"El éxito se mide por el número de ojos que brillan a tu alrededor". Benjamin Zander
Paris Saint-Germain / Fútbol / Francia
Hace unos días, el PSG empató a uno contra el Monaco en el partido estrella de la Ligue 1. Han pasado ya casi dos meses desde el primer partido de los parisinos esta temporada. Entonces se vio un equipo con bastantes carencias. Por supuesto, no se notaba cómo quería jugar el nuevo entrenador, ya que era demasiado pronto.
Seis partidos después, veamos como jugó el club de la capital para intentar destapar por dónde quiere ir Laurent Blanc.
Blanc empezó la temporada con un 4-4-2. Motta y Matuidi formaban el doble pivote y Pastore y Moura eran los teóricos exteriores.
Luego, Blanc cambió al 4-3-3 y dio entrada a Cavani en el ataque y puso a Verratti en el centro del campo.
El uruguayo alterna las bandas según los partidos, dependiendo si juega Lavezzi, que solo lo hace en el ala izquierda.
Es el cambio más significativo en la evolución del juego.
La posición de los interiores en esta foto es muy relevante. Moura y Pastore se situaban en el carril central. Bajaban al apoyo de los centrales o mediocentros. Si tenían espacio para girar, seguían en conducción para invadir el campo contrario; si no podían darse la vuelta, devolvían de primeras al defensa.
a) Se buscan los laterales. A la izquierda, Thiago Silva lanza a Maxwell al espacio aprovechando que Lavezzi le deja la banda al internarse. También se busca la combinación interior Matuidi-Moura para lanzar al brasileño. Verratti suele buscar directamente a Van der Wiel, muy profundo en la derecha.
PSG busca los laterales por busi1325
b) Además, se busca a Ibrahimovic con balón largo para que baje la pelota y empiece a construir. Le ayudan los dos extremos acercándose a él.
Ibra sirve de eje giratorio, instalándose entre líneas. Ese movimiento complementa el de Cavani, que se coloca de ‘9’. Los defensas no pueden salir a por el sueco ya que el uruguayo amenaza el espacio.
El PSG también consigue dar a Ibra espacio horizontal. Lavezzi queda fijado en la banda y, del otro lado, Van der Wiel desarrolla este mismo papel. Destaquemos el carácter ofensivo del neerlandés, que le ha quitado el puesto a Jallet por encajar mejor en el nuevo modelo de Blanc.
Con estas medidas se queda el mejor jugador de la Ligue 1 libre para recibir y decidir, con lo que eso supone. Cuando Ibra recibe, atrae a los defensas y descarga a una banda, normalmente a Maxwell. Antes la directriz era juntarse con Pastore e intentar combinar por dentro. Nada de buscar las alas.
Empecemos este apartado hablando de atacar, ya que de ello depende la transición defensiva.
Pero no siempre cierra el mismo tercer hombre. Ese cambio de jugador requiere mucha concentración por parte de todos y puede ser una fuente de errores.
PSG presiona la salida por busi1325
Permite esta organización paliar los problemas defensivos que padecía el club de la capital al principio de la temporada, cuando el doble pivote y la poca ayuda de los extremos le hacía muy vulnerable.
Blanc está empezando a cambiar el PSG. Se nota el trabajo que está haciendo, con unas mejoras notables en el juego. Ha cambiado el permanente intento de entrar por el centro, con el consecuente atasco, para buscar ampliar el juego por las bandas. Para eso no ha dudado en cambiar el sistema y escoger los jugadores más adecuados.
Está cogiendo forma el proyecto. Todavía hay mucho por hacer, pero ahora ya se nota que Laurent Blanc es el entrenador del Paris Saint-Germain.
* Julien Pérez.
– Foto: AP
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