Maccabi Tel Aviv Hanitzachon

por DAVID FERNANDEZ el 19 mayo, 2014 • 12:28

LAS ESTADÍSTICAS ESTÁN PARA CONTARSE

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Por cuarta temporada consecutiva, el gran favorito a ceñirse la corona del baloncesto europeo no pudo lograr su objetivo, sorprendido por un equipo con menos talento pero mucha más fe y esfuerzo colectivo. En 2011, el Panathinaikos dejó el Barça sin jugar la Final Four en su ciudad; en 2012 y 2013, el Olympiacos hizo dos remontadas inesperadas en las finales ante el CSKA Moscú y Real Madrid; y en 2014 ha sido el Maccabi Tel Aviv el que ha vuelto a arrebatar el título a los madridistas. El equipo israelí ya tiene seis Copas de Europa, como el CSKA Moscú y el Panathinaikos, y solo tiene por delante al Real Madrid (8).

Camino a la Final Four

El F. C. Barcelona, mejor equipo del Top 16 con doce victorias, barrió al Galatasaray especialmente en el Palau con dos triunfos por más de veinte puntos. Solamente el propio Barça en 1996, ante el Ülker turco, había comenzado una serie con dos palizas semejantes.

El siguiente equipo clasificado fue el Maccabi Tel Aviv, que dejó al Olimpia Milán sin opción de disputar la fase final en su pabellón. La clave estuvo en la remontada y triunfo en la prórroga de los macabeos en el primer partido y en prolongar el gafe de los equipos italianos en sus visitas a Tel Aviv, donde han caído en sus veinte últimos partidos.

Las otras dos series solo vieron triunfos locales y, por tanto, se prolongaron hasta el quinto partido. Nunca el equipo visitante ha sido capaz de ganar el quinto partido de una serie de Copa de Europa tras ocho precedentes, y Panathinaikos y Olympiacos no fueron una excepción. Especialmente dolorosa fue la eliminación del PAO, que perdió en Moscú 74-44, siendo esta la menor anotación de su historia europea.

Semifinales

Fue la fase final perfecta, o casi. Llegaron los tres equipos con más Final Four jugadas (14 Barça, 13 CSKA y 12 Maccabi) y el Real Madrid, el equipo más lauredo en la Copa de Europa y el unánimemente reconocido como mejor equipo del momento.

En la primera semifinal, el CSKA siempre llevó la iniciativa y se plantó a once minutos del final con una cómoda ventaja de quince puntos (55-40). Pero el Maccabi nunca se rindió, ajustó el marcador y ganó el partido (67-68) con una canasta de Tyrese Rice a falta de cinco segundos para meter a su equipo en su décimo quinta final continental. Con esta victoria, David Blatt por fin pudo vencer a un equipo de Ettore Messina, algo que no había hecho ni en Euroliga ni en la liga rusa.

Duelo español sin historia en la otra semifinal. El Barça, pletórico por apalizar la semana anterior al Madrid en la liga y por no tener la plaga de lesiones del año pasado, consiguió las primeras ventajas en el marcador. Pero fue un espejismo y en el resto del encuentro mandó un Madrid liderado por Sergio Rodríguez y Nikola Mirotić. El 62-100 definitivo supuso la peor derrota del Barça en competición europea, la segunda mayor diferencia en un partido de Final Four (el Maccabi ganó la final de 2004 ante la Fortitudo Bolonia por 118-74) y el triunfo madridista más contundente ante su eterno rival en los últimos treintaisiete años.

Tercer puesto

Los dos equipos más superados por lo que supone una Final Four (cuatro títulos en veintisiete participaciones entre ambos) se jugaron el honor del tercer lugar en un partido de mucha anotación que se llevaron los catalanes por 93-78. El Barça se va de Milán con su tercera semifinal seguida perdida bajo el formato Final Four, lo que ya le había ocurrido al Aris (1988-1990), CSKA Moscú (2003-2005) y Baskonia (2006-2008).

Final

En el encuentro por el título, ambos conjuntos tenían fantasmas que ahuyentar. El Madrid, que lleva desde 1995 –la última temporada de Sabonis en el equipo– sin ser campeón, necesitaba demostrar que lo de 2013 en Londres fue un accidente, y el Maccabi necesitaba un triunfo que neutralizase el hecho de haber perdido sus seis últimos partidos ante el Madrid y sus tres últimas finales.

La defensa del Maccabi comenzó ahogando a un Madrid que solo anotó un tiro de campo en los siete primeros minutos de partido, pero pese a un inicio tan malo, terminó el primer cuarto con ventaja (16-15). La salida de Sergio Rodríguez y de Felipe Reyes cambió el partido y el Madrid logró su máxima renta del encuentro: 33-22 en el minuto 17. Pero cuando peor lo estaba pasando el Maccabi apareció David Blu para acabar la primera parte con siete puntos seguidos y ajustar el marcador: 35-33 para el Madrid.

La segunda parte fue de extrema igualdad, ni españoles ni israelíes lograron más de cuatro puntos de ventaja y, como consecuencia de ello, el partido se fue a la prórroga, la segunda en la historia de las finales de Copa de Europa tras la de 1969, que tuvo dos y se llevó el CSKA Moscú ante el Madrid.

