Mucho trabajo para Mancini

por NICOLAS QUIROGA el 23 noviembre, 2014 • 23:10

1.- Flojo Derbi de la Madonnina que evidencia el pobre nivel deportivo de Milán e Inter. Partido con muchos errores en la entrega, balones largos y en donde la técnica brilló por su ausencia. La novedad en el elenco de Inzaghi era la suplencia de Honda y el 4-2-3-1 con Essien y Muntari en el doble pivote y Menez mutando el sistema a 4-3-3 bajando siempre a recibir en la gestación para auxiliar a los dos mediocentros. Éñ y Torres estorbaban la salida de Kuzmanovic y los centrales del Inter decidieron saltarse esa zona mediante balones directos a Icardi. El público sobrevivió a un débil emparejamiento gracias a la emoción que entrega todo clásico.

2.- La importante baja de Medel para generar equilibrio, potenciada por la decisión de Roberto Mancini de sentar en el banquillo a Hernanes, tuvo como resultado un centro del campo sin ideas con el balón y con poca agresividad. El Inter no presionó el punto débil del Milán, la salida en primera fase con el balón. Aun así, el comienzo no fue malo para los interistas, que gozaron en los pies de Icardi de una ocasión única que fue salvada por Diego López. La entrega errónea había sido de Muntari.

3.- La imprecisión era la tónica del encuentro y de ella derivó el gol de Menez. Obi regaló el esférico tras la presión de Muntari y, con sus compañeros mal posicionados, generó un contraataque perfecto. El francés inició la jugada con una apertura a El Shaarawy, quien dibujó una pared con Essien para ganarle la espalda a Nagatomo, que cubrió la salida a destiempo de Ranocchia (a punto de chocar con Juan Jesus). Centro preciso y definición con el interior de mucha elegancia de Menez (gesto técnico que podría haber firmado Benzema) sin que el balón tocase el suelo.

4.- Los visitantes nunca estuvieron cómodos con el 4-4-2 en rombo. La defensa sufrió mucho, sobre todo Juan Jesus, quien demostró no estar preparado para el doble cierre, a diferencia de cuando participa en línea de tres, donde marca solo su perfil. Dodo tampoco se adaptó en este primer partido de Roberto Mancini. Mucha fragilidad que desembocaba en la ayuda constante de los interiores Guarín y Obi más el repliegue de Kovacic (colocado en el vértice más alto del rombo). Mención aparte para la ubicación como doble lateral de Rodrigo Palacio. Los laterales se vieron siempre desbordados.

5.- La novedad fue Rami en el lateral derecho. Realizó una labor más que aceptable, muy meritoria, ya que no es ni mucho menos su posición predilecta. El primer tiempo finalizó con un Milán muy cómodo en defensa organizada, bien posicionado con la agresividad ya conocida de los ghaneses (los labios de Dodo y Obi fueron testigos). El Inter no encontró respuestas tras el gol encajado y los locales no sufrieron en ningún segmento.

6.- Diego López descolgó con personalidad y tranquilidad cada centro que llegaba a su área, y una parada suya ante Kuzmanovic tras un córner en corto fue clave para evitar el empate. El equipo rojinegro había replegado demasiado, y tras un despeje fallido al borde del área de Zapata, Obi igualó la contienda con un disparo angulado ante el que nada pudo hacer el exjugador del Real Madrid. Era un 1-1 merecido por las ocasiones de ambos equipos, pero no por el juego desplegado, ya que ninguno de los dos demostraron estar al nivel de los dos mejores equipos de Italia.

7.- El Shaarawy tuvo el 2-1 en el minuto 75, pero el travesaño repelió una situación similar a la de Icardi en el primer acto. Un pase en profundidad de Bonaventura, Juan Jesus no midió y el delantero milanista no logró la ventaja para su equipo. Minutos más tarde, tres concretamente, Icardi envió al larguero un centro de Guarín tras una buena proyección de Nagatomo. Ranocchia no cuajó un buen partido, pero salvó en dos ocasiones su valla ante disparos de Bonaventura, al iniciarse la segunda parte, y Poli, en la última jugada del cotejo.

8.- Honda ingresó por Torres y el Milán cambió a un 4-4-2 con el japonés en la derecha, Menez de falso nueve y El Shaarawy a su izquierda intentando la conexión con Bonaventura, interior por ese flanco. Poli, Hernanes, Osvaldo y M’Vila no tuvieron tiempo para aclimatarse al choque.

y 9.- Las individualidades pesaron y Menez fue más que Kovacic. El Milán no terminó de aprovecharse del flojo desempeño a la espalda de los laterales rivales. El Inter mejoró y generó en la segunda parte por el sector derecho con Palacio y Guarín, adelantando líneas. El Milán recibirá el próximo domingo al Udinese, mientras que su máximo rival enfrentará al Dnipro el jueves en la Europa League y finalizará la semana visitando el Olímpico para jugar contra la Roma. Con 18 y 17 puntos respectivamente, no aprovecharon el tropiezo del Nápoles, aunque el ingreso a la tercera plaza para la próxima Champions aún no está listo para sentencia.