Julio César Soares Espíndola está viviendo una segunda juventud. Aquel fallo en la salida ante Holanda en los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica, que terminó con el gol en propia puerta de Felipe Melo, parecía el punto de inflexión de una carrera que comenzaba su cuesta abajo. Su salida del Inter el pasado verano tras siete temporadas en Milán le hizo desaparecer de la primera escena del fútbol mundial. Llegó al QPR y el comienzo de temporada ha sido complicado.
El QPR es colista pero en las últimas jornadas está reaccionando con Harry Redknapp en el banquillo y un Julio César en todo su esplendor. Parece recuperado para el primer nivel, vuelve a demostrar reflejos y siempre ha tenido mucha personalidad en la portería.
Luiz Felipe Scolari le ha recuperado en su primera convocatoria con la canarinha. Julio César no acudía a la selección desde el 28/02/2012, ante Bosnia-Herzegovina.
En su mejor condición es un portero muy atlético con una potencia enorme en su tren inferior que le permite lanzarse hacia los costados cubriendo mucha portería. Bajo palos es un guardameta muy difícil de batir, su piernas son muy potentes y su altura y envergadura hacen el resto. Tiene tendencia a coger peso y en determinadas fases de su carrera eso ha sido un problema. Tiene muchos reflejos y potencia en el despeje por abajo, hacia los lados y por arriba.
Es zurdo y táctcamente puede ser un recurso para salir en largo desde la portería o con alguna diagonal. Ha jugado indistintamente a los largo de su carrera con defensas de cuatro hombres en línea o con tres centrales y dos carrileros. No es especialmente hábil para jugar en corto pero sí tiene una pegada potente.
Sus reflejos le permiten responder bien a los balones que botan antes de llegar a su portería. Julio César ha dejado a lo largo de su carrera paradas impresionantes a disparos desde fuera del área que botan antes de llegar a sus dominios. Es habitual verle parar con las piernas. Sus reflejos y potencia en el tren inferior le permiten estirar las piernas con agilidad y mucha rapidez para el despeje. En los lanzamientos de penalti aguanta mucho y durante muchos años ha tenido un gran porcentaje de acierto deteniendo penas máximas. Quizá su punto más débil son las salidas en el juego aéreo, donde a veces mide mal. En las salidas por abajo es valiente y rápido.
* Alberto López Frau es periodista.
– Foto: Glyn Kirk (AFP)
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