Valero Rivera ya tiene a sus elegidos, a los encargados de representar a España en el Mundial que se disputará en nuestro país en el mes de enero.
Desde que el entrenador llegó a la selección, sus convocatorias jamás han conseguido unanimidad pública entre los aficionados al balonmano. Esto entra dentro de la normalidad, la mayoría de las listas confeccionadas por los seleccionadores de las diferentes disciplinas deportivas siempre están sujetas a debate. Sin embargo, en el caso de Valero entran en juego un seguido de particularidades que han levantado alguna ampolla en los últimos años.
Lo extradeportivo tiene demasiado hueco en los espacios informativos de nuestro país, así que creemos conveniente, y profundamente sano, hablar únicamente de la parcela deportiva. ¿Quiénes son los convocados? ¿Quiénes se han quedado fuera?
CONVOCADOS
Porteros
Arpad Sterbik (1979) – F. C. Barcelona: el serbio es, desde su nacionalización, uno de los pilares de esta selección. El nivel que viene mostrando desde su llegada al desaparecido Balonmano Ciudad Real ha sido superlativa, hasta el punto de ser considerado hoy en día uno de los mejores, si no el mejor, porteros del mundo.
José Manuel Sierra (1978) – París Saint Germain HB: el andaluz es un habitual de la selección (72 veces internacional). Normalmente acudía como tercer portero o en sustitución de algún lesionado. La mala fortuna de José Javier Hombrados, así como su dilata trayectoria, le permitirán asistir al Mundial como segundo portero.
Gonzalo Pérez de Vargas (1991) – KH7 Granollers: el joven portero está destinado a suceder en la portería a una pareja de porteros histórica. No es una tarea fácil. Con su inclusión como tercer portero, el toledano disfrutará de una buena experiencia. Tampoco descartamos que tenga algunos minutos.
Extremos izquierdos
Cristian Ugalde (1987) – MKB Veszprém KC: pese a su marcha del Barcelona, el seleccionador continúa confiando en él. Si bien su juego ofensivo puede llegar a estar un tanto limitado, su valor real radica en la defensa, donde se desempeña a las mil maravillas como avanzado.
Valero Rivera (1985) – HBC Nantes: el hijo del seleccionador es uno de los máximos goleadores de la liga francesa. Es poco conocido para los aficionados al balonmano local, sin embargo, parece que su trayectoria fuera del país ha sido sólida y continúa siéndolo.
Extremos derechos
Víctor Tomás (1985) – F. C. Barcelona: el capitán azulgrana es uno de los indiscutibles de esta selección. Su calidad, liderazgo y capacidad motivadora (tanto para los compañeros como para los aficionados) hacen de él uno de los mejores jugadores de nuestro balonmano.
Albert Rocas (1982) – F. C. Barcelona: el de Palafrugell atesora una calidad excelsa en su zurda. No había sido un fijo en las últimas convocatorias del seleccionador. Sin embargo, parece que finalmente ha conseguido convencerlo.
Laterales izquierdos
Antonio García (1984) – París Saint Germain HB: tras una mala racha con las lesiones que le impidieron acudir a algunas convocatorias con la selección, Antonio García volverá a vestirse de rojo en el mundial. Su potente disparo y la fiereza con la que se desempeña hacen de él un valor seguro tanto en ataque como en defensa.
Alberto Entrerríos (1976) – HBC Nantes: el mayor de los hermanos Entrerríos estuvo ausente en algunas de las últimas convocatorias. El buen nivel mostrado en la liga francesa, junto a la inconmensurable experiencia que acumula sobre sus hombros, han inclinado a Valero a volver a confiar en él.
Viran Morros (1983) – F. C. Barcelona: el catalán se ha consolidado en las últimas temporadas como uno de los mejores defensores del balonmano mundial. En ataque su presencia será testimonial, en contraataques o segundas oleadas. Morros es uno de los pilares defensivos en los que se apoyará la selección nacional.
Laterales derechos
Jorge Maqueda (1988) – HBC Nantes: la progresión de este lateral zurdo sigue en línea ascendente. El que fue antaño un lateral de movimientos lentos y de actitud discutible es ahora uno de los máximos goleadores de la liga francesa. Su juego ha evolucionado de forma notable: puede defender y atacar, tiene un buen lanzamiento exterior y una penetración salvaje gracias a su robustez. Es otro de los habituales en las convocatorias de Valero.
Ángel Montoro (1988) – F. C. Barcelona: llegó al conjunto azulgrana tras una temporada en blanco fruto de una complicada lesión. Su principio de temporada fue difícil, pero desde entonces no ha parado de progresar. Sus movimientos son más gráciles y su altura (2,11 m) empieza a ser aprovechada con un letal lanzamiento exterior.
Centrales
Daniel Sarmiento (1983) – F. C. Barcelona: podríamos considerar al canario como el central puro de esta convocatoria. De poca estatura pero de grandes recursos técnicos, complementados con una velocidad explosiva en sus fintas capaces de descentrar a las defensas contrarias.
Raúl Entrerríos (1981) – F. C. Barcelona: el asturiano puede ocupar todas las posiciones de la primera línea. Su buena lectura del juego, así como su capacidad penetradora y su sorpresivo lanzamiento en apoyo lo hacen una amenaza constante. Viene siendo habitual en la selección desde hace muchas temporadas.
Joan Cañellas (1986) – Atlético de Madrid: el catalán es un central todoterreno, con un poderío físico poco común y una habilidad desconcertante para realizar lanzamientos durante contactos defensivos. Es un desatascador consumado.
