓN?

Ahora que ya no están Xavi y Xabi Alonso, España carece de un organizador de juego puro de máximo nivel (al menos, mientras Iniesta no diga lo contrario). Por tanto, ese orden debe llegar a través de la táctica. El problema es que las selecciones no tienen tiempo para trabajar ese aspecto. La suerte, que Piqué, Busquets e Iniesta juegan juntos, que Ramos encaja a la perfección con el central del F. C. Barcelona (cuando ambos están a un nivel aceptable, justo lo contrario de lo que sucedió ante los Países Bajos) y que España tiene jugadores perfectos para complementar ese núcleo.

Trabajar dos líneas de cuatro que se replieguen y salir al contraataque es algo que se puede construir desde cero en poco tiempo. Un equipo que domine ordenadamente mediante el balón, no. Y menos sin un canalizador puro. Por eso, la única manera que intuimos segura de conseguirlo es trasladando la estructura base de un club. Con esto no nos referimos a jugar exactamente igual, pero sí a respetar los principios básicos. A no lastrar todos los automatismos que traen de serie Piqué, Busquets e Iniesta con un doble pivote porque ahora no hay un genio como Xabi Alonso para compensar esta mala decisión. A que arriba haya jugadores capaces de estirar la defensa rival y amenazar al espacio para que no puedan anular su juego mediante un buen pressing. A que, quienes les acompañen, no invadan su zona y resten opciones, sino instruirles en los principios básicos del juego de posición y que sumen (en los casos de Javi Martínez –central–, Bartra, Thiago, Cazorla o Ander Herrera no haría mucha falta: ya saben).

Nos referimos fundamentalmente al quinto hombre que cierre el núcleo central del equipo. Descartado que sea un mediocentro, quedarían dos opciones: un tercer central o un interior derecho. Ambas opciones pueden ser buenas, pero teniendo en cuenta que están más acostumbrados a jugar con otro interior y que en la posición hay opciones más fiables, jugar con tres centrocampistas parece mejor opción.

Jugar sin este quinto hombre (es decir, que Busquets e Iniesta tengan cuatro jugadores por delante) no parece lo más adecuado porque es algo a lo que no están acostumbrados y que restaría movilidad al manchego.

6.- ¿QUÉ JUGADORES SON LOS IDÓNEOS PARA ACOMPAÑAR A LOS ANTERIORES EN ESTA FORMA DE JUGAR?

Aquí el abanico es enorme, dada la gran cantidad de jugadores españoles de calidad aptos para jugar de esta forma. En la portería, vendría bien un portero capaz de dar dos pases buenos seguidos y de no costar goles ni dudas al equipo. Valdés (si se recupera), De Gea, Diego López y otros porteros que hoy son mejores que Casillas son capaces de hacerlo.

Carvajal, Jordi Alba, Alberto Moreno, Bernat o Gayà como laterales ofensivos y Azpilicueta como lateral defensivo que puede actuar por cualquiera de los costados ofrecen un sinfín de opciones. Con dos interiores muy próximos a Busquets y sin extremos, Carvajal y uno de los zurdos serían las mejores opciones. Si se quiere dar recorrido (con posibilidad de moverse más por la banda o la mediapunta) a uno de los interiores, Azpilicueta es perfecto para cubrirle la espalda.

Como mediapuntas, Silva, Cesc, Isco, Thiago o Cazorla (salvo Cesc, todos ellos aptos para jugar en una banda), son magníficas opciones. El problema podría ser la falta de profundidad, y he aquí una cuestión difícil a la que solo la práctica podría dar respuesta: uno o dos jugadores profundos (y, en consecuencia, uno o dos mediapuntas). Ninguno de los profundos es Cristiano Ronaldo, por lo que la elección de solo uno (entre Costa, Pedro, Navas y Jesé de momento) podría no ser una amenaza suficiente para condicionar un pressing alto. No obstante, los mediapuntas son mejores y dan más continuidad al juego combinativo.

En cuanto a la posición y la manera de moverse (la manera de cerrar ese 1-4-3-?), podría ir variando y adaptarse a los jugadores y las necesidades del equipo. Falsos extremos y nueve, mediapunta y dos nueves, extremos y falso nueve… Las opciones son infinitas, pero la calidad aquí tampoco parece dudosa: si entre laterales e interiores se encargan de ocupar las bandas y no dejar solo a Busquets, España podría atacar nada menos que con Silva, Cesc y Diego Costa disponiendo de bastante libertad los tres. Y, por si fuera poco, con Isco, Navas y Llorente esperando en el banquillo su momento para cambiar el partido.

7.- LA AFIRMACIÓN CERO

Solo hemos hablado de táctica, pero la táctica viene después. Lo primero es la salud del grupo, el buen ambiente, la ambición por la victoria… Dar galones en el vestuario a los jugadores que dan ejemplo, si puede ser que vayan a ser importantes futbolísticamente; eliminar a los que resten para que hasta el último suplente sume y así poder remar todos en la misma dirección.

Pero aquí también los mimbres son excelentes. Del Bosque dispone de grandes campeones de actitud intachable como Iniesta y Busquets; de suplentes extraordinarios como Navas o Negredo capaces de aceptar su papel en el equipo; y de jóvenes ambiciosos y que no dejan de crecer como Carvajal o Koke.

Definitivamente, por mimbres no será. España tiene todo para volver a ser una de las mejores selecciones del mundo. Ahora le toca a Del Bosque construirla.

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* Rafael León Alemany.

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– Fotos: Getty Images – EFE