Los recursos de Garcia y Totti

por NICOLAS GALLIARI el 30 noviembre, 2014 • 23:26

1.- Totti es un futbolista notable. Cuando el plan del rival parecía quitarle opciones y disminuía los espacios en su zona de influencia, sacó a relucir su capacidad técnica y lectura de juego. Si por dentro se le hacía imposible recibir, saltó a la banda para desde allí ofrecerse como posible descarga. Abandonó la posición de falso nueve con el fin de darle a Roma la fluidez necesaria. Desde ese desplazamiento, el capitán marcó el rumbo, y los de Garcia hicieron mucho daño por fuera.

2.- Mancini cambió el esquema táctico empleado en el partido frente al Milán. Aquella vez, había alineado un 4-3-1-2 que sin balón se reconvertía a 4-5-1 con Palacio recostado sobre el carril derecho. En esta ocasión, intentando evitar la superioridad por dentro del conjunto capitalino, el Inter salió en 4-4-2. Guarín y Kuzmanovic, como volantes exteriores, cerraban su posición hacia el círculo central. Asimismo, los zagueros adelantaban su línea para evitar las recepciones a la espalda de los volantes.

3.- En la primera parte, el Inter logró tapar los vacíos con cierta eficacia. Al tiempo que se hacía con el balón, carecía de creatividad y de un nexo para asentarse en campo rival, pero utilizaba balones largos para hallar a sus delanteros. Tal como ocurrió en el derbi de la jornada anterior, el equipo neroazzurro buscaba salir con juego directo hacia Osvaldo y Palacio. El mecanismo no llegaba a dejar de cara a los centrocampistas, pero sí quitaba velocidad al equipo contrario.

4.- Más allá de las intenciones visitantes en el Olímpico, Garcia mostró que su equipo está constituido por diferentes virtudes que le permiten reaccionar ante las adversidades. Cuando Totti cayó a los costados, no brindó referencias y generó espacios interiores a Gervinho. De hecho, así oxigenó a Roma. Por la banda derecha, Ljajic trianguló con el ‘10’ y Maicon para luego servir la pelota a Gervinho con un envío lateral. El marfileño convirtió desde el área chica el primer tanto del partido, en una acción que manifestaba la adaptación romana a la búsqueda interista.

5.- Minutos más tarde, Ranocchia igualó el partido en una jugada a balón parado, cuando el Inter comenzaba a crecer colectivamente. Dodó se desdobló por izquierda y combinó con Kuzmanovic. Por el otro sector, Palacio volvió a recostarse y conectó con Guarín. Carecía de profundidad, pero logró hacerse del balón y llevarlo lejos de su arco. De una asociación llegó el córner que desembocó en el empate del zaguero italiano.

6.- La acción individual de Holebas, al iniciar el segundo tiempo, volvió a poner en ventaja a la escuadra conducida por Rudi Garcia. Luego de proyectarse, el griego se sacó dos hombres de encima, ingresó al área y remató al segundo palo. Imposible para Handanovic. La Roma se hizo nuevamente con el balón en exclusividad y comenzó a encontrar a Nainggolan y Pjanic por detrás de Medel. Mediante una movilidad y una rotación constantes, ambos interiores del elenco capitalino generaron líneas de pase y consegueron desordenar al rival.

7.- El Inter generaba poco juego y no era capaz de salir con rapidez en una transición ofensiva. De todas maneras, de un saque de banda obtuvo el empate. De Sanctis poco pudo hacer ante el remate de Osvaldo, luego del desvío en Astori. No obstante, la Roma encontró pasillos por fuera en el desarrollo del partido, ante la poca ayuda de los volantes visitantes a los marcadores de punta. Con superioridad por las bandas, la Roma encontró más beneficios.

8.- García movió fichas desde el banquillo y dio ingreso a Florenzi y De Rossi. Anteriormente, Keita había tenido que cortar con falta los intentos de contra rivales y una amonestación lo condicionaba. Al unísono, optó por Florenzi para combinar por dentro y atacar la espalda de Dodó. Por la derecha fue Gervinho quien llegó al fondo y centró. Totti no pudo definir, pero sí dejó servido el balón a Pjanic. El bosnio, de frente, anotó el tercer tanto.

9.- Aumentó la fluidez de la Roma en el ataque organizado. Preciso en velocidad, Gervinho era un arma elemental para desmarcarse y romper ante la última línea. Con el correr de los minutos, el Inter decidió pararse metros más arriba en el campo. Durante el último cuarto de hora, la línea defensiva no acompañó la presión y el equipo quedó totalmente partido a la búsqueda de una nueva igualdad. En el epílogo del juego, desde la frontal, Pjanic cerró el encuentro con un magnífico tiro libre.

y 10.- Era vital para la Roma hacerse de una victoria como local, para no alejarse de la Juventus, que logró un triunfo in extremis. El Inter buscó quitarle espacios entre líneas, aunque Totti comprendió cuál era el lugar exacto para recibir. Mancini deberá encontrar un modelo de juego. Por lo pronto, ha modificado el plan en los encuentros dirigidos.