Las veces que te levantas

por DAVID FERNANDEZ el 29 junio, 2012 • 21:51

Helsinki’2012: Día 3

En el deporte (y también en la vida) lo importante no es el número de veces que te caes sino en cuántas ocasiones te levantas. Y eso ha quedado demostrado en la primera final del día, que pese a lo extenso y completo del mismo, ha sido la mejor. Un español, Víctor García, tuvo contra las cuerdas al francés Mekhissi-Benabbad, que se codea y a veces ganas a los mejores africanos. García llegó más fuerte a la recta pero tropezó en el último obstáculo perdiendo toda opción a la victoria. Aun así fue capaz de levantarse, seguir corriendo y llegar a la meta en tercer lugar, lo que no solo le da la medalla de bronce sino también el pasaporte olímpico en base a los criterios de selección de la Federación Española de Atletismo.

3.000 Obstáculos (Oro: Mekhissi-Benabbad, Plata: Akdağ, Bronce: García)

En una carrera muy táctica (se corrió en 8’33’’, la marca más lenta desde Estocolmo’1958), el título se decidió por un tropiezo en el último obstáculo del español Víctor García que, pese a todo, logró el bronce.

Mahiedine Mekhissi-Benabbad revalidó el título conseguido en Barcelona’2010. Es el 2º hombre de la historia que gana esta prueba 2 veces; el único bicampeón era el polaco Bronisław Malinowski, que también logró sus victorias de manera consecutiva: 1974 y 1978.

La medalla de plata lograda de rebote por Tarik Langat Akdağ (nacido en Kenya) es histórica para Turquía pues supone el mejor resultado de su atletismo masculino en la historia del Europeo.

La caída de Víctor García provocó una distancia entre oro y plata de 2’’01, la 2ª mayor diferencia en los últimos 50 años. Porque la más grande en las últimas ediciones la consiguió el alemán Damian Kallabis quien, tras un ataque aparentemente suicida al inicio de la prueba, se colgó la medalla de Oro en Budapest’1998, sacando 3’’60 al entonces vigente campeón Alessandro Lambruschini (ITA).

800 Lisos (Oro: Borzakovskiy, Plata: Bube, Bronce: Bosse)

Yury Borzakovskiy, con su habitual carrera (dejándose llevar en la salida y una progresión constante) consiguió su 10ª medalla internacional, primera a nivel europeo. El ruso ya se ha proclamado campeón europeo al aire libre e indoor, campeón mundial indoor y campeón olímpico en la distancia. Tan solo le falta el título mundial al aire libre. Además se convierte en el primer ruso campeón de la prueba puesto que el único soviético que triunfó en ella, Evgeny Arzhanov en Helsinki’1971, es ucraniano de nacimiento.

Los 7 últimos campeones europeos de 800 son de 7 países distintos: GBR, ITA, ALE, DIN, NED, POL y RUS. Es la 2ª mejor racha activa de este tipo en una prueba masculina solo por detrás del disco (aún por disputar en esta edición), que lleva 8: CHE, URSS, RDA, BIE, ALE, HUN, LIT y POL.

La emoción en la recta final compensó una primera vuelta muy lenta, tanto, que el tiempo del ganador, 1’48’’61, fue el más alto desde 1962, cuando Manfred Matuschewski (RDA) ganó en Belgrado (fue el primero de sus 2 títulos consecutivos) con un tiempo de 1’50’’5.

El joven Pierre Ambroise Bosse (20 años recién cumplidos) devolvió a Francia al podio. Ningún galo era medallista en esta prueba desde la plata de Marcel Hansenne en Bruselas’1950.

400 Vallas Femenino (Oro: Davydova, Plata: Rosolová, Bronce: Yaroshchuk)

Con mejor marca mundial del año, 53’’77, Irina Dayvdova sucedió en el palmarés a sus compatriotas rusas Evgenia Isakova (campeona en 2006) y Natalia Antyukh (ganadora en 2010). Es la 1ª vez que un país gana 3 títulos consecutivos en una prueba femenina con 3 atletas distintas desde que lo lograra Bulgaria en 100 vallas (Donkova en 1986, Zagorcheva en 1990 y Dimitrova en 1994). Minutos después, Rusia lo repitió en el 800.

El subcampeonato recayó en la checa Denisa Rosolová. Nunca antes una atleta checa (ni tampoco checoslovaca) se había subido al cajón en 400 vallas.

