La descapitalización de La Masia

por MARTI PERARNAU el 25 diciembre, 2014 • 15:18

Un 0-7 en contra no puede ser la vara de medir si nos referimos a fútbol formativo. Incluso si dicha formación ya está inserta por completo en el mundo profesional, como es el caso del Barça B. La pantagruélica derrota frente al Valladolid suena fea, pero no sirve para medir si el rumbo emprendido es bueno o malo. La vara de medir es mucho más sutil e intangible: es la percepción de si los jugadores jóvenes progresan y mejoran a medida que van ascendiendo de equipo dentro de Can Barça. Sería mucho más sencillo juzgar mediante los resultados, pero no es así. Los equipos pueden ganarlo todo de manera permanente y, sin embargo, el proceso formativo puede estar siendo deficiente. O al revés.

Mis percepciones personales -y, por lo tanto, sujetas a error- me indican que el trabajo futbolístico de La Masia se ha ido alejando de la excelencia desde 2010 por una razón principal: la descapitalización en materia de maestros. La llegada de Sandro Rosell a la presidencia del Barça -que el tiempo pondrá en evidencia como si se hubiera tratado de Atila- arrasó a un Alexanko que se había caracterizado por poseer e implantar unos valores irrenunciables y sólidos; prescindió de alguien culto y sabio como Capellas; apartó y humilló a Benaiges, que era el hilo conductor de toda la formación; vetó, mortificó y aburrió a Óscar García Junyent… La lista de maestros, formadores y entrenadores ninguneados empieza a ser larguísima, cerrada hace poco con Albert Puig y Guillermo Amor y finalmente con Quique Costas, quizás el técnico que mejor “olía” la progresión de un jugador. La descapitalización ha sido escalofriante (aunque sigue habiendo magníficos técnicos).

La cuestión no es perder un partido o un trofeo, sino ¿cuántos jugadores de La Masia han progresado verdaderamente en su formación desde 2010? ¿Cómo se ha gestionado el inmenso talento de las generaciones del 91-92 o 95…? ¿No será el “desplegable” otra cortina de humo? Las respuestas pueden ser mucho más sangrantes que un 0-7.