1.- Los problemas estructurales de un equipo no tienen fácil solución durante el transcurso de una temporada. El Real Madrid sufre una barbaridad cuando tiene que replegar. Cuando pierde el balón lo hace con las líneas muy separadas. La mitad de jugadores suele quedarse en un lado del terreno de juego y la otra mitad, o menos, en el otro, de forma que si el rival es capaz de armar un contragolpe rápido y con criterio, es fácil que un contrario se quede mano a mano con Keylor Navas. La Roma tuvo hasta cuatro ocasiones claras para inaugurar el marcador. Pero a partir del 1-0, obra de Cristiano Ronaldo, el partido y la eliminatoria ya fueron diferentes. El Madrid está en cuartos de final con justicia, ha sido superior a la Roma, pero sigue teniendo carencias preocupantes.
2.- Zinedine Zidane armó de inicio un once con Casemiro como mediocentro posicional, Modric de interior derecho y Kroos de interior izquierdo. Arriba, James en la banda derecha, Bale en la izquierda y Cristiano Ronaldo en el centro. Spalletti dispuso un once muy ofensivo, con Keita y Pjanic al mando de las operaciones, Salah en la derecha, El Shaarawy en la izquierda y Perotti por detrás de Edin Dzeko. La baja de Rüdiger en el centro de la zaga la suplió Zukanovic, un lateral izquierdo que hoy actuó de central junto a Manolas. El partido ya desde el inicio dejó la sensación de que transcurría por el minuto setenta. Ambos equipos con las líneas muy separadas, muchos balones divididos y bastantes imprecisiones.
3.- Casemiro es un hombre muy importante para el Real Madrid, con sus virtudes y sus defectos. El brasileño perdió varios balones graves en mediocampo, pero él mismo se encargó de rectificar la posición y recuperar la pelota en más de una ocasión. Pese a los errores que comete, su repliegue es mucho más rápido que el de Toni Kroos cuando el Madrid pierde el balón. El equipo blanco sufre con los dos, porque el problema es estructural, pero con el brasileño tiene más posibilidades de abortar el contragolpe del rival que con el alemán. Además, en ataque permite que los interiores se descuelguen más. Modric lo aprovechó y lo hizo de maravilla hasta en tres ocasiones durante el primer acto.
4.- La Roma sabía que a la espalda de Marcelo podía encontrar petróleo. Salah interpretó muy bien esa situación. En la primera ocasión en la que se fue por la derecha sirvió un balón extraordinario a Dzeko. Keylor Navas agigantó su figura haciendo pequeña la portería con su salida y evitó el tanto del bosnio, que disparó fuera. En la segunda, fue Dzeko el que habilitó al propio Salah. De nuevo Keylor acertó en su salida y el egipcio disparó fuera por poco.
5.- El Madrid tenía a favor el resultado de la ida y parecía no impacientarse, pese a que la Roma estaba siendo más profunda y peligrosa. También llegaba a la portería de Szczesny, pero siempre a través de arranques individuales. Las incursiones de Marcelo, alguna buena conducción de Bale –jugando a favor de pierna en la izquierda–, los destellos de Modric y un Cristiano que hizo un muy buen partido. Le tocó jugar de nueve y supo bajar y asociarse entre líneas en el primer tramo de partido, cuando el Madrid más lo necesitaba.
6.- El inicio de la segunda parte fue muy preocupante para el Madrid. De nuevo Salah tuvo una ocasión muy clara por la banda derecha, tras un error de Sergio Ramos en el pase a la altura de mediocampo que volvió a pillar al equipo abierto y mal parado. De nuevo Keylor Navas acudió al rescate con una salida rápida. Reaccionó Zidane con la entrada del agitador oficial. Entró Lucas Vázquez en sustitución de Bale, James se fue a la banda izquierda y el Madrid pasó a ser un equipo mejor asentado en los costados, más ancho y equilibrado. En el primer balón que tocó, Lucas Vázquez encaró a Digne, se marchó por fuera y su centro lo embocó a la red Cristiano Ronaldo. El gol aclaraba el horizonte en el partido y certificaba el pase a cuartos de final.
7.- El partido iba y venía. Fue un duelo de áreas, y ahí el Madrid tenía las de ganar. Spalletti dio entrada a Vainqueur en el descanso y retiró a Pjanic. Músculo por talento. La Roma tenía más físico y menos capacidad para llevar el balón con calidad a los de arriba. El Madrid se puso el traje de contragolpe y fue generando ocasiones hasta el final del encuentro. En una de ellas, Cristiano esperó a James y le regaló un gol en bandeja de plata. James estuvo todo el partido incómodo, no tuvo importancia ni peso en el juego en ninguna de las dos bandas. Está sin chispa y se le nota.
8.- En el tramo final entró Jesé por Modric y el Madrid pasó a jugar un 4-4-2 con Casemiro y Kroos en mediocampo, Lucas y Jesé en los costados, con James y Cristiano arriba. Kovacic refrescó la zona media en los minutos finales entrando por Casemiro. La Roma ya no tenía ninguna opción tras encajar el 1-0. Entró Totti por El Shaarawy y el Bernabéu reconoció la carrera del ’10’ con una sonora ovación. El cambio de Maicon por Keita supuso que Florenzi pasase a jugar de interior, pero ya no había tiempo para que su equipo experimentase alguna mejoría.
y 9.- El Madrid está en los cuartos de final de la Copa de Europa. Tiene un mes para ajustar las piezas y darle forma a un plan que le permita afrontar con garantías la eliminatoria, independientemente del rival. Necesita ser un equipo más sólido; ahora mismo cada pérdida de balón supone un drama y así es difícil pensar en progresar en la competición. Es un mal endémico que nace de una plantilla plagada de mediapuntas y de años de un modelo de club que no favorece la estabilidad. Sí tiene jugadores a los que agarrarse que pueden mejorar los cimientos. Zidane está abriendo el abanico en los últimos partidos con una mayor participación de los Lucas Vázquez, Casemiro o Jesé. Cada uno puede mejorar una faceta del juego desde el inicio o saliendo desde el banquillo. La clave es el equilibrio, y el Real Madrid tiene menos de un mes para encontrarlo.
* Alberto López Frau es periodista.
©2024 Blog fútbol. Blog deporte | Análisis deportivo. Análisis fútbol
Aviso legal