"Hay que recordar que quienes escriben para los imbéciles siempre tienen un numeroso público de lectores". Arthur Schopenhauer
Lesedi se levanta temprano y prepara la mochila para dirigirse a las pruebas de acceso que el club del que es seguidor organiza. Sin tiempo que perder baja a la calle en busca del autobús que lo acercará a su sueño…
Durante la temporada es importante ir analizando el rendimiento de los futbolistas para poder valorar la continuidad de determinados jugadores el siguiente curso. A su vez, también deberemos conocer las carencias del equipo que nos ayudarán a saber qué posiciones necesitarán ser reforzadas.
Es importante ser claro con los jugadores e informarles con tiempo de la posible decisión del club, ya que en algunas ocasiones su rendimiento se puede ver beneficiado, aunque existe la posibilidad que ante la presión se hundan no siendo capaces de remontar la situación. Los ojeadores del club deberán ser los encargados de proveer nuevas opciones al entrenador, pero si este no tiene una estructura sólida, en ocasiones la única opción es la de convocar pruebas de acceso que permitan identificar jugadores talentosos que ayuden a mejorar el nivel del equipo.
Debemos plantearnos las pruebas como una sesión de entrenamiento más y por lo tanto deben estar perfectamente organizadas, ya que en un espacio de tiempo muy corto debemos ser capaces de identificar a aquellos futbolistas que puedan ser interesantes para nuestra plantilla.
En los minutos previos al inicio es importante que los jugadores reciban una información detallada de lo que va a suceder durante la sesión. Una información clara y precisa nos permitirá captar la atención de los jugadores y poder resolver todas aquellas dudas que tengan antes de dar inicio a la sesión, permitiéndoles centrarse por completo en el entrenamiento.
Debemos ser conscientes que no sabemos el nivel de los jugadores que se presentarán, y en ocasiones podría darse el caso en que no han recibido ningún tipo de entrenamiento previo. Por esa razón, la sesión deberá ser sencilla para permitir al jugador mostrar todas sus habilidades.
El primer aspecto que analizaremos será la técnica. Para ello, organizaremos partidos donde los participantes deberán jugar en espacios reducidos en situaciones de igualdad numérica con un máximo de 5 ó 6 jugadores por equipo. Con este ejercicio lo que buscamos es poder ver al jugador en contacto con el balón en más ocasiones, siendo a su vez más sencillo para él mostrar sus habilidades con el esférico.
Será un elemento importante que el entrenador se mantenga al margen, ya que lo que nos interesa es que haya continuidad en el juego permitiendo que los protagonistas sean los futbolistas.
Pasados 20 minutos como máximo daremos por finalizado el ejercicio. En ese momento, el responsable deberá haber realizado una primera evaluación permitiendo identificar a los más destacados de cada grupo.
A continuación, con la primera elección realizada, daremos mayor importancia al aspecto táctico, por lo que aumentaremos el espacio de juego creando situaciones de 7 contra 7 o bien 9 contra 9. Será el momento de valorar si el jugador es capaz de aplicar toda sus habilidades técnicas tomando las mejores decisiones en beneficio del equipo. Como ya hemos comentado, los jugadores no se conocerán y eso supondrá un hándicap con el que deberán convivir.
Posicionaremos a los jugadores en el terreno de juego pero no deberemos darle especial importancia porque ellos se irán ubicando en aquellas áreas en las que se sientan más cómodos permitiéndoles mostrar sus cualidades. La posición del jugador cuando no tiene el balón, su comportamiento al realizar una combinación con un compañero o sus reacciones ante la pérdida o recuperación del balón serán alguno de los aspectos que deberán captar nuestra atención.
La actitud que el jugador demuestre durante la sesión será un importante aspecto que se tendrá que analizar. Especialmente deberemos fijarnos en aquellos jugadores con habilidades para liderar. Lo que estaremos buscando son jugadores que se comuniquen continuamente con los compañeros y que tengan la capacidad de organizar, es decir, estaríamos buscando futbolistas que sean capaces de actuar como entrenadores dentro del terreno de juego.
Encontrar jugadores competitivos y que demuestren una actitud ganadora ante los retos que se le presentan será interesante ya que será un activo importante para el equipo. Debemos ser conscientes de que las cualidades técnicas y tácticas pueden ser mejoradas con un entrenamiento apropiado pero es mucho más complicado modificar el comportamiento o la actitud de un jugador.
Un aspecto que no debemos olvidar aunque, en mi opinión, no será prioritario, es el aspecto físico del jugador, ya que pese a ser un elemento importante en el futbol actual, no debemos olvidarnos de que la prioridad será la de encontrar jugadores habilidosos que demuestren tener un buen conocimiento del juego.
Finaliza la sesión y Lesedi es seleccionado en un pequeño grupo al que los técnicos informan que ha superado la prueba. Los entrenadores le advierten que la elección no es definitiva pero él se siente orgulloso del trabajo realizado y es consciente que deberá seguir trabajando. Sentado en el autobús de vuelta a casa se pregunta: ¿Pueden los sueños hacerse realidad?
* Enrique Durán es Director Técnico de fútbol base de los Mamelodi Sundowns de Sudáfrica. Anteriormente fue Coordinador de la FCB Escola. En Twitter: e_duran_diaz
– Fotos: La Voz Digital – Real Madrid
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