Duque de Barcelona

por DAVID FERNANDEZ el 31 julio, 2013 • 19:02

Mundial FINA Barcelona 2013: Día 12

Acierto absoluto la inclusión de los saltos de gran altura en el Mundial FINA. Aun hay muy pocas practicantes femeninas, pero este campeonato ayudará a aumentar el interés por esta modalidad. En cuanto a la competición masculina, el high diving deparó una de las finales más emocionantes del mundial con cuatro saltadores con opciones de título en la última ronda y una clasificación final muy ajustada. Los medallistas estuvieron en 12 puntos, cuando la nota del ganador rozó los 600 y muchos de los saltos superaron ampliamente los 120.

SALTOS DE GRAN ALTURA (MASCULINO)

Oro: Duque (COL); Plata: Hunt (GBR); Bronce: Paredes (MEX)

Las quinielas previas a la competición señalaban cuatro nombres. El nueve veces campeón mundial, Orlando Duque, el triple ganador de las Red Bull World Series, Gary Hunt, el jovencísimo Jonathan Paredes y el ruso Artem Silchenko.

Tras las tres primeras rondas de saltos de dificultad limitada las diferencias eran inapreciables: los cuatro mejores eran los cuatro favoritos, pero estaban separados por menos de 3 puntos.

En la ronda de saltos libres, Gary Hunt se atrevió con el triple quad, un triple mortal atrás con cuatro tirabuzones (dificultad 6.3, la más alta que se vio en los dos días de competición), clavando la entrada y logrando una puntuación récord de 170,10 puntos. Parecía que había sentenciado la final al conseguir una ventaja de casi 40 puntos.

En la quinta y última ronda, el ruso Silchenko optó por arriesgar (ejecutó un salto de 6.1) y una mala entrada le dejó sin medalla de bronce a favor del mexicano Paredes, de apenas 23 años y 351 días.

El oro era cosa de dos: Hunt y Duque. Ambos hicieron un salto de la misma dificultad, 5.6, maravillosamente ejecutado por el colombiano y fallado por el británico. La ventaja que sacó Duque, 39,20 puntos, fue suficiente para arrebatar el oro a Hunt por apenas 90 centésimas.

Es el décimo título mundial de Orlando Duque, de 38 años y 323 días de edad (un palmarés al que hay que sumar la victoria en la edición inaugural de las Red Bull World Series en 2009) y también la primera medalla para Colombia en un Mundial FINA, porque los campeonatos del mundo de high diving se hacían bajo el auspicio de la WHDF (Federación Mundial de Saltos de Gran Altura).

El punto final al espectáculo lo puso el checo Michal Navrátil, que hizo honor a su apodo de Superman y realizó un salto de exhibición, capa del superhéroe a los hombros e imitando su gesto de vuelo.

NATACIÓN. 200 MARIPOSA (MASCULINO)

Oro: Le Clos (SDF); Plata: Korzeniowski (POL); Bronce: Wu (CHN)

Chad Le Clos confirmó que su título olímpico en esta prueba no fue ni una casualidad ni un accidente y logró su primera medalla mundial. Ningún otro nadador sudafricano había subido a lo más alto del podio en su primera medalla mundialista.

Aunque a falta de 50 metros parecía que Korzeniowski podría optar al título, la última piscina de Le Clos fue demasiado rápida para el polaco. Así que Korzeniowski tuvo que luchar por la plata, y la logró por tan solo ocho centésimas. Ha sido la menor diferencia entre plata y bronce en la historia de la prueba.

El chino Peng Wu, cuando no se encuentra con Phelps, se encuentra con Le Clos. El caso es que nunca gana. Esta es su cuarta medalla en mundiales, todas en esta disciplina y, de momento, sin oros. Ningún otro nadador chino tiene tantas medallas con cero títulos mundiales.

Las 4 medallas, sin títulos, de Wu en 200 mariposa le hacen igualar a Pieter van den Hoogenband (200 libre) y László Cseh (200 estilos) con los nadadores con más preseas en una prueba concreta sin haber sido nunca campeones mundiales.

NATACIÓN. 200 LIBRE (FEMENINO)

Oro: Franklin (USA); Plata: Pellegrini (ITA); Bronce: Muffat (FRA)

Missy Franklin optó por renunciar a las semifinales