"Hay que recordar que quienes escriben para los imbéciles siempre tienen un numeroso público de lectores". Arthur Schopenhauer
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Cada gesta del Borussia Dortmund parece resultar contraproducente para el equipo, pues no tarda en perder a sus principales estrellas. Tras sucederse la marcha de Mario Götze y el anuncio de la futura salida de Robert Lewandowski, el club borusser vuelve a peinar el mercado fijándose en los talentos más reseñables fuera de las grandes ligas. Milos Jojic, centrocampista versátil del Partizan de Belgrado, llega al conjunto de la cuenca del Rühr con la vitola de promesa, siendo una de las mayores sensaciones de la Serbian Superliga y del combinado nacional. Su logro liguero en la temporada pasada y su buen arranque goleador en la presente han sido las credenciales para fichar por el equipo alemán.
Milos Jojic sabe economizar sus esfuerzos dentro del terreno de juego. Dada su polivalencia tanto en la medular como en la línea de tres cuartos, sabe adecuar el ejercicio en los diferentes tramos del partido. No es un jugador excesivamente portentoso, pero responde a las exigencias rivales con valentía. Tiene más pundonor que capacidades atléticas, pero una de sus mejores cualidades recae en su velocidad, porque al no ser un magnífico velocista –no es un extremo al uso–, es costumbre verle realizar cambios de ritmo que le ofrecen ventajas en el campo. Su agilidad se incrementa gracias a su inteligencia y a su capacidad de usar ambas piernas. Diestro natural, en numerosas ocasiones ha dejado detalles de enjundia con la zurda.
En el Partizán de Belgrado ha demostrado ser un centrocampista con bastante capacidad para tomar decisiones, lo que implica una madurez bastante notoria a sus casi 22 años de edad. Es un jugador sumamente inteligente, con habilidad para amoldarse a varios puestos aplicando sus mejores cualidades dependiendo de la posición que ha tenido que desempeñar.
Tiene actitud sobre el terreno de juego y le gusta dejarse ver sobre él, aunque sin tomar muchos riesgos con la pelota en los pies. Puede diluirse en partidos de gran relevancia, y más tratándose de un campeonato tan exigente como es la Bundesliga. La motivación correrá de la cuenta de Jürgen Klopp, pues todavía falta por desarrollarse en este ámbito.
Seguramente sea el perfil que más potencie sus condiciones como futbolista. Sus cambios de registro le convierten en un jugador que debe de controlar varias especificaciones técnicas. Tiene un buen trato de balón, con una conducción bastante fina y depurada, teniendo siempre el esférico cercano a la bota tanto en ritmos más pausados como más rápidos. Tanto en la medular del campo como en la mediapunta ha dejado grandes detalles técnicos en cuanto al pase se refiere. Es muy preciso y correcto a la hora de decidir cuándo asistir al compañero. Con respecto a su golpeo, suele ser un asiduo en los golpes francos, lo cual demuestra el valor de su pierna derecha. Suple su falta de potencia con precisión en el chut.
Cuando ha trabajado como volante o extremo se ha apreciado más su velocidad, finta o regate. Es un jugador que no necesita realizar galopadas para regatear, pues prefiere tener el balón cercano a sus botas. No es un regateador nato, pero usa recursos simples como nadie. No es un dechado técnico en este aspecto, pero su cierta simpleza en los movimientos le genera ventajas en los uno para uno. No titubea ni tampoco imposibilita la fluidez del juego en este aspecto realizando frivolidades.
Milos Jojic destaca por su polivalencia. Funciona perfectamente de interior, acompañado de un mediocentro más posicional, aunque en ocasiones también ha jugado más anclado. Además, se desenvuelve en el enganche con bastante soltura, siendo una posición que deja ver sus mejores cualidades técnicas y, por supuesto, más vistosas. Por último, los costados son una alternativa a considerar, prefiriendo el perfil izquierdo por su tendencia a jugar más centrado. Un 4-2-3-1 viene a la perfección al jugador, en ese compendio de posiciones que domina.
Es netamente ofensivo, por lo que en labores de construcción siempre prefiere descolgarse para ser partícipe en las jugadas de ataque. Le gusta bastante el juego asociativo, buscando ventajas en tres cuartos a base de pase filtrados o paredes. En la banda siempre suele recurrir a la pared por falta de demasiada velocidad como para tocar línea lateral y centrar. Tiende a realizar cambios de ritmo para superar líneas y generar superioridades numéricas en ataque.
Sin balón suele aprovechar los espacios por detrás de los centrocampistas para proyectar el juego vertical. Más que un mediocentro prefiere ser un apoyo, por lo cual es costumbre verle realizar ayudas al regista para otorgar más fluidez cuando se encuentra en la base de la jugada.
Quizás no sea su mejor virtud, pero tiene un don natural a la hora de aguantar al rival. No suele precipitarse en la marca para no propiciar una desventaja. También corta con cierta propiedad, aunque en ocasiones se precipita en la acción. Le cuesta replegar y recuperar la posición para situarse de forma correcta tácticamente, aunque suple esta debilidad con tesón y sacrificio.
Milos Jojic llega al equipo de la Bundesliga que más le beneficia en cuanto a sus cualidades técnicas y tácticas. Llega como único fichaje invernal del Borussia Dortmund y su expectación aumenta ante la imperiosa necesidad que tiene el equipo de contar con jugadores para afrontar la siguiente mitad de la temporada. De momento, se espera que sea un jugador relevo, aunque no sería de extrañar, si su adaptación es rápida, que sea un jugador relevante en ciertos momentos de la temporada. No cabe duda, otorgando un margen, que esta campaña será una toma de contacto.
* Guillermo González es periodista.
– Foto: AP
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