Miedo a las alturas

por AGUSTIN GALAN el 14 septiembre, 2014 • 12:22

1.- Con el primer parón internacional ya finiquitado, la temporada futbolística deja atrás definitivamente el verano; y con él, las probaturas y los periodos de gracia. El perfil de los equipos de cara al nuevo curso deja de estar difuminado y el Arsenal-Manchester City de liga poco o nada tuvo que ver con el de la Community Shield, en el que los londinenses vencieron con claridad al vigente campeón de la Premier League. Los de Manuel Pellegrini querían vengarse de aquel 3-0; y el Arsenal (así se ve en septiembre) intentar demostrar que es aquella su imagen real y no la del equipo dubitativo de las últimas semanas.

2.- El Emirates dio la bienvenida a Danny Welbeck. El exdelantero del Manchester United, descartado de Old Trafford por su escaso acierto ante el gol según Louis van Gaal, quiso agradar a su nueva afición, y ésta quiso dejarse conquistar por el sustituto de Giroud durante su lesión, ya que la confianza en Sanogo está bajo mínimos. El ariete inglés mostró movilidad y pudo haber cantado gol en sus primeros minutos, pero la madera negó una bella vaselina que superó a Hart. Terminó con calambres, cinco remates infructuosos y el reconocimiento de una grada que, por ahora, reconoce su trabajo.

3.- En el Manchester City se vio una estampa atípica. La presencia de Lampard, tantos años después, con una camiseta distinta a la del Chelsea, chocaba visualmente. Junto a Fernandinho, el exinternacional con los pross tenía la misión de sustituir al doble pivote Touré-Fernando. La falta de compenetración con sus nuevos compañeros y la amarilla que lo condenó a ser sustituido en el descanso dejaron una estampa de un Lampard más cercano al nivel de su próximo destino, la MLS, que de la leyenda blue de la última década.

4.- Con la sala de máquinas diferente a la habitual, Manuel Pellegrini apostó por la táctica que siguen la mayoría de rivales del Arsenal: un buen repliegue y esperar que su talentosa línea de centrocampistas -Alexis, Ramsey, Wilshere y Özil- terminara cortocircuitándose por sí sola. Después de unos minutos iniciales inspirados y varias faltas tácticas, el resultado terminó dando sus frutos para los citizens durante la primera parte.

5.- El Arsenal se fue enfriando en una falsa sensación de control y el Manchester City aguijoneó su defensa por su flanco más débil en cuanto tuvo oportunidad. La velocidad de Navas fue incontestable para Monreal, que sigue sin aprovechar las reiteradas lesiones de Gibbs para asentarse como una opción titular, y el centro del sevillano se encontró con la inspiración de Agüero, que vive un momento dulce de cara al gol mientras intenta readaptar su físico para evitar un nuevo año de lesiones. En cuestión de instinto matador, ambos equipos están separados por un abismo.

6.- Tres amonestados en la primera mitad suponían un riesgo para Pellegrini de cara a los segundos 45 minutos, por lo que Lampard dejó paso a Nasri sobre el césped del Emirates, un factor más que enervante para la grada rival y una preocupación más en la banda, dado el buen entendimiento del francés con Silva en el inicio de la temporada. El sacrificado Milner, en una nueva exhibición de polivalencia, ocupó el centro del campo junto a Fernandinho para contener la creación gunner.

7.- Cuanto más delicada es la situación, más factible es la aparición de Wilshere en el partido. Özil se apagaba como una vela y Ramsey estaba firmemente atado por sus marcadores, por lo que al Arsenal le quedaba fiarlo todo a su número 10, que se encuentra en plena fase de reivindicación ante las críticas externas. Asumió galones y se asoció con Alexis y Debuchy, guerrilleros ofensivos como él, para volver a crear peligro en el área de Hart. Su pie izquierdo pisó el balón con calidad para zafarse de su par y con la derecha superó la portería del City, reinstaurando el empate inicial.

8.- No se quedó ahí el empuje del Arsenal, que mostró sus mejores minutos de fútbol en lo que va de liga, culminados por Alexis en el 2-1 tras asistencia, cómo no, de Wilshere de cabeza. Los de Arsène Wenger le metieron una marcha más al partido y esta vez parecía difícil que todo se pudiera torcer, con un cuarto de hora por delante y los tres cambios aún en la recámara para gestionar los minutos finales.

9.- Todo se torció para los intereses del club del norte de Londres en ese cuarto de hora final. El doloroso esguince de tobillo sufrido por Debuchy volvió a dejar patente que la línea defensiva del Arsenal no está diseñada para imprevistos, ni mucho menos. Una vez más, el joven Chambers tuvo que salir para cubrir una lesión de un compañero. Como lateral o como central, Chambers está siendo un fichaje salvador para Wenger, demostrando su rápida capacidad de adaptación a cualquier situación.

10.- La lesión de Debuchy no fue la única pesadilla recurrente vivida por el Arsenal. Un saque de esquina botado por Kolarov fue directamente a la cabeza de Demichelis, sin marca aparente, y el balón entró por la escuadra izquierda de Szczesny. El Manchester City se sumó así a Crystal Palace, Everton y Leicester, los otros equipos que han superado a los gunners por alto. Las jugadas de estrategia están siendo la principal hemorragia de puntos para el Arsenal, que ya se ha dejado seis con sólo doce disputados.

y 11.- El pitido final de Mark Clattenburg dejó un regusto amargo en ambos equipos. El Arsenal tiene más de una asignatura pendiente -y un panorama deprimente en cuanto a lesiones en la zaga- y el Manchester City se fue preguntándose qué habría podido pasar de haber explotado más la veta del juego aéreo. La época de los ensayos ya llegó a su fin y las preguntas sin responder suelen castigar a los dubitativos con puntos en el camino.