La prórroga

Para el Madrid, el tiempo extra fue una segunda oportunidad, pero en ella se vio superado por la marea amarilla, en el campo y en la grada, y encajó 25 puntos, 14 de ellos de Tyrese Rice. El Madrid y el Maccabi han jugado tres prórrogas en competición europea y siempre ha ganado el Maccabi. Y esta vez con récord, porque nunca antes había anotado 25 puntos en una prórroga de torneos continentales. El Madrid protagonizó la peor prórroga de su historia europea al recibir esos 25 puntos y es el primer equipo subcampeón en ediciones consecutivas de la Copa de Europa desde el F. C. Barcelona en 1997.

Jugador más valioso

El Maccabi cimentó su triunfo en los rebotes ofensivos (19, aunque el Madrid también cogió un número elevadísimo, 16) y en Tyrese Rice, que falló diez tiros de campo pero que gracias a un 100 % en tiros libres se fue hasta los 26 puntos. Desde que Manu Ginóbili metiera 27 para la Virtus Bolonia en la derrota ante el Panathinaikos en 2002, ningún otro jugador había anotado tanto en la final. También ayudó la mala noche del Real Madrid desde el triple ya que tiró 34 veces, record en una final de Copa de Europa, y erró 23 lanzamientos, marca que iguala el record en la final de la competición que estableció la Virtus Bolonia desde el primer encuentro por el título en 2001 ante el Baskonia y que los boloñeses, naturalmente, perdieron.

Y además…

Gimnasia artística. Campeonato de Europa femenino

Sofía (Bulgaria) fue elegida como sede de los campeonatos de Europa de artística, el masculino para la próxima semana y para esta el campeonato femenino sin concurso completo individual, como está estipulado cada dos años.

Competición por equipos

Rumanía logró su séptimo oro en apenas once ediciones y además revalidó el título conseguido hace dos años en Bruselas. Pese a su gran cantidad de títulos, Rumanía solo había obtenido oros seguidos cuando ganó las tres primeras ediciones (1994-1998).

Asimétricas

La británica Rebecca Downie se hizo con el título y dejó con la miel en los labios a las rusas Mustafina y Spiridonova, que ganaron la plata y el bronce. Solamente otro país, la URSS en Landskrona 1969, logró dos medallas en este aparato quedándose sin oro.

Barra de equilibros

Las rusas logró su único oro del campeonato gracias a Maria Kharenkova, de 15 años. Rusia es el país que más campeonatos de Europa seguidos lleva consiguiendo algún oro, nueve en total, desde que no lograra ninguno en Debrecen 2005.

Salto

Giulia Steingruber repitió título y ya suma cuatro medallas europeas en total, para ser la mujer suiza que más tiene, superando a Ariella Käslin. La subcampeona fue Anna Pavlova, que tras seis medallas para Rusia dio la primera de su historia a Azerbaiyán. Pavlova iguala a Erika Zuchold como la mujer con más medallas en la historia del campeonato de Europa, pero sin oros (7).

Suelo

Oro compartido entre Larisa Iordache, única en participar en las cuatro finales por aparatos, y Vanessa Ferrari. Es el primer oro compartido en este aparato desde San Petersburgo 1998, con Ungureanu y Khorkina

Triatlón. World Series

Tercera etapa de las Series Mundiales en Yokohama (Japón). En la carrera masculina, España consiguió el segundo doblete de su historia: en Auckland 2013, Gómez Noya quedó por delante de Mario Mola, y esta vez repitió el orden. Con esta victoria, Javier Gómez Noya batió el récord de Alistair Brownlee al lograr su cuarta victoria consecutiva.

En categoría femenina, muchas novedades, no por la campeona, Gwen Jorgensen, que ya ganó en esta ciudad en 2013, sino por las otras componentes del podio. Ai Ueda, subcampeona, obtuvo el mejor resultado de una japonesa, y Agnieszka Jerzyk, tercera, es la primera polaca que se sube el podio.

Motociclismo. Mundial de velocidad

Quinta prueba de la temporada en Le Mans (Francia) y con datos que recordaron los años setenta. En Moto 2, Mika Kallio, vencedor de la última carrera en Jerez, repitió victoria para ser el primer finlandés en ganar dos carreras seguidas del mundial desde Teuvo Länsivuori en 1973 en 350 cc.

En la cilindrada reina, Marc Márquez se equivocó en la primera vuelta y quedó relegado a la décima posición. Pero remontando a ritmo de un puesto por vuelta asaltó el liderato y se alejó de Valentino Rossi con una facilidad pasmosa. Márquez ha vencido en las cinco carreras disputadas, el mejor inicio de año desde que Giacomo Agostini hiciera lo mismo en 1972.

Atletismo. Diamond League

Tres protagonistas en la reunión de Shanghái. El primero fue el jabalinista Ihab El Sayed, que en su primer lanzamiento se fue hasta los 89,21 m, nuevo récord africano, y se convirtió en el primer egipcio en ganar en cualquier prueba de la competición.

