"Cada acto de aprendizaje consciente requiere la voluntad de sufrir una lesión en la propia autoestima". Thomas Szasz
En esta primera entrega de informes sobre las relaciones entre el deporte y el cine vamos a hablarles de cómo ha tratado el séptimo arte al golf, analizando los diferentes enfoques realizados, para finalizar con una lista de nueve hoyos que corresponden a las nueve mejores películas que según nuestro criterio se han hecho sobre golf.
El golf es un deporte muy cinematográfico. Los magníficos exteriores y localizaciones que proporcionan sus campos, los duelos por parejas, tríos o cuartetos, además del indudable dramatismo de los finales ajustados, son un excelente caldo de cultivo para realizar guiones y películas basadas en el deporte del golf.
Por estas razones el golf ha sido objeto de mas de 50 películas en su argumento central, de las cuales la mayoría de ellas han caído en un olvido más que justificado, pero unas cuantas merecen ser destacadas por diversas razones que pueden trascender mas allá del propio ámbito de los aficionados al golf.
En general, las películas sobre golf se pueden agrupar en tres clases: los biopics de algún golfista o suceso famoso; las comedias que tienen como escenario un campo de golf, y las películas de ficción basadas en historias humanas de golfistas profesionales con problemas.
El público principal al que van dirigidas estas películas es la ingente cantidad de golfistas aficionados, sobre todo en Estados Unidos, que quieren disfrutar en las multisalas de su pasatiempo preferido, sin importarles demasiado los méritos cinematográficos. Y, por el contrario, los críticos cinematográficos suelen vituperar este tipo de películas, porque ven demasiado golf en ellas y lo encuentran aburrido y fuera de la trama.
Un hecho curioso y destacable es la ausencia casi total del golf femenino en el cine con apenas dos excepciones. Una de ellas es el biopic de Mildred Babe Didrikson, una de las atletas mas versátiles de la historia, que compitió en varios deportes. Pero la película basada en ella no está en la lista porque no hemos podido verla.
En el plano nacional, ausencia completa del golf en las pantallas tanto a nivel de películas como de golfistas, cuando tenemos argumentos de sobra para utilizar de base, como una película basada en la biografía de Seve Ballesteros o en la épica remontada de la Ryder Cup de 2012 con José Maria Olazábal de capitán. Si hubiera sido americano el capitán, les podemos asegurar que ya la estarían produciendo.
A continuación les ofrecemos nuestra selección con la intención de satisfacer igual al seguidor del golf y al amante del cine en general, como siempre en orden ascendente según nuestro criterio subjetivo y personal. Si no está alguna película de su preferencia les pedimos disculpas por anticipado, pero teníamos que hacer una selección para no extender en demasía el artículo.
La historia de un chico de 12 años (Mason Gamble) con grandes aptitudes para el golf al que le es asignado como mentor un golfista fracasado (Gary Sinise).
Argumento tópico sobre el paso de la infancia a la madurez centrado en este caso en el mundo del golf, que es utilizado como el instrumento para traspasar una serie de valores del deporte y de la vida por parte del mentor fracasado en su vida profesional a un joven esperanzado e ilusionado con el que intenta evitar que cometa los mismos errores que él, aprendiendo ambos muchas cosas de su semejante.
Contiene muchas escenas de golf, en especial de aprendizaje del aspirante, pero con un argumento bastante previsible en una película que no se ha estrenado en nuestro país, a pesar de sus buenos actores.
Recomendable para los amantes de las películas tipo Karate Kid.
La biografía del mítico Bobby Jones, uno de los golfistas más influyentes de la historia.
La película recrea la historia del legendario Bobby Jones (Jim Caviezel) desde su adolescencia, cuando empezó a dominar el deporte del golf, su fulgurante carrera como amateur ganando el primer Grand Slam de la historia en 1930 y su posterior retirada a los 28 años. Es una biografía amable y laudatoria de las cualidades humanas de Bobby Jones, centrándose lógicamente en sus logros golfísticos y en sus arrebatos de mal genio cuando las cosas no le salían bien.
Deportivamente, el filme muestra muchas de las gestas de Jones, pero lógicamente Jim Caviezel no tiene ni de lejos el mismo swing y el espectador experto lo nota enseguida, lo que le hace perder cierta credibilidad a ojos de los puristas. La película fue un verdadero fracaso en taquilla, pero personalmente la encontramos entretenida e ilustrativa a cerca de una carrera legendaria pero desconocida para muchos de nosotros. Por ello, no puede faltar en una selección de películas de golf.
Recomendable para mitómanos.
La historia de la carrera de un profesional de segunda fila en su afán por llegar a competir en la PGA (circuito profesional americano).
