El mejor: Luka Modric. 7 partidos (7 titular), 630 minutos, 3 asistencias. Si en el doble pivote ya gustaba y enamoraba a la grada, como interior derecho ha terminado de coronarse como uno de los imprescindibles para los merengues. Asegura posesión, pierde pocos balones, pasa, regatea y llega. Y defiende mucho y bien. Un derroche de calidad y trabajo al servicio del equipo, que se nutre del juego del croata casi en cada jugada. Jugador clave en las aspiraciones del Real Madrid esta temporada.
De más a menos minutos disputados en los ocho partidos de enero y el primero de febrero, que se incluye por cuestiones logísticas:
Sergio Ramos. 9 partidos (9 titular), 792 minutos. Ha estado varios meses a un nivel muy por debajo de sus posibilidades y de lo exigido para un central del Real Madrid, pero da la sensación de que vuelve a acercarse a lo que debe ser por condiciones. Mucho más seguro y concentrado, rápido, líder, bien compenetrado con Pepe y los demás compañeros. Suele dejar algún detalle de precipitación o exagerado ímpetu, pero firma un mes notable después de una temporada floja.
Cristiano Ronaldo. 9 partidos (9 titular), 765 minutos, 5 goles, 3 asistencias. Él probablemente recordará este mes como uno de los más especiales de su carrera, con la gala del Balón de Oro y el homenaje que le ofreció una grada tan exigente como la del Santiago Bernabéu. En lo futbolístico, un mes más. Buenos números, un par de grandes actuaciones y la anecdótica batalla con Kiko Casilla. El 4-3-3, como al equipo en líneas generales, le beneficia. Se mueve con comodidad por el frente del ataque, combina bien con Benzema y goza de más ayudas en ese sector izquierdo con Di María y Marcelo. Punto negativo: la expulsión en San Mamés. Muchos la calificarán de injusta, pero lo innegable es que Ronaldo debe mantenerse alejado de tanganas, discusiones o provocaciones.
Pepe. 9 partidos (8 titular), 738 minutos, 1 gol. Lleva siendo el mejor central del equipo desde septiembre, y ahora que Ramos parece que también se entona, ya tiene una buena pareja de baile para proteger a Casillas y Diego López. Rápido al corte y en la anticipación, potente por alto y concentrado en todo momento. Por ponerle un pero, y que se sabe que molesta a Ancelotti por sus gestos, a veces se precipita con balones largos en la salida del equipo.
Marcelo. 7 partidos (7 titular), 630 minutos, 1 asistencia. Es habitual que tras volver de vacaciones esté algo más lento y desubicado, defecto que debería empezar a corregir después de tantos años en la élite. El nuevo esquema ha acercado a Di María, un trabajador nato, a su posición, por lo que goza de constantes coberturas y algo más de libertad. En ataque, como casi siempre, aporta salida de balón, combinación y calidad.
Di María. 8 partidos (8 titular), 621 minutos, 2 goles. Acomodado en el interior izquierdo. Titular barato que sirve para definir un mes más que curioso para el argentino. En el extremo derecho, su posición habitual desde que llegó a Madrid, aunque quizá no la natural, no andaba fino. La grada lo sabía y de ahí aquel desencuentro. Pero Ancelotti, aprovechando ese paso al 4-3-3, supo gestionar el tema. Lo alineó fuera de casa, rindió a buen nivel y consiguió volver al Bernabéu con los ánimos más calmados para reconciliarse. En esa línea de tres aporta equilibrio y mucho, mucho trabajo. Cubre a Marcelo, dobla a Cristiano, presiona y llega en segunda línea. Un buen fichaje de invierno.
Xabi Alonso. 8 partidos (7 titular), 576 minutos, 1 asistencia. Pese a que tradicionalmente se ha sentido más cómodo en un doble pivote, se ha adaptado muy bien a este 4-3-3 con dos interiores trabajadores, rápidos y hábiles. Ellos tienen lo que Xabi Alonso no: le generan espacio para poder dar el pase. Ayuda en la salida y puede presionar más arriba gracias a sus dos escoltas.
Benzema. 7 partidos (7 titular), 574 minutos, 5 goles. Probablemente su mejor mes en lo que llevamos de curso futbolístico. Con los 5 goles anotados ya supera los 100 en el Real Madrid. El 4-3-3 hace que sus mejores virtudes luzcan, ya que aprovecha los espacios, baja a la mediapunta y cae a bandas permitiendo que Cristiano y Bale pisen el área. Y anota. Delantero completo y que viene muy bien a este Madrid.
Diego López. 5 partidos (5 titular), 450 minutos, 1 gol encajado. El golazo de Ibai mancha el impecable expediente de este mes. Estuvo muy bien como casi siempre contra el Celta y contra el Athletic, que fueron los partidos con más trabajo. En el resto, al igual que Casillas, estuvo muy bien protegido, con pocas intervenciones y muchos minutos de espectador.
