"Lo que equilibra a un equipo es la pelota. Pierde muchas y serás un equipo desequilibrado". Johan Cruyff
Perdóname, amigo Fede, por retrasar tanto mis respuestas. Una malhadada (¿quién fue capaz de inventarse semejante palabra?) gripe me tumbó en la cama y apenas me he levantado para reencontrarme con Gardel, digo con Messi. Llego ahora de Eurosport, de transmitir el Suiza-Argentina y, por tanto, el hat trick de Leo. Por cierto, esto de Eurosport es una maravilla: un equipo de gente endiabladamente sana y armoniosa. Me dirás: ¿Y qué? Pues el contexto, querido. Uno es él mismo y su contexto (hubo quien habló de sus circunstancias). El contexto en que te mueves te permite ser más tú o menos tú. En Eurosport quieren que seas mucho tú y se desviven para potenciar tus virtudes.
Claro, ese es el contexto en que transmito el partido y en la pantalla veo a Messi (y al Kun Agüero) perdidos en la jungla suiza. No creo que les preocupe porque el Kun se faja semanalmente con bestias pardas de la Premier y Leo ya tiene el cuerpo curtido de junglas, selvas y malezas. Pero, ¿es este el contexto que necesitan para ser excelsos? Mascherano de 5; Gago de interior, mejor que Braña, desde luego, pero fuera del sitio que le hizo gran promesa en Boca; Maxi y Sosa por bandas… ¿Y quién juega al fútbol? Interrogo a mi compañero y él a mi: ¿No hay, en Argentina, un Borja Valero o un Cazorla? No digo Iniesta, Silva o Xavi, que esos son ejemplares singulares. Digo centrocampistas que entiendan el fútbol desde la asociación, capaces de juntar a sus compañeros, convocarles a una triangulación para avanzar pausadamente juntos y construir una pasarela para que esos dos monstruos sean aún más peligrosos.
Pasan los seleccionadores, pasan los jugadores, y Argentina sigue ahí: replegada, esperando la carga individual de Messi, que al menos ahora cuenta con el apoyo certero del Kun. Entre los dos matan a Suiza y a quien se ponga por delante, eso es evidente, pero no viven en el contexto idóneo para dar su mejor versión. No niego que Messi tenga responsabilidades en su disminución de rendimiento cuando se viste de argentino. Seguro que las tiene. El contexto puede perjudicarnos, pero no debería servirnos de excusa absoluta. Quizás, durante años, a Leo le costó comprender que su país de seleccionadores le exigía algo más que la afición del Barça, a la que siempre tuvo en el bolsillo. ¡A los argentinos tenía que ganárselos! Ahora parece que empieza a ser así, pero no de forma masiva, aunque exhibiciones como la que hizo ante Colombia empiezan a cambiar la orientación del viento. Este hat trick ante Suiza, por más anecdótico que sea, es otro peldaño en la escalera de la estima: si no me corrigen los amigos argentinos o estadísticos, Messi iguala a Herminio Masantonio y a Gabriel Batistuta como únicos futbolistas argentinos en lograr tres goles con la Albiceleste. Quizás así se le valorará un poco más. Pero, vamos, amigo Fede, que sigo pensando que el contexto importa y mucho. ¿No hay en Argentina un Borja Valero o un Cazorla?
Abrazos doloridos desde la capital
Madrid, jueves 1 de marzo de 2012
– Foto: EFE
Epistolario:
©2024 Blog fútbol. Blog deporte | Análisis deportivo. Análisis fútbol
Aviso legal