Pivotes
Julen Aguinagalde (1982) – Atlético de Madrid: el de Irún es uno de los nominados a mejor jugador del mundo. Su capacidad para recibir los pases de sus compañeros y crearse espacio en la línea de los seis metros es uno de los activos ofensivos más importantes del ataque español.
Gedeón Guardiola (1984) – Rhein Neckar Löwen: actualmente milita en la Bundesliga alemana. El apartado ofensivo parece reservado a Aguinagalde, mientras que al de Petrer podremos verlo desempeñándose, sobre todo, en el aspecto defensivo.
Ausencias
José Javier Hombrados (1972) – Atlético de Madrid: el legendario guardameta del Atlético de Madrid no podrá disputar la cita continental debido a una desafortunada lesión.
Juanín García (1977) – F. C. Barcelona: el veterano e histórico goleador leonés no nos deleitará con sus roscas en el Mundial que se avecina. La posición de extremo derecho es, a todas luces, la más discutida de la convocatoria. El hecho de llevar a un extremo mejor en el apartado defensivo que en el ofensivo (Ugalde) y a su propio hijo, hace que muchas voces se levanten pidiendo la convocatoria del excelso extremo azulgrana al seleccionador catalán.
Carlos Ruesga (1985) – Reale Ademar León: el central del Ademar de León está completando una temporada brutal. Su liderazgo absoluto lo ha encumbrado entre los mejores centrales españoles. Su habilidad para realizar lanzamientos inverosímiles lo ha hecho famoso en el panorama nacional. Sin embargo, parece que todavía no le ha llegado la oportunidad de mostrarse a nivel de selección.
Eduardo Gurbindo (1987) – F. C. Barcelona: el pamplonés ha visto como su nuevo compañero en el F. C. Barcelona, Ángel Montoro, ocupará la plaza que era suya en las últimas temporadas. Un duro golpe para Gurbindo, que había empezado la temporada a un nivel esperanzador después de ver su progresión detenida en su última campaña en Valladolid.
Roberto García Parrondo (1980) – Atlético de Madrid: el extremo zurdo del Atlético de Madrid había sido principalmente utilizado como avanzado en defensa 5-1; quizás su puesto será ocupado por Ugalde.
Juan Andreu (1985) – TSV Hannover: el pivote sevillano, capaz de defender y atacar con plenas garantías, vuelve a quedarse fuera de una convocatoria de la selección.
Mikel Aguirrezabalaga (1984) – F. C. Barcelona: el potente cañonero azulgrana queda fuera de la convocatoria. Su posición parece estar sobradamente cubierta con Entrerríos y García.
EQUIPO TITULAR
Hay una diversidad de alineaciones muy amplia, sobre todo en la primera fila. Sin embargo, si tuviéramos que apostar, este sería nuestro siete inicial:
En el ámbito defensivo, Viran Morros y Gedeón Guardiola muy posiblemente sean los encargados de ocupar las posiciones centrales de la defensa.
SOBRE LA LISTA
La renovación de la selección, con la introducción de savia nueva, sigue adelante. Son pocos los integrantes de la vieja guardia (aquella que ganó el único mundial que tiene España) que aún perduran vestidos de rojo. En el lateral derecho, por ejemplo, tras las retiradas de Garralda y Ortega, no se acababa de encontrar un remplazo de garantías. Ahora parece que Maqueda ya empieza a afianzarse en su posición y el gigante Montoro se asoma como una promesa de incalculable valor.
En esta lista, además, vemos algo que refleja de manera diáfana el estado de nuestro balonmano y de la liga Asobal. Este año se ha producido un éxodo notable de jugadores españoles al extranjero. En esta lista, 7 de los 17 jugadores militan en ligas extranjeras: uno en Hungría, uno en Alemania y cinco en Francia. Por lo que respecta a jugadores de la liga Asobal, vemos que solamente uno, el joven portero Pérez de Vargas, milita en un equipo que no es Atlético de Madrid (2 jugadores) o F. C .Barcelona (7). Sin embargo, recordamos que el portero toledano está cedido en Granollers y pertenece también al F. C. Barcelona.
Esto completa un panorama fácil de dibujar: la liga española, a medida que la mayoría de sus equipos va bajando sus prestaciones deportivas por razones económicas, ve cómo dos colosos, F. C. Barcelona y Atlético de Madrid (que va quedándose a la zaga de los azulgrana) son los únicos que mantienen jugadores en su selección, mientras que los grandes jugadores se ven en la necesidad de emigrar a ligas más potentes en la que sus contratos están asegurados y el fantasma del impago no merodea por sus cabezas.
EL MUNDIAL
Un evento de estas características no solo es una fiesta para los aficionados al balonmano, sino que también es una oportunidad inmejorable para dar a conocer este deporte y darle un pequeño empujón a su difusión entre la población española. En este sentido, la promoción del Mundial está dejando mucho que desear. Seguramente sean cuestiones económicas las que expliquen la casi total ausencia de publicidad en las calles, pero también tenemos que ver qué errores estamos cometiendo al promocionar el balonmano en territorio español.
El Mundial de enero puede marcar un antes y un después en el panorama balonmanístico de nuestro país. Puede significar un punto de inflexión pero, de no ser así, la cuesta abajo de este maravilloso deporte parecerá inexorable. De los éxitos de estos jugadores depende en gran medida el éxito y la pervivencia de nuestro balonmano.
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