"La audacia tiene genio, poder y magia. Comienza ahora, ponte en marcha”. Johann W. Von Goethe
Son tiempos de cambio en Goodison Park. El relevo en el banquillo (Roberto Martínez ha sustituido a David Moyes) va más allá de un simple cambio de nombres. Si Moyes priorizaba la organización defensiva y la velocidad en la transición defensa-ataque, Roberto Martínez busca un ataque más organizado y posicional. La transformación se está llevando a cabo paulatinamente, el equipo aún está adquiriendo los conceptos ofensivos y esa búsqueda de la calma, pero el Everton ha competido en todos los partidos oficiales disputados. Y aún no ha perdido.
En el apartado de fichajes ha llegado Antolín Alcaraz, que parece que ocupará el lugar de primer central suplente. El paraguayo jugaba en el Wigan con Roberto Martínez y es de su total confianza. Tiene 31 años y aportará rendimiento cuando el técnico lo requiera porque, hasta el momento, la pareja de centrales Jagielka-Distin parece intocable.
Arouna Koné aportará intensidad en la presión, juego de espaldas y velocidad en los desmarques de ruptura. Martínez lo estaba utilizando como relevo de Jelavic, aunque la llegada de Lukaku nos hace dudar sobre qué rol ocupará el costamarfileño.
Joel Robles es, de momento, el portero suplente. Llegó al Wigan en el segundo tramo de la temporada pasada y, aunque no consiguió que el equipo se mantuviera en la Premier League, tuvo actuaciones de nivel y fue capital para ganar la FA Cup, algo histórico para el club. Tiene nivel para competir con Howard por el puesto.
James Mcarthy ha llegado también procedente del Wigan, donde tenía labores en la construcción del juego. Tiene solo 22 años y Roberto Martínez siempre se ha deshecho en elogios hacia él. Debe ser importante para el futuro cercano del club. El escocés llegó poco antes del cierre de mercado. Lo mismo sucedió con Gareth Barry, procedente del Manchester City. El internacional inglés aportará madurez al centro del campo de los toffees. Fue titular en el último partido del Everton, pese a ser un recién llegado, y se convirtió en el mediocentro posicional del equipo, dejando a Osman un poco más de libertad. Salvó el que podía haber sido el 0-1 (Eto’o chutó a puerta vacía tras fallo de Howard, pero Barry apareció cuando nadie lo esperaba y envió el balón a córner). Martínez se mostró eufórico con el partido de todo su equipo y resaltó el papel de Barry: “Ha dado una master-class. Es un auténtico profesional y una gran influencia para Barkley y McCarthy y el compañero perfecto para Leon Osman”.
Romelu Lukaku ha llegado cedido por el Chelsea. Es un proyecto de delantero de alcance mundial. El año pasado hizo una gran temporada en el West Bromwich Albion (17 goles) y aportará en aspectos que quizá el Everton domina menos: juego de espaldas para que salga el equipo, dominio del área y gol, que es de lo que ha carecido en los primeros partidos de la temporada.
Hemos dejado para el final al jugador que más conocemos. Gerard Deulofeu es, quizá, el ejemplo perfecto de cómo construir una estrella paso a paso. Destacó en las categorías inferiores del Barça desde el inicio y poco a poco se ha tratado de pulir algunos defectos que tiene: mayor intensidad defensiva, levantar la cabeza, una actitud positiva con respecto a sus compañeros y la toma de decisiones: el de Riudarenes tiene que ser consciente de que sus jugadas deben ser provechosas para el equipo, saber cuándo arrancar y cuándo parar, cuándo encarar al defensa y cuándo buscar la combinación con el compañero. Óscar García Junyent fue un entrenador clave en su formación. Para su evolución se ha confiado en un entorno como el del Everton y un entrenador que lo conoce bien y lo cuidará. Tuvo una actuación destacadísima en el único partido en el que ha sido titular (frente al Stevenage en la Capital One Cup, marcando el primer gol) y su presencia es sinónimo de peligro para el rival. Bob Martínez, que está tratando el proceso del jugador catalán paulatinamente, declaró que se está adaptando mejor de lo que esperaba y que pronto será importante.
En el capítulo de bajas, destaca la venta de Anicheve al West Bromwich Albion y, sobre todo, la de Fellaini al Manchester United el último día de mercado (por casi 33 millones de euros). El centrocampista belga había sido el jugador más destacado del Everton las últimas temporadas. Tiene un perfil más de llegador que de creador, aunque Martínez lo situaba en la base de la jugada, tratando de adaptar a la estrella a un rol que encaja más con el nuevo estilo de juego toffee. En Liverpool sabían que la salida del belga era más que posible. Leighton Baines también estuvo cerca de marcharse al United, pero finalmente continuará siendo el dueño del lateral izquierdo.
A continuación podemos ver cuál es la rotación que dispone Martínez. A la izquierda, el jugador que, a la larga, acabará siendo titular. En la línea de tres (o incluso en el doble pivote) las posiciones son relativas, ya que hay varios jugadores (Naismith, Deulofeu y Mirallas) que pueden partir desde ambas bandas, y McCarthy podría adelantar su posición.
El joven centrocampista de 19 años Ross Barkley es una de las mayores esperanzas para el futuro del fútbol inglés. Se ha asentado ya como titular en la mediapunta del Everton y Roberto Martínez quiere convertirlo en la piedra angular de su proyecto. Barkley es muy técnico, trata de recibir entre líneas y se asocia con facilidad. Tiende a caer a la banda izquierda, donde se junta con Baines. Si a la química de estos dos jugadores se añade la de Gerard Deulofeu, el Everton estará más cerca de sus objetivos. Además, en Goodison Park disfrutarán viendo jugar a su equipo.
La era Roberto Martínez en el Everton está en marcha.
* Ismael Ledesma.
– Fotos: PA – Reuters
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