Esta película de la cadena HBO es la que mejor describe las penurias de los trotamundos del golf que van deambulando por torneos de segunda fila intentando progresar en su juego y vivir del escaso dinero que se reparte en circuitos tipo Hooters. Es un relato crudo y realista de las penurias económicas que pasan los profesionales que se resisten a dejar su pasión, pero que no alcanzan apenas a cubrir gastos con sus premios. Randy Quaid hace una magnifica interpretación de Kenny Lee, un golfista que intenta remontar su vida personal y profesional.
Las escenas de golf son excelentes, Randy Quaid juega bastante bien y la película merece ser mencionada por describirnos un mundo alejado de la fama y los focos de los grandes torneos. Por desgracia no se ha estrenado en España y sólo está disponible en circuitos de descarga americanos y en inglés. El filme cuenta con la presencia de profesionales como Mac O’Grady o Peter Jacobsen, interpretándose a ellos mismos.
Recomendable para las personas que quieran conocer la cara amarga del golf profesional.
Un mediocre jugador de hockey hielo (Adam Sandler) se convierte de la noche a la mañana en la nueva sensación del golf gracias a su capacidad para realizar drives descomunales de salida con un swing muy heterodoxo.
Comedia desmadrada, con una traducción del título al castellano realmente delirante, basada en la capacidad para dinamitar muchas de las convenciones sociales del golf por parte de un gañán del hockey que utiliza un estilo basado en el slapshot para enviar la bola mas allá de las 400 yardas con una cierta regularidad. Para acabar de arreglar las cosas, su comportamiento en el campo deja mucho que desear, rompiendo continuamente todas las normas de la etiqueta golfística ante el desespero de golfistas y árbitros y el regocijo del público, al que le encanta ver su show.
Sin lugar a dudas, es la película mas irreverente de toda la lista, con unos golpes imposibles más propios de dibujos animados, pero la desdramatización del deporte es un punto favorable, además de ser una de las películas de golf de más éxito de la historia, ayudada por la popularidad y vis cómica de su actor principal. Destaca un cameo de Lee Treviño.
Recomendable para los golfistas obsesionados con su drive y degustadores de comedias de sal gorda.
Comedia romántica que describe las andanzas de una atleta que practica varios deportes, entre ellos el golf, y un representante de deportistas.
Hemos considerado oportuno incluir este título en el ranking debido a la confluencia de tres mitos de la historia del séptimo arte: los actores Spencer Tracy y Katharine Hepburn, algo más que amigos en la ficción y la realidad, y el director George Cukor. Conviene aclarar que el golf apenas ocupa la mitad de la película, ya que el personaje de Patricia Pemberton también destaca en el tenis, pero el arranque de la historia es un tanto original y produce curiosidad ver a Hepburn realizar diversos drives consecutivos en el campo de prácticas (por cierto, tiene un estilo más que aceptable).
Las jugadoras profesionales Betty Hicks, Beverly Hanson y Helen Dettweiler intervienen en el filme al igual que Mildred Babe Didrikson, seguramente la atleta más polivalente de todos los tiempos. Eso ya es todo un caramelo para los que disfrutan sobremanera conociendo a las pioneras, cuyo mérito es indiscutible.
Si nos permiten un consejo, traten de resetear su cerebro y no comparen las escenas de golf con las películas más modernas, ya que la tecnología actual permite jugar con el virtuosismo y el paso del tiempo tiende a perjudicar las escenas deportivas de la película que nos ocupa. En este caso, nuestra atención se ha centrado en saborear una joya arqueológica y no hemos podido evitar la emoción con algunas perlas del guión: “¿Cuál es su hándicap?” “Mi novio”.
Los seguidores del cine clásico no se la pueden perder.
Un excombatiente de la Primera Guerra Mundial, antigua leyenda del golf, es invitado a participar en un torneo de exhibición junto a otros dos jugadores de categoría. Para hacer frente a su falta de práctica y a las adversidades propias de la competición, contrata los servicios de un caddie muy especial que se convertirá en una pieza clave en su rendimiento.
Robert Redford hizo las labores de dirección en esta película un tanto fantasiosa que contó con la presencia de Matt Damon, Charlize Theron y Will Smith (más un cameo muy especial de Jack Lemmon). Uno de sus mayores méritos estriba en desnudar el alma del jugador, que debe afrontar la dificultad siempre en soledad. De ahí la importancia del personaje de Will Smith, una especie de ángel de la guarda con un carisma especial y un magnetismo arrollador. Suyas son las mejores frases del guión, que utiliza el golf como una metáfora de la vida.
Destacar la lograda ambientación y el diseño del vestuario de la época, junto a los personajes históricos de Bobby Jones y Walter Hagen. La leyenda de Bagger Vance es hábil en mostrar la belleza de los campos, hoyos, bunkers y greens pero sobre todo eleva el golf a los altares como herramienta para recuperar el lugar perdido en la vida.
Recomendable para los soñadores.
Un club de campo elitista es el escenario de una serie de aventuras y desventuras de los jugadores y empleados del mismo en clave cómica.
