Nueva Zelanda, campeón

por ANDRES MARCHANTE el 30 septiembre, 2012 • 9:29

Los All Blacks son los campeones de la primera edición del Rugby Championship (anteriormente, 3 Naciones). A una jornada del final, logran alzarse con el título ganando de manera arrolladora en el estadio Ciudad de la Plata por 15-54 a los Pumas. Obviamente, es su primer título, aunque si juntamos este Rugby Championship con el anterior 3 Naciones, Nueva Zelanda gana su undécimo trofeo. Total dominador del hemisferio Sur, ya que prácticamente dobla a sus dos perseguidores juntos. Australia y Sudáfrica tienen tres trofeos cada uno. Evidentemente, Argentina es la 1ª vez que participa y no tiene ninguno.

El partido comenzó con un mal comportamiento por parte del público argentino. En rugby no se permite manchar las tradiciones del rival. Pitaron a la tradicional Haka, aunque bien es cierto que otra parte del público intentó tapar esos pitidos. A Nueva Zelanda no hace falta motivarla, ni provocarla. Sabían que estaban a un partido de levantar la copa eso ya es suficiente motivación para un deportista, pero la conexión All Black con su espiritual danza tradicional es casi inexplicable. Y sentirse ofendidos provoca que den mucho más de lo que tienen. Así fue.

Es cierto que Argentina empezó muy bien, presionando en campo contrario y poniendo en jaque a la defensa neozelandesa. De hecho, Lucas González Amorosino percutió en la zaga rival de una manera brutal, driblando cualquier casaca negra que se encontrara delante, eléctrico, daba sensación de escurridizo. Cuando fue placado, supo abrir el juego para que Martín Landajo abriera el grifo de la euforia puma. Lucas González Amorosino deslumbraba de nuevo. La memoria nos llevó a aquel ensayo magnífico que permitió a los Pumas eliminar a Escocia y clasificar para los cuartos de final del pasado Mundial.

Sin embargo, Nueva Zelanda despertó. Atacaba por todos los frentes con su imparable delantera. Forzaban continuos golpes de castigo que Carter ejecutaba casi de manera quirúrgica en cualquier parte del campo. Excelente partido del apertura estrella de los Crusaders y de los All Blacks. Muchas ganas tenía el público de presenciar a Carter, tras perderse los dos anteriores partidos por lesión, aunque Cruden cumplió con creces durante su ausencia. La masacre seguía su curso. Es cierto que Argentina tuvo muchos fallos de concentración, pero supo cerrar más o menos bien el centro de la zaga (aunque algunos de esos despistes les costaron ensayos en contra) y obligaba a los All Blacks a llegar hasta la línea de cal para clavar los ensayos. Tampoco les importaba mucho. Julian Savea y Cory Jane, los alas oceánicas, hicieron su trabajo a la perfección. Masacre brutal en la primera parte (8-32).

Aunque el partido y el torneo estaban sentenciados, los All Blacks no se durmieron y pese al bajón lógico de las rotaciones siguieron anotando. Cruden convertía los golpes de castigo y las transformaciones, no bajando el nivel mostrado por Carter. Con este panorama, cualquier equipo se rinde, pero eso no va con los Pumas. Siguieron insistiendo en jugar, en plantar cara y en intentar anotar. Lo consiguieron. Gonzalo Camacho ejecutó un estético ensayo para que los Pumas maquillasen algo el resultado. Digno de admirar su coraje y su valor, un equipo como la copa de un pino que merece cualquier reconocimiento mundial solo por las ganas y el amor con el que juegan a este deporte.

El resultado final fue de 15-54, paliza deportiva. Pero reconicimiento mundial para los argentinos por su valor, por su gran torneo y por saber que pronto les vendrá una victoria. Quién sabe, quizás en la última jornada contra Australia. Mientras, Nueva Zelanda estrenará su flamante campeonato en Sudáfrica, donde decir que no se juegan nada es mucho: la leyenda de esa camiseta no permite amistosos.

Puntuaciones:

Argentina > Ensayos: Martín Landajo, Gonzálo Camacho. Golpe de castigo: J.M. Hernández. Transformación: J.M. Hernández

Nueva Zelanda > Ensayos: A.Smith, Cory Jane x3, J.Savea x2, M.Nonu. Golpes de castigo: Dan Carter x2, Aaron Cruden. Transformaciones: Dan Carter x3, Aaron Cruden x2.