Olga culminó un enorme partido del Barça

por FRAN MORENO el 12 noviembre, 2015 • 12:10

Xavi Llorens ha encontrado la fórmula para que este Barça siga igual de competitivo a pesar de que en unos meses se hayan marchado jugadoras como Virginia, Vicky Losada, Marta Corredera o Sonia Bermúdez, cuatro puntales del equipo, sobre todo las dos primeras, que eran las piezas clave de todo el engranaje azulgrana en el centro del campo. El técnico catalán ha cortado esa hemorragia que habían provocado las bajas del verano y el equipo no se ha resentido. Al revés, ha cicatrizado de manera perfecta y salvo el empate ante el Cajasol de Huelva, el conjunto culé sigue compitiendo de manera extraordinaria tanto en liga como en Champions.

La vuelta de Miriam Diéguez tras su larga lesión y la nueva posición de Melanie como interior le han otorgado al Barça un mayor poderío en mediocampo y sobre todo mucho control del juego. El Barça ha perdido creatividad sin Vicky Losada, pero sigue teniendo un control absoluto de los partidos, ordenándose con cada posesión y siendo un auténtico muro en defensa. Su solidez es impagable en cada partido y muestra una competitividad mayúscula sea cual sea el rival que tenga enfrente.

Al Twente le aplicó la misma medicina de control, posesión de balón, juego de posición y presión muy alta tras pérdida. Las neerlandesas recurrieron al juego directo para tener un respiro en muchos momentos del partido, pero no lo encontraron porque Ruth y Ane Bergara formaron una pareja perfecta, acompañadas por Marta Torrejón y Leire desde los laterales, por donde se incorporan mucho en ataque, pero jamás pierden su posición en defensa y aportan un enorme equilibrio al sistema defensivo azulgrana.

El Barça se fue apoderando del partido con el paso de los minutos. Jenni Hermoso fue un quebradero de cabeza para la defensa neerlandensa porque en esa posición de falso nueve se descuelga mucho a centro del campo, flotando sin marcar nunca la referencia, lo que provoca mucha superioridad en los pasillos interiores. Además, el papel de Olga García fue fundamental. La extrema catalana necesitaba un partido tan completo para ganar en confianza. Su marcha al Levante le ha aportado ese grado de madurez, y en su vuelta al Barça ya no solo aporta el gol que siempre ha tenido, sino que interpreta mucho mejor el juego de posición, sabe alejarse del balón para estirar el juego por fuera y desde la banda interpreta muy bien el rol del desmarque al espacio que origina muchos desequilibrios en los sistemas defensivos rivales.

El Barça, y en especial Olga García, se estaba mereciendo el gol. El conjunto culé se posicionaba muy bien en campo contrario y tenía la suficiente paciencia para llegar a la frontal del área con mucha superioridad. Y ahí comenzaba el tiempo del talento. Olga se destapó con varios disparos muy peligrosos, Alexia ganó varias veces la línea de fondo y Jenni Hermoso también contó con varias acciones de gran calidad y mucho peligro. El encuentro estaba bajo control del conjunto azulgrana, que de forma inteligente no se desesperó a pesar de no marcar las numerosas ocasiones de gol que dispuso.

Xavi Llorens apostó a falta de 20 minutos por su segunda línea. Patri Guijarro y Gemma Gili le dan ese grado de fortaleza física y creatividad al juego azulgrana. Miriam se puso de pivote y las dos jóvenes aportaron la frescura necesaria para que el Barça siguiera hasta el final viviendo en campo contrario. A 15 minutos del final, en un gran ataque, Olga y Jenni Hermoso conectaron para culminar una jugada preciosa. Olga arrastró hacia adentro, soltó al movimiento al espacio de Jenni Hermoso que se llevó a tres defensoras con ella y con un toque genial dejó de tacón para Olga, que de primeras soltó un zurdazo imparable a la escuadra. El Barça mandaba en el juego y también en el marcador.

El 0-1 no echó atrás a las azulgranas, que buscaron el segundo gol. Bárbara y en la última jugada Marta Torrejón tuvieron dos ocasiones, pero Renata Jansen sacó el balón bajo palos. Las azulgranas completaron 90 minutos muy buenos, con un dominio absoluto, con un enorme control de la posesión de balón, sin exponerse tras pérdida y con el enorme convencimiento que este equipo, a pesar de las bajas que sufrió en verano, siempre tiene esa vuelta de tuerca para reinventarse y continuar creciendo desde el aspecto colectivo como un conjunto superlativo.

– Twente-FC Barcelona (Women’s Champions League, ida octavos de final). 11-noviembre-2015. FC Twente Stadion, Enschede. 0-1 (Olga)

LOS PUÑALES MORTALES DEL OLYMPIQUE DE LYON

Las francesas se enfrentaban ante su enorme verdugo en esta Champions, los octavos de final. En las dos últimas temporadas, Turbine Postdam y PSG le habían dejado muy pronto fuera, lo que había generado una gran incertidumbre e inquietud en el conjunto francés. Los fichajes de Bremer y Hegerberg le han aportado una mayor competitividad, carácter y sobre todo mucho talento. La noruega le amargó la vida al Atlético de Madrid porque le asestó dos puñaladas mortales en momentos clave: en el último minuto del primer tiempo y en el último minuto de partido.

El Atlético de Madrid sufrió una barbaridad durante el primer tiempo. Las francesas rayaron a un nivel inmenso en ataque. Las rojiblancas eran un quiero y no puedo, porque estaban obligadas a defender muy atrás y no podían salir con cierto peligro en la transición. Necib y Hegerberg pusieron un 0-2 que hacía mucho daño en el marcador, pero que desató el orgullo y carácter de las jugadoras de Miguel ángel Sopuerta. El técnico madrileño retocó varias cosas en el descanso. Cambió de banda a Bea Beltrán y Kuky, por lo que Bea sujetó mucho más las subidas de Majri. Además, a Sonia Bermúdez la colocó de nueve junto a Esther y ambas ensuciaron la limpia salida de balón de las centrales francesas. Meseguer comenzó a saltar mucho más arriba para robar. Henry, en otro partido impresionante, comenzó a sufrir en la segunda parte. La intención rojiblanca se vio refrendada con el gol de Nagore Calderón.

Quedaban más de 20 minutos para el final y el Olympique vio que el Atleti había crecido de forma exponencial en el partido. Lola Gallardo había sostenido a su equipo en el segundo tiempo con tres paradas clave, pero no pudo una vez más con Hegerberg, que acabó amargándole la noche a las rojiblancas. Encaró a la portera rojiblanca, se quedó sin espacio, pero se inventó una media vuelta y con la portería cubierta por las centrales rojiblancas se sacó un golazo por toda la escuadra. La joven noruega culminó otro partido magistral. La eliminatoria se ha puesto muy difícil para el Atleti, pero la buena imagen del segundo tiempo es el paso para que las rojiblancas continúen creciendo y compitiendo de manera magnífica cada partido.