Esta comedia hilarante siempre es la ganadora entre las películas favoritas de los profesionales de la PGA y ha alcanzado un nivel de culto entre los amantes del golf. La presencia de cómicos muy famosos en los Estados Unidos como Chevy Chase, Bill Murray y Rodney Dangerfield le dio un gran éxito que aún perdura en nuestros días.
El argumento de la película es una catarata de gags que se suceden en varios hilos paralelos. El caddie que quiere ganar un torneo, el profesional del club que es un ligón empedernido, un juez que hace sus tejemanejes políticos en el campo y el mejor de todos: el jardinero que está a punto de iniciar la Tercera Guerra Mundial por culpa de una ardilla de tierra. Todos confluyen en un gran final como mandan los cánones.
Como en toda comedia hay gags más afortunados que otros, pero en este caso algunos son realmente brillantes y muy divertidos, en especial cuando interviene Bill Murray como el jardinero.
Recomendable para todos los públicos deseosos de pasar un buen rato riéndose a mandíbula batiente.
Un jugador retirado que sobrevive como puede rayando la indigencia vuelve al ruedo tras recibir dos proposiciones. Una mujer le requiere como profesor particular, mientras que el marido de ésta y antiguo rival le necesita como caddie.
Tin Cup es, seguramente, la película más célebre de la lista. La que permanece en el imaginario colectivo de los aficionados como una de las que más contribuyó a popularizar el golf. Lo cierto es que coquetea en algunos momentos con situaciones absurdas y su acercamiento al mundo del golf puede llegar a ser superficial para los más puristas, pero es una película agradable, genuinamente americana y con un final sorprendente que nos llevará a la reflexión.
Kevin Costner (un actor con varios papeles deportivos en su carrera), Rene Russo y Don Johnson lideran el trío interpretativo a las órdenes de Ron Shelton, autor de otro título deportivo famoso como Los blancos no la saben meter. Las clases particulares del arranque permiten divagar sobre algunos aspectos serios del golf, al mismo tiempo que la figura del caddie y un par de apuestas suponen el contrapunto perfecto para esbozar la sonrisa.
Profesionales de reputación como Fred Couples, Phil Mickelson y Gary McCord, cuya experiencia personal en un torneo inspiró la película, aparecen como estrellas invitadas de la misma. Tin Cup intenta construir una historia de superación personal, pero se abraza demasiado a los tópicos. Con todo, permanece en un rincón selecto de la memoria de muchos seguidores, que le perdonan la mayoría de sus errores. Se deja ver con gusto.
Muy recomendable para los que quieran pasar un buen rato con el golf y la comedia romántica.
Cuenta la historia de Francis Ouimet, un jugador amateur que entró en los anales de la historia tras convertirse en el primer jugador amateur en ganar el US Open.
La película que cierra el ranking es de una notable calidad y realiza, además, un solemne tratamiento del golf. Es verdad que el argumento conlleva la trampa de caer en el melodrama, y más estando la firma Disney por detrás, pero incluso los neófitos se emocionarán sin enfadarse. Por otra parte, la ambientación es magnífica, los planos detalle absolutamente fascinantes y la fotografía, soberbia. Francamente, el jugo visual que tiene el golf está exprimido hasta la última gota.
Otro aspecto a agradecer es la técnica de los actores a la hora de golpear la bola, quizá el tema más sensible a la polémica. En este sentido se notan las horas de entrenamiento y el énfasis que han puesto para dotar de seriedad a la obra. Además, Juego de honor cuenta con dos atractivos más: la entrañable interpretación del caddie de Ouimet y el papel de Harry Vardon, mito imprescindible en la historia del golf.
Desde nuestro punto de vista, es el título ideal para satisfacer a los aficionados y también para seducir a los no practicantes. Navega con destreza entre esas dos aguas y el pulso entre el protagonista (gran interpretación de Shia LaBaeouf) y su ídolo se explota con acierto. Es, en definitiva, la película que ha utilizado el bisturí más afilado.
Imprescindible para los amantes del golf y el cine.
Las cinco últimas películas merecen el esfuerzo del visionado, incluso hasta por parte de los más exigentes. Son las que mejor han sabido explotar el recurso de la emoción y el último segundo, además de contar con la colaboración de mitos de este deporte. Para la mayoría de los mortales, alcanzar la perfección lleva consigo toda una vida de sacrificios, de manera que lanzamos a los cuatro vientos la propuesta para que algún enamorado del golf supere el listón y salga a la luz la película redonda que aún no se ha creado. ¿Alguien se atreve con un hoyo en uno?
– Primer capítulo: Deporte y series de televisión
* Mikel Madinabeitia (periodista) y Lorenzo Mejino (experto en comunicación).
Seguir a @lmejino
©2024 Blog fútbol. Blog deporte | Análisis deportivo. Análisis fútbol
Aviso legal