Femenino / Eurocopa femenina 2013 / Fútbol
Nunca subestimes el poder de la historia que siempre aparece y te recuerda el porqué del pasado y lo que influye en el presente y futuro. Alemania ha vuelto a demostrar que su historia es tan fantástica que nadie puede destronarla.
Las excesivas bajas, las dudas de inicio de campeonato, las debilidades que iba dejando el equipo de Silvia Neid… Todo ello hacía intuir que la Eurocopa de Suecia iba a suponer el fin de una racha espectacular y asombrosa de la selección alemana. Pero la historia, eso que te explica el pasado y las consecuencias que deja para el presente y futuro, volvió a ser la mejor arma alemana en las tres batallas grandes y asestar los zarpazos definitivos que le hicieron ganar su octavo cetro europeo y sexto consecutivo.
Ni dos penaltis en contra doblegaron a una Alemania en la que Angerer en la portería y Mittag arriba fusilaron al sobresaliente cuadro noruego, que realizó un campeonato de Europa espectacular. Se quedó a las puertas de dar el último paso, pero convencido de su trabajo y orden defensivo llegó hasta la fina,l donde dio un paso al frente atrevido, contrario al fútbol que le llevó a la final, pero mostrando valentía y siendo ofensivo desde el primer minuto consciente de la oportunidad que tenía en la final. Con su capitana Stensland a la cabeza, las noruegas han realizado un enorme campeonato. Basando sus compromiso en un orden defensivo espléndido y machacando a los rivales cada vez que llegaban al ataque. Oficio y veteranía mezclados con calidad y juventud. Mezcla magnífica del conjunto nórdico con una Hjelmseth en portería, Gulbrandsen y Stensland en el centro del campo y Hansen y Hegerberg arriba. Puntales y columna vertebral de una Noruega extraordinaria que ha dejado un sabor de boca magnífico.
Con un notable alto y a las puertas de la final se quedó la anfitriona, Suecia. Alemania fue su verdugo en la semifinal de Gotemburgo. Fue el inicio de Pia Sundhage al frente de una selección que fue de menos a más en el torneo, superando el primer empate ante Dinamarca y comenzando con el arrollador rodillo capitaneado por Schelin y Seger hasta la batalla perdida contra Alemania. Hay aspectos que pulir en un combinado sueco con un fútbol directo y vertiginoso en los metros finales pero que sufre mucho cuando el rival es igual o más rápido en ataque. Futuro prometedor.
A pesar de la dura derrota ante Noruega, las jugadoras españolas han hecho una Eurocopa muy digna y prometedora para el futuro. Los problemas y la falta de recursos que sufre el fútbol femenino día a día en este país no han podido con el talento, la calidad y el trabajo diario del equipo español. Jugadoras que no son profesionales, sino que tienen que combinar estudios y trabajo con la práctica deportiva, han vuelto a ganarse un papel importante al reivindicar su esfuerzo diario y su lucha por llevar al fútbol femenino español donde se merece. De más a menos, logrando victorias heroicas ante Inglaterra y derrotas muy dignas ante Francia pasando por la dura derrota ante Noruega. Calidad, trabajo y superación de unas jugadoras a pesar de que la falta de gestión y dirección desde fuera. Mucho queda por seguir creciendo y más aún por corregir desde el banquillo y la alta dirección, donde es más importante estar solo 45 minutos en un partido y después irse a comer que asistir y quedarse los 120 minutos. Detalles que a más de uno le tendrían que hacer reflexionar.
Una de las decepciones del torneo, quizás la mayor, ha sido Francia, la selección que se quedó en cuartos de final. La federación ya ha destituido al seleccionador Bruno Bini. Era un claro candidato al título, muchos lo situaban el primero, pero se quedó fuera en los cuartos de final ante una Dinamarca que lo sorprendió y aguantó los 120 minutos para asestarle la puntilla en los penaltis. Enfrentamientos anteriores a la Eurocopa con Bompastor, decisiones tácticas cuestionables desde el banquillo y eliminación temprana. Un cúmulo de circunstancias que acaba con Bruno Bini fuera del banquillo francés. Quién sabe si esto conllevará la salida del equipo de más de una jugadora y el cambio de ciclo que se supone en la escuadra francesa.
