"Volved a emprender veinte veces vuestra obra, pulidla sin cesar y volvedla a pulir". Nicolás Boileau
El arranque de la Champions Cup 2015-2016 nos sirve como excusa para hablar sobre el ganador de las tres última ediciones del torneo (en el antiguo formado de la Heineken Cup y en el actual de la Champions Cup).
Rugby Club Toulonnais no es un equipo que se defina con parámetros lógicos. Todo su proyecto depende de las ideas (y el dinero) de alguien tan especial como Mourad Boudjellal. Desde su llegada a la presidencia en 2006, por Toulon han pasado jugadores de talla mundial: Tana Umaga, George Gregan, Victor Matfield, Anton Oliver, Andrew Mehrtens, George Smith, Sonny Bill Williams, Jonny Wilkinson, Ali Williams, Bakkies Botha, Carl Hayman, Danie Rossouw, Simon Shaw, Andrew Sheridan… Muchos de ellos llegaron al equipo como último destino profesional y con los mejores emolumentos de sus carreras.
Mourad ha evolucionado su modelo de contrataciones combinando los fichajes de jugadores veteranos, en el ocaso de sus carreras, con el de jugadores más jóvenes que están en su momento de máxmo rendimiento.
Los ejemplos más destacados:
Para suplir a los mediáticos Ali Williams y Bakkies Botha, Bernard Laporte cuenta esta temporada con las incorporaciones de Paul O’Connell y Samu Manoa. El estadounidense ha disputado el mundial como 8 y en Toulon desempeña como 4 debido a la saturación de jugadores en la 3ª línea. Su caso recuerda mucho al del polivalente Danie Rossouw.
El puesto de tercera línea centro (8) no necesitaba –a priori– ningún refuerzo cuando en plantilla están Juan Martín Fernández Lobbe, Juanne Hugo Smith, Steffon Armitage y Mamuka Gorgodze. A ellos se ha unido Duane Vermeulen. El sudafricano viene a completar una 3ª que no admite comparación, por cantidad y calidad, con la de ningún equipo europeo.
Otra de las grandes incorporaciones ha llegado al puesto de 10. Quade Cooper es uno de esos jugadores imprevisibles –para lo bueno y para lo malo– dentro del campo, pero también fuera de él: el carácter inestable del australiano promete encontronazos con el presidente y el entrenador, con lo que la diversión está asegurada en el Felix Mayol.
El último gran fichaje de la temporada es el de Ma’a Nonu. El neozelandés viene de cerrar la que, posiblemente, ha sido su mejor temporada como profesional. Ha rendido a un nivel altísimo tanto con Hurricanes (subcampeón del Super Rugby) como con los All Blacks (campeón del mundo). Parece muy lejano aquel 2014 en el que ninguna de las franquicias neozelandesas lo quería en sus filas por su escaso rendimiento deportivo y por ser un elemento desestabilizador en el vestuario y la NZRU tomó cartas en el asunto para forzar a los Blues a contratarlo antes de que formalizase su marcha a Clermont.
Los cinco jugadores citados vienen a unirse a una plantilla que cuenta con Leigh Halfpenny, Delon Armitage, Matt Giteau, Drew Mitchell, Bryan Habana, Mathieu Bastareaud, Maxime Mermoz, Fred Michalak, Steffon Armitage, Corcho Fernandez Lobbe, Juanne Smith, Mamuka Gorgodze, Charles Ollivon, Matt Stevens y Salesi Ma’afu entre otros.
Toulon no es un equipo, es una selección mundial.
* Javier Señaris es analista de rugby.
– Fotos: Stu Forster (Getty Images)
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