Carvajal. 5 partidos (5 titular), 449 minutos, 1 asistencia. Ha jugado los partidos de liga con un nivel notable en líneas generales. Seguro atrás, cuidando su espalda y su banda, aportando en ataque y con mucho recorrido. Puede que a la larga alinearle junto a Marcelo conlleve demasiados riesgos, pero este mes de enero ha sido bueno. Sigue progresando.
Bale. 7 partidos (5 titular), 445 minutos, 1 gol, 2 asistencias. Gris. Es quizá el único titular al que el 4-3-3 no le ha generado una mejoría en su juego. Sigue participando poco, y aunque a lo largo de estos nueve partidos ha dejado detalles de gran jugador, sigue lejos de su potencial rendimiento. Sumado a sus molestias físicas y a que hay un chaval que lo está haciendo muy bien, Gareth Bale empieza a ser cuestionado por algunos. Ancelotti tiene con el galés un reto que puede ser muy importante de cara a optar a todos los títulos.
Illarramendi. 9 partidos (4 titular), 441 minutos. Aunque parte como suplente, ha participado en todos los partidos, con actuaciones entre buenas y notables. Puede jugar como mediocentro único o como interior, dando esa alternativa al ser un jugador más lento, más de posesión y pase y más disciplinado en defensa. De momento Ancelotti ha elegido a Modric y Di María, pero si decide cambiar, da la sensación de que no bajará el nivel.
Jesé. 8 partidos (4 titular), 398 minutos, 3 goles, 2 asistencias. Tirar la puerta abajo. Exigencia habitual para los canteranos en equipos grandes, donde es muy difícil entrar y más aún mantenerse. Pues Jesé representa todo eso. Empezó siendo el último de la fila en cuanto a hombres ofensivos, adelantó a Morata en cuanto tuvo oportunidad y hasta mejoró el rendimiento de Di María. Ahora no es que sea mejor que Bale, como algunos pretenden defender, pero ha conseguido ser titular en un partido importante como el de San Mamés y que nadie se preocupe por si dará la talla o no.
Arbeloa. 5 partidos (4 titular), 360 minutos. El lateral derecho para la Copa del Rey. Actuaciones muy serias, importante en el nivel defensivo del equipo, en la recuperación y anticipación, como es habitual en él cuando está en forma. Y ahora lo está. Como siempre, en ataque no puede dar lo que da Carvajal, pero sus dotes defensivas seguro que serán valiosas para Ancelotti.
Casillas. 4 partidos (4 titular), 360 minutos, 0 goles encajados. Imbatido. Es cierto que los rivales a los que se enfrentó le probaron poco y que ese mérito se lo debe a una gran defensa por parte de todo el equipo. De todas formas se le ve seguro, recuperado y con récord personal de imbatibilidad, que aunque se haya logrado frente a rivales no tan potentes, ahí queda. En las semifinales de Copa del Rey y en Champions tendrá más trabajo. Será entonces cuando veamos realmente cómo está.
Isco. 6 partidos (3 titular), 279 minutos. Parece que se le han acabado las oportunidades de jugar de mediapunta, porque en el nuevo esquema esa posición ya no existe. Ancelotti ve en él un posible suplente de Benzema para que haga de falso nueve, pero no lo es. Calidad a raudales mostrada con cuentagotas, con poco protagonismo y peso en el equipo. Un lujo para el banquillo.
Coentrao. 2 partidos (2 titular), 156 minutos. Continúa la pesadilla de Fabio. Lesiones, una expulsión prácticamente provocada por él mismo… Se intuye que no está a gusto, pero debe volver a su nivel de la temporada pasada porque el equipo puede requerirle en ciertos partidos.
Nacho. 2 partidos (1 titular), 108 minutos. La pareja Pepe-Ramos ha empezado a rendir al nivel esperado, lo que le quita casi cualquier posibilidad de alcanzar la titularidad. No obstante, mostró un gran nivel frente al Espanyol y puede decirse que cumple con creces con el rol de cuarto (y durante un tiempo tercero) central del Real Madrid.
Morata. 5 partidos, 60 minutos, 1 gol. Su accidentada aparición en Pamplona refleja cómo han sido sus últimas semanas. Pocas oportunidades, gran entrega, voluntarioso, sin suerte, intentando luchar, pero sin éxito. Sus lágrimas al abandonar el césped de El Sadar no eran por el dolor, sino por la impotencia de no conseguir rendir como sabe que podría.
Casemiro. 3 partidos, 30 minutos. Prácticamente sin oportunidades. Ni siquiera la baja de Khedira le ha abierto la puerta. Quizá merezca más, o algunos quieran verle jugar, pero con Xabi, Illarra, Modric y Di María por delante lo tiene complicado.
Varane. 1 partido, 1 minuto. Aparición testimonial frente al Athletic. Puede volver a jugar, “pero no cada tres días”, Ancelotti dixit. Buena noticia poder contar con él, mala que solo vaya a ser de vez en cuando.
– Sin jugar por lesión: Khedira (se espera que reaparezca en mayo).
– Sin jugar por decisión técnica: Jesús.
– Alineación que conformarían los once jugadores más utilizados en el mes de enero (4-3-3):
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