Otro título para un Atleti muy reconocible

por ALBERTO LOPEZ FRAU el 23 agosto, 2014 • 0:53

1.- El partido tuvo varias fases. La última y más larga la controló el Atlético y se llevó la Supercopa con toda justicia. El conjunto rojiblanco aplicó sus virtudes conocidas durante todo el partido, aunque le cundieron más en unos momentos que en otros. De inicio sorprendió al Madrid con un juego vertical y muy directo. En el minuto 2, un balón largo de Moyá sorprendió a los centrales del Madrid. Mandzukic le ganó la partida a Varane y Griezmann a Ramos. El croata aprovechó el toque de su compañero en la delantera para cruzar el balón ante Iker Casillas y subir el tanto al marcador. El Madrid entró al partido algo despistado y lo pagó muy caro.

2.- Simeone planteó un once algo más ofensivo que en el Bernabéu. Con Tiago, el Atlético mejora la fluidez con el balón el pies. De los mediocentros rojiblancos es el más capacitado para la circulación del balón. También entró Griezmann, que alternó la zona izquierda con la segunda punta. Estos dos jugadores le dieron un plus al Atlético en campo contrario.

3. -El Madrid hizo también varios cambios. Entró Coentrao en sustitución de Marcelo, Varane en el centro de la defensa junto a Sergio Ramos y James por un Cristiano Ronaldo que no estaba para noventa minutos. A partir del minuto diez el Madrid se adueñó de la pelota. En esa fase de control del balón se dividió en dos partes: una primera en la que acumuló posesión, pero realizó ataques muy previsibles, y una segunda en la que se asentó en campo contrario el trío formado por Modric, Xabi Alonso y Kroos, a la vez que James fue ganando posiciones interiores. Desde allí, alejado de la banda, como destacó en el Mónaco y en la selección, encontró el balón y las ocasiones de gol. El colombiano tuvo hasta tres.

4.- El Atlético se defendía como un gladiador. En ese estilo compite de maravilla. Ya no tiene a Diego Costa, pero sí a un Mandzukic. No aporta las mismas soluciones por abajo, pero sí es una referencia y un auxilio permanente por arriba en el juego directo. El Atleti deberá administrar bien ese recurso para no convertirlo en una única opción. Llegó el descanso con la sensación que el gol del Madrid era cuestión de tiempo. Simeone perdió los nervios y fue expulsado, sin él parecía que su equipo se desinflaba como un colchón de agua cuando se pincha.

5.- Tras el descanso entró Cristiano Ronaldo y se marchó Kroos. El cambio no le sentó bien al Madrid. El equipo se esforzaba, pero era más largo. Tras la pérdida del balón recuperaba más tarde o no recuperaba nunca, y solo a través de las incorporaciones de un Carvajal soberbio en el despliegue, aunque algo impreciso, y de algún ajetreo de Cristiano, tras los saques largos de Casillas, incomodaba ligeramente al Atlético. El Madrid había perdido el equilibrio y el Atleti tenía el escenario perfecto para que sus principales virtudes volvieran a imponerse en el partido.

6.- Raúl García se puso a pelear todos los balones como si le fuera la vida en ello. Hizo de la banda derecha su fuerte y comenzó a ganar todos los balones por arriba. Koke aguantaba el balón en la izquierda con el oficio de un veterano, y cuando Griezmann se fundió, el Cholo dio entrada a Raúl Jiménez para dar un poco de aire a Mandzukic arriba, colocando otro punta a su lado. Tiago aplicó criterio a todas sus acciones y el Atlético tuvo el partido en su escenario ideal.

7.- Ancelotti se acordó de la final de Champions y repitió los cambios que aquella noche en Lisboa le sirvieron para desarbolar al Atlético. Primero entró Isco por James y más tarde Marcelo por Coentrao. Pero ninguno pudo tener peso real en el encuentro. El Madrid no mandaba. Xabi Alonso ya defendía a campo abierto, Modric pensaba más en atacar que en defender, abusaba de las conducciones, y el equipo no consiguió asentarse en campo contrario nunca en ningún momento del segundo tiempo. En el ida y vuelta, sorprender al Atlético es casi imposible.

8.- El paso de los minutos acercaba la Supercopa a las vitrinas del Calderón y la alejaba de las del Bernabéu. El Atleti tiene su estilo de juego ahora mismo mucho más interiorizado que este Madrid que parece que quiere jugar a otra cosa diferente, ni mejor ni peor, distinta, y que lleva tiempo. Vivimos instalados en el fútbol de las urgencias y a 23 de agosto se emiten juicios absolutos. Ver para creer.

9.- El Atlético es justo campeón. De momento, Moyá se está asentando en la portería y Siqueira y Mandzukic van cogiendo el pulso al equipo y a lo que Simeone pretende de ellos. Este Atleti es muy reconocible por encima de los nombres. El tiempo dirá si los nuevos pueden ofrecer el mismo rendimiento que los que se fueron.

y 10.- El Madrid parece que busca una forma distinta de jugar. Acumulando más posesión y viviendo más tiempo en campo contrario. Hace muchos años que por las características de sus jugadores no cultiva ese estilo. En el mediocampo tiene los mimbres para intentarlo, pero sus hombres de arriba, sobre todo Bale y Cristiano, son más felices a campo abierto. Benzema va a tener problemas. En el Madrid del contragolpe, él era el que ponía la pausa y lanzaba los ataques, pero ahora el Madrid pasa más tiempo en campo contrario, los medios se buscan ellos y los hombres de las bandas son individualistas. Él puede verse a menudo aislado del juego, y eso es un pecado mortal. Ancelotti tiene un precioso reto por delante. Las urgencias y el dinero invertido no le ayudarán.