Es la maldita pregunta que en los últimos años no deja de repetirse en el fútbol español. La que hace que piten los oídos tras haberla oído tantas veces. A la que se recurre a la más mínima derrota, olvidando que la derrota es tan natural como el juego y que en la misma pueden influir infinidad de factores. Pues bien, con la venta de Higuaín, esta pregunta también se la hacen los aficionados del Real Madrid.
Por supuesto, desde una perspectiva diferente. Ancelotti no va a jugar con falso 9 o, al menos, no con alguien que la gente califique como tal, pese a que Benzema se ha comportado con igual o mayor frecuencia en esa posición que otros de quienes se predica este papel. Más allá de eso, hay dos preguntas: ¿basta con Benzema, Morata y Jesé para un único puesto? ¿Puede ser algún otro jugador de la plantilla incluido en dicha terna?
Sí, por supuesto: Cristiano Ronaldo. Sus condiciones le permitirían ser, casi sin ningún tipo de duda, el mejor delantero centro del mundo –lo que no necesariamente equivaldría a ser mejor jugador ni más decisivo–. La cuestión es que él no quiere. Se lo dijo a Queiroz en pleno partido del mundial de Sudáfrica contra España cuando reemplazó a Hugo Almeida por Danny, lo reiteró públicamente alguna vez que Mourinho lo alineó en esta posición y lo confirmó siempre que le preguntaron.
Si uno de los dos mejores jugadores del mundo no quiere jugar en una determinada posición, no se le alinea en la misma. No hay más vuelta de tuerca, o al menos no para ningún técnico inteligente. Técnico, en este caso, del que sabemos que no fue capaz de convencer a Pato de realizar el proceso inverso, lo que sí que logró un año más tarde Leonardo. Y no es que Pato sea Cristiano, precisamente.
Sin embargo, podría existir una vía intermedia que, tal vez, Cristiano sí aceptase. Jugar al lado de otro delantero que no fuera necesariamente un punta central. Que ambos gozaran de mucha movilidad, gracias a la cual y a la presencia del otro no fueran fácilmente marcables para los centrales adversarios –lo que Ronaldo busca evitar a toda costa–. Más allá de los tres candidatos a esa posición, no hay ningún otro jugador de la plantilla capaz de realizar esta función. Realmente, esta opción sólo cobraría sentido si el supuestamente deseado Bale fichase. Es más, es la única manera en la que encontraría sentido la contratación del galés, pero ese es otro tema que preferimos aparcar mientras no sea un hecho.
Así pues, volvamos a la primera cuestión, a la que da nombre a este artículo. Con Benzema, Morata y Jesé para un puesto, ¿necesita el Madrid un nueve? Sobre los dos últimos ya expusimos nuestras impresiones, por lo que cabe detenerse en el francés. Potencialmente, podría ser uno de los mejores jugadores del mundo. Sin embargo, a lo largo de cuatro años no ha mostrado ese nivel ni siquiera durante la tercera parte del tiempo, habiendo tenido además momentos de inanidad absoluta.
Y eso que es perfecto para complementar a Cristiano Ronaldo y para servir de nexo con los centrocampistas, lo que se antoja clave en el modelo que parece querer implantar Ancelotti. Incluso Mourinho supo hacer de él un delantero capaz de incomodar a la defensa rival en la salida del balón.
Sin embargo, si juzgamos sólo por el pasado, las posibilidades de que Benzema rinda de manera continuada al nivel de un titular indiscutible –rol que se le otorgaría– no sobrepasarían un 35 %. Aunque, claro, el italiano es quien está dentro y mejor conoce su situación. Quien puede considerar que, en un modelo más asociativo y pausado, el mayor número de veces que contacte con el balón podría incidir en una mayor activación y, por ende, rendimiento.
El imposible de convencer a Cristiano para ser nueve, jugárselo todo a Benzema, precipitar la importancia de uno o dos canteranos tan prometedores como inexpertos, fichar a Bale y convertirle en pareja atacante de Cristiano o quién sabe qué. O simplemente fichar a un nueve. Este es el aspecto menos claro del nuevo Real Madrid y la manera en la que se decida será clave en el devenir del equipo.
* Rafael León Alemany.
– Foto: GYI
©2024 Blog fútbol. Blog deporte | Análisis deportivo. Análisis fútbol
Aviso legal