La paradoja del fútbol nos deja el recorrido de Dinamarca en esta Eurocopa. Ha llegado hasta semifinales sin ganar un partido, ha encajado la peor racha en la historia de su Eurocopa estando seis partidos sin ganar y ha accedido a los cuartos de final a través de un sorteo. Factores en contra, pero llegando a semifinales y quedándose fuera de la final en los penaltis. No ha necesitado ganar un partido: le ha bastado con cuatro empates y una derrota y llegar a semifinales. A pesar de no ganar, sí ha dejado un gran fútbol en determinados tramos de los partidos, con su capitana Pedersen siendo el ancla en el centro del campo. Una de las jugadoras dentro del once ideal de la Eurocopa.
Islandia e Italia han sido los otros dos conjuntos que han completado el cuadro de cuartos de final. El equipo de hielo ha logrado una clasificación heroica. Ha sido una hazaña conquistar un lugar entre las ocho mejores del continente a pesar de la contundente derrota ante Suecia. Su Eurocopa llegando hasta los cuartos ha sido de gran nota. Oficio y veteranía en el equipo italiano Antonio Cabrini. Segundo de grupo, jugándose los cuartos con la más fea, Alemania, pero dejando claro que seguirá progresando en el futuro. Será el rival más fuerte para España en la fase de clasificación para el Mundial de Canadá que comenzará el próximo mes de octubre.
La enorme decepción se llama Inglaterra. A la eliminación en cuartos el año pasado en los JJ. OO. se suma la de este verano en la primera ronda fuera de la Eurocopa sin conseguir una victoria y con un fútbol paupérrimo. Un fracaso deportivo que pone a Hope Powell en una situación muy comprometedora. Derrota ante España, empate agónico ante Rusia y apabullamiento francés en la última jornada. Fracaso sonoro para un equipo que en Suecia ha marcado un antes y un después y que mucho tendrá que cambiar si quiere estar en el mundial de Canadá dentro de dos años y no quiere llevarse sustos dentro de su grupo, donde tendrá rivales como Ucrania, que ya se quedó a puertas de estar en esta Euro tras caer ante Islandia.
Países Bajos mostró gran fútbol pero muchísima inocencia en la resolución final de cada partido. Cayó eliminado después de no conseguir marcar un gol en 270 minutos, y con estos registros es imposible acceder a unos cuartos de final. Mucho talento en la construcción ofensiva, gran juego de posesión pero nulo remate final. Inocencia y debilidad que le costó la eliminación tras caer ante Noruega e Islandia. De nada sirvió el empate inicial ante Alemania. El futuro es prometedor, con un equipo de gran calidad al que le servirá de lección los fallos cometidos en esta Eurocopa. La madurez y oficio seguro que son aspectos que tendrá el cuadro neerlandés en un futuro próximo.
El poder de la historia, ya se sabe. Cuando un equipo ha logrado tanto, nunca se le puede subestimar. Aunque no esté bien en los partidos, aunque venga con bajas, aunque muestre debilidades. Llega el día grande y aparece. Alemania siempre tendrá su historia y su prestigio. Se lo han ganado a lo largo de la historia y jamás lo perderán. Siempre estarán en el momento clave que decide los campeonatos. Aparecieron ante Italia y se alzaron a la gloria ante Noruega. Otra Eurocopa para Silvia Neid, otra para Alemania, otra para el fútbol alemán, otra para la gestión y el creer en este deporte. Son ya ocho títulos europeos, el poder de la historia.
* Fran Moreno es periodista.
– Fotos: AFP – Sportsfile
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