Las otras dos fueron mujeres: Sandra Perković y Blessing Okagbare. La discóbola croata, porque lanzó el artefacto hasta 70,52 m, la mejor marca mundial desde el verano de 1992; y la nigeriana, porque consiguió un doblete inédito: ganar 200 y salto longitud en un mismo mitin de este nivel.

Rugby. Sevens World Series

La segunda edición de las Series Mundiales femeninas confirmó a Nueva Zelanda como la gran potencia de la especialidad. Las neozelandesas han ganado tres torneos, como la temporada pasada, aunque han tenido que jugarse el título en la final del último torneo, situación solventada al derrotar a Australia por 29-12 y encadenar su duodécimo partido seguido anotando al menos 19 puntos, récord de la competición. La gran decepción de esta última etapa fue España que cosechó cinco derrotas y terminó en última posición, cuando siempre había estado entre las siete primeras en los torneos anteriores.

En la general final, Nueva Zelanda ganó y Canadá fue tercera, en ambos casos como la temporada pasada. La única novedad fue el subcampeonato de Australia, relegando a Inglaterra, tercera en 2013, a la cuarta plaza.

Tenis. Masters 1000 de Roma

El último gran torneo de tierra antes de Roland Garros presenció otro Nadal vs. Đoković, el partido más repetido de la historia del tenis en total, en finales y en Masters 1000. En cuarentaiún enfrentamientos ha pasado casi de todo, pero Đoković consiguió algo que nunca antes había hecho, ganarle a Nadal en tierra en el último set. Una victoria que le permite sumar su décimo noveno Masters 1000 y tercer título en Roma.

En dobles, los campeones en Madrid, Daniel Nestor y Nenad Zimonjić, ganaron otro título. Para el canadiense Nestor este es su cuarto entorchando en dobles en la capital italiana, igualando el récord de Brian Gottfried y Raúl Ramírez. Además, Nestor es el único jugador que ha ganado al menos diez Masters 1000 con dos compañeros diferentes (quince con Mark Knowles y diez con Nenad Zimonjić).

Tenis. WTA Premier Five de Roma

La ídolo local Sara Errani tenía que jugar las dos finales, pero sus problemas físicas permitieron un paseo de Serena Williams en la final individual y que ni siquiera terminara el primet set del encuentro de dobles. Con este nuevo título, Serena Williams supera a Steffi Graf y se queda en solitario como la mujer con más títulos individuales en torneos Premier (Mandatory/Five) con 19.

La retirada de Errani/Vinci en la final de dobles dejó sin terminar el partido por el título de dobles de un torneo de este nivel por tercera vez. La misma incidencia ocurrió en Hilton Head 1994 y en Moscú 1997.

Ciclismo. Copa del Mundo femenina

Ausente Marianne Vos –que hace una semana venció el Womens Tour británico–, fue su compatriota Kirsten Wild la que dio a los Países Bajos su primera victoria en el Tour de Chongming, la prueba china de la Copa del Mundo que se celebra desde 2010.

Lucha. Copa del Mundo de grecorromana

Teherán (Irán) albergó por cuarta vez la competición y, por fin, pudo presenciar el triunfo del equipo local, que tenía tres títulos pero ninguno conseguido en su país. Irán venció a Rusia en la final mientras que Azerbaiyán arrebató el bronce a Hungría, consiguiendo la primera medalla en la historia del país.

Golf. Circuito europeo

Miguel Ángel Jiménez no nota el paso de los años. Tras un brillante Masters de Augusta y un debut en el Circuito Senior Americano con victoria, el malagueño venció en el desempate el Open de España y, a sus 50 años y 133 días, mejoró su propio récord de vencedor más veterano de un torneo del Circuito Europeo.

Fútbol. UEFA Europa League

SL Benfica, que venía de eliminar al anfitrión de la final, la Juventus, y Sevilla F. C. se vieron las caras en Turín para alzar el título. El partido fue disparatado y el Benfica, muy valiente, desperdició infinitas oportunidades para marcar. El Sevilla supo desbaratar las ocasiones lisboetas incluso cuando más cansado estaba y llegó a los penaltis, donde dos paradas de Beto le dieron el cuarto título europeo de su historia (tres Copas de la UEFA/Europa League y una Supercopa).

El Benfica es el primer equipo en la historia de la competición que pierde la final en años consecutivos y seguirá conviviendo con la maldición de su exentrenador Béla Guttmann, puesto que desde la marcha del austriaco ha jugado ocho finales europeas y las ha perdido todas, dos de ellas en la tanda de penaltis.

Fútbol. OFC Champions League

El Auckland City revalidó su título de campeón de Oceanía con mucho sufrimiento. La final, a ida y vuelta, la encarriló empatando a uno en Port Vila, capital de Vanuatu, ante el Amicale, pero el equipo vanatuense se adelantó en el partido de vuelta y hasta el minuto 87 los de Auckland no pudieron decidir la final, que supone su sexto título en total y cuarto consecutivo. Solamente el Real Madrid (las cinco primeras Copas de Europa) e Independiente de Avellaneda (cuatro Libertadores entre 1972 y 1975) habían ganado cuatro veces seguidas su máxima competición continental.