Ernesto Lazzatti: la manija del mediocampo xeneize

por el 10 diciembre, 2013 • 12:28

Uno de los mejores ‘5’ no solo de Boca Juniors sino de la historia del fútbol argentino. Formó parte de algunas de las mejores líneas de medios que ha habido en Boca, como la integrada junto con Enrique Vernieres y Arico Suárez en los años treinta o la constituida con Carlos Sosa y Natalio Pescia en la década de los cuarenta. Además, durante toda su trayectoria se ganó la fama de caballero dentro del terreno de juego y fuera de él. Nacido el 5 de septiembre de 1915 en Ingeniero White (Argentina), se desempeñaba como mediocentro y era un organizador puro que dominaba el centro del campo a su antojo. Futbolista de gran inteligencia, muy elegante, jugando siempre con la cabeza levantada, tenía un magnífico desplazamiento de balón en corto y en largo, se colocaba de manera excepcional y remataba fantásticamente bien de cabeza. La hinchada de Boca le conoció con el apelativo de El pibe de oro.

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Comenzó a jugar en las filas de Comercial de Ingeniero White cuando tenía 9 años. Allí actuaba en la banda derecha, ya que el mediocentro era dueño de Santos Ursino, capitán del equipo y persona que le dio múltiples consejos en el inicio de su carrera. En diciembre de 1933 abandonó el conjunto comercialino con destino Boca para realizar una prueba, a raíz de una carta que había mandado su tío unos meses antes avisando de la calidad de su sobrino. Lo probaron en dos amistosos en los que gustó y le contrataron, haciendo su estreno oficial con los xeneizes en un partido de liga el 8 de abril de 1934 ante Chacarita, a quien vencieron por 3-2. Esa misma campaña Boca Juniors salió campeón tras aventajar a Independiente en un solo punto en la clasificación. Marcaron 101 goles, destacando el frente de ataque formado por Varallo, Benitez, Cáceres y Cherro. Al año siguiente, con la incorporación del defensa brasileño Domingos Da Guia y del argentino Víctor Valussi, el plantel se hizo mucho más compacto y se revalidó el título superando de nuevo a Independiente. La solidez defensiva era un hecho, y el portero Yustrich fue el menos goleado del campeonato. A partir de aquí empezó una sequía de títulos de cinco años en el club bostero; las actuaciones en la liga no eran las mejores y se firmaron varios terceros puestos, un quinto y un sexto. En 1940 regresaron los triunfos con la consecución del campeonato por delante de Independiente y además fue el año de inauguración de La Bombonera, en un partido frente a San Lorenzo de Almagro. También ese curso se conquistó la Copa Carlos Ibarguren tras derrotar por 5-1 a Rosario Central en la cancha de Chacarita Juniors.

En las temporadas de 1941 y 1942, Boca Juniors finalizó en cuarta y quinta posición en el torneo liguero y no fue hasta 1943 cuando Lazzatti amplió su palmarés con otro entorchado doméstico. En la portería ya se encontraba Claudio Vacca; para la defensa había llegado José Marante; escoltando a Lazzatti jugaban Carlos Sosa y el Leoncito Pescia; y arriba, Mario Boyé, Jaime Sarlanga o el uruguayo Varela perforaban las redes rivales. El título llegó en la última jornada al doblegar por 0-2 a Ferro y mantener la ventaja de un punto que tenía sobre el eterno rival, River Plate. En la temporada de 1944 se revalidó el título con dos puntos más que River Plate y se obtuvo otra Copa Carlos Ibarguren al ganar por 6-0 a la Federación Tucumana. Este fue el último campeonato liguero que logró Lazzatti. Solo en 1946 volvió a disfrutar de éxitos con la camiseta azul y oro al conseguir Boca Juniors la Copa Competencia Británica Jorge VI y la Copa Confraternidad Escobar. En la primera se deshicieron de River en semifinales por 2-0 y ganaron a San Lorenzo por 3-1 en la final, y en la segunda apabullaron por un global de 9-5 a Peñarol en los dos partidos decisivos. Se despidió de Boca en 1947, culminando una brillante trayectoria en la que disputó 351 partidos, marcó 6 goles y jamás fue expulsado. Fichó por Danubio por su amistad con el uruguayo Severino Varela, y en la escuadra de La Franja permaneció una temporada antes de colgar las botas en 1948 con casi 33 años.

Con la selección argentina fue internacional en cuatro ocasiones entre 1936 y 1937. Debutó el 9 de agosto de 1936 en un encuentro de la Copa Mignaburu que les enfrentó con Uruguay y cuyo marcador fue de 1-0 a favor de la albiceleste. Asistió a la Copa América de 1937 celebrada en casa tras ser convocado por el seleccionador Manuel Seoane. En el torneo continental disputó el partido completo frente a Uruguay de la cuarta jornada (derrota por 2-3) y el segundo tiempo del enfrentamiento contra Brasil de la quinta y última, en el que Argentina consiguió una victoria por la mínima. Al finalizar la liguilla empatados a puntos Argentina y Brasil, se hubo de celebrar un duelo de desempate el 1 de febrero de 1937 en el Gasómetro de Boedo de la ciudad de Buenos Aires. Lazzatti partió de titular junto a Antonio Sastre y Celestino Martínez en el medio, y dos goles de Vicente de la Mata en la prórroga dieron el triunfo a Argentina, que de esta forma levantó su quinta Copa América. No volvió a vestir más la zamarra del combinado nacional al no contar para los técnicos Ángel Fernández Roca y Guillermo Stábile.   

Boca Juniors (1935)

Boca Juniors (1935)

Se convirtió en entrenador al poco tiempo de regresar de Uruguay y tomó las riendas de Boca Juniors en 1950. El equipo se proclamó subcampeón de liga al quedar por detrás Racing Club, justo un año después de haber rozado el descenso de categoría. Dejó la entidad a final de temporada y dado los discretos resultados de años posteriores con Emilio Baldonedo, Pablo Amándola o el húngaro Gyorgy Oth en la parcela técnica, volvió a dirigir al equipo en 1954. Lo llevó a la conquista del campeonato diez años después del último trofeo del club, precisamente con él presente en el campo. En la plantilla figuraban entre otros Pepino Borello, Julio Musimessi, Juan Carlos Colman, Pancho Lombardo o el Gallego Mouriño, y con ellos se superó en cuatro puntos a Independiente. Humilde y quitándose cualquier mérito, se retiró de la dirección técnica con este título.

Trabajó como analista de la revista El Gráfico, el diario La Prensa y el programa de televisión Deporte con opinión que emitía Canal 7. Después dedicó a sus negocios en la ciudad de Temperley, donde tenía una agencia de coches.

Falleció a los 73 años de edad aquejado de alzheimer el 30 de diciembre de 1988. 

* Alberto Cosín.




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