Triple Salto Femenino (Oro: Saladuha, Plata: Mamona, Bronce: Borodina)

El triple femenino es una de las pruebas más jóvenes (debutó en Helsinki’1994) y eso lo ha aprovechado la ucraniana Olha Saladuha para, con marca mundial del año en el primer intento (14,99m) ser la 1ª de la historia que revalida el título.

La subcampeona fue la portuguesa Patrícia Mamona, otra que tampoco esperó para lograr su mejor salto ya que batió su propio record nacional por 10 centímetros en el primer intento. Mamona se convierte en la 2ª portuguesa que se sube al podio en un concurso tras el doble subcampeonato (2006 y 2010) de Naide Gomes en longitud.

La diferencia que Saladuha sacó a la plata, 47 centímetros, y al bronce, 63, supone, en ambos casos, el record histórico de la prueba.

800 Lisos Femenino (Oro: Arzhakova, Plata: Sharp, Bronce: Maracheva)

En una recta final impresionante, sobre todo por el hundimiento de la bielorrusia Arzamasava, que se quedó sin medalla, Rusia prolongó su hegemonía en la prueba y gracias a la victoria de Elena Arzhakova acumula 5 de los 6 últimos títulos (3 consecutivos) con 5 atletas diferentes.

La sorprendente subcampeona fue Lynsey Sharp. La británica logró el mejor puesto para su país en la prueba desde la plata que Pat Lowe obtuvo en Helsinki’1971.

El colapso de sus perseguidoras permitió a Arzhakova sacar 2’’01 a la 2ª clasificada. Es la 2ª mayor diferencia de la historia de la prueba entre campeona y subcampeona y el récord se mantiene desde hace 50 años cuando en Belgrado’1962 Gerda Kraan (NED) sacó 2’’2 a Waltraud Kaufmann (RDA).

400 Vallas (Oro: Williams, Plata: Bekrić, Bronce: Melnykov)

El vigente campeón de Europa era galés, David Greene, y otro galés, Rhys Williams, le sucede en el palmarés. Williams acumula así 3 medallas seguidas (Bronce en 2006, Plata en 2010 y Oro en 2012), algo que no hacía nadie en esta prueba desde Sven Nylander (SUE), medalla de bronce en 1986 y subcampeón en 1990 y en 1994.

Siguiendo la retahíla de marcas pobres en casi todas las finales, el 400 vallas tampoco se libró y el 49’’33 con el que Williams logró el triunfo es la peor marca para un ganador desde el 49’’70 que le permitió a Vyacheslav Skomorokhov (URSS) vencer en Atenas’1969.

La medalla de plata de Emir Bekrić es la 2ª de la historia de Serbia desde su independencia (2006) tras el subcampeonato logrado por Olivera Jevtić en marathón en Budapest’2006. Hasta hoy, el último medallista masculino nacido en la actual Serbia era Dragutin Topić, campeón en altura en Split’1990.

Peso (Oro: Storl, Plata: Smith, Bronce: Kolašinac)

David Storl solo necesitó 2 lanzamientos válidos (pero ambos le hubieran dado el título) para ser, con apenas 21 años (cumplirá 22 el día de la inauguración de los JJOO Londres’2012), campeón mundial y europeo. Solo otro lanzador ostentó, a la vez, el título mundial y europeo: el suizo Werner Günthör, campeón europeo en 1986 y mundial en 1987.

La plata y el bronce hicieron historia para su país logrando la 1ª medalla europea en la disciplina para Países Bajos (Rutger Smith) y Serbia (Asmir Kolašinac). Especialmente significativo es el bronce del serbio, que llegó escasos minutos después de la plata de su compatriota Bekrić en 400 vallas, algo histórico para un país casi sin medallas en cualquier evento (por su juventud, obviamente).

La comodidad con la que ganó Storl se ve claramente en la diferencia sobre el 2º clasificado, 1,03m, la 2ª mayor de todos los tiempos solo por detrás del 1,58m que sacó Gunnar Huseby (ISL) a Angiolo Profeti (ITA) en Bruselas’1950.

Peso Femenino (Oro: Kleinert, Plata: Tarasova, Bronce: Rosa)

La regularidad (3 lanzamientos entre 19,15m y 19,18m) le dieron el título a Nadine Kleinert. Alemania no ganaba esta prueba desde que Astrid Kumbernuss (RDA) venciera en Split’1990. De esta manera Kleinert logra la 1ª medalla europea de su historia (y su primer título internacional), algo que ha llegado muy tarde visto su extraordinario palmarés en competiciones mundiales: 1 plata olímpica, 3 subcampeonatos mundiales (y 1 bronce) y 2 medallas más en el mundial indoor.

Con un 5º lanzamiento decisivo, que la colocó en el tercer lugar del podio, Chiara Rosa conservó ese puesto y consiguió la medalla de bronce. Es la 2ª medalla italiana en la historia de la prueba tras otro bronce logrado por Amelia Piccinini en Oslo’1946.

Las ausencias (de las bielorrusas, por ejemplo) y el dopaje de estado practicado durante la década de los 70 y 80 en los países del Este (URSS, RDA, CHE, BUL…) hace que las marcas del oro, plata y del bronce sean las más bajas de la historia para cada puesto de medalla desde que en Budapest’1966 se ganara con poco más de 17 metros.

Altura (Oro: Grabarz, Plata: Stanys, Bronce: Hanany)

El inglés Robbie Grabarz, con un único nulo en 2,31m hasta que no pudo franquear ni a la tercera el 2,33m, se convirtió en el 2º británico de la historia campeón europeo de altura. 62 años antes, en Bruselas’1950, Alan Paterson también fue oro.

El atletismo masculino lituano solo había logrado medallas europeas con el discóbolo Virgilijus Alekna (1 oro, 1 plata y 1 bronce). La brillante plata de Raivydas Stanys, que mejoró en 3 centímetros su marca personal y luchó hasta el último momento por el título, rellena esta laguna.

Francia también llevaba 46 años sin conseguir medalla (desde el doblete en Budapest’1966 de Madubost, oro, y Sainte Rose, plata) y ha sido Mickaël Hanany quien ha acabado con la mala racha.

Jabalina Femenina (Oro: Rebryk, Plata: Obergföll, Bronce: Stahl)

Ucrania, que nunca había logrado una medalla en esta prueba, se ha estrenado a lo grande con el título de Vira Rebryk cimentado en un fabuloso 5º intento donde batió el record nacional con 66,86m y dejó sin respuesta a las alemanas Obergföll y Stahl.

Las germanas coparon el segundo y el tercer lugar del podio en un peculiar “doblete” que no se producía desde Split’1990 cuando las atletas de la RDA Forkel y Felke fueron plata y bronce tras no poder derrotar a la finlandesa Arafanti.

Christina Obergföll repitió su medalla de plata de Barcelona’2010. Hasta el momento, solo había una mujer con 2 subcampeonatos consecutivos: Karen Forkel (en 1990 con la RDA y en 1994 con Alemania).

400 Lisos (Oro: Maslák, Plata: Deák-Nagy, Bronce: Fonsat)

En una prueba con muchísimas ausencias, Pavel Maslák se ganó un recuerdo eterno. Es la primera persona que, representando a la República Checa, gana un oro europeo en una carrera. Centrándose únicamente en el 400, Pavel Maslák es el 2º medallista checo en la historia de la prueba, tras la plata lograda por Karel Kolář en Praga’1978, cuando representaba a Checoslovaquia.

Aún más tiempo había pasado de la última (y única presea) obtenida por Hungría. La plata de Marcell Deák-Nagy le permitió suceder a su compatriota Zoltán Adamik (bronce en Berna’1954) 58 años después.

La marca de cada uno de los ocupantes del podio fue la peor para su puesto concreto desde que en la edición de 1978 se corriera en torno a 46 segundos (hoy lo hicieron alrededor de 45’’50).

400 Lisos Femenino (Oro: Hjelmer, Plata: Zadorina, Bronce: Usovich)

La ausencia de la práctica totalidad de las rusas que encabezan el ránking mundial del año lo aprovechó la desconocida Moa Hjelmer para vencer la carrera con 51’’13, nuevo record nacional de Suecia pero que es la peor marca de una ganadora desde que Helga Seidler (RDA) ganara en Helsinki’1971 con 52’’14.

Con el subcampeonato de Ksenia Zarodina, el 400 lisos es la única prueba donde Rusia ha estado en el podio en las 6 ediciones en las que ha participado desde su independencia en 1991.

* David Fernández es estadístico. En Twitter: @EldrickISB

– Foto: AFP – Markku Ulander (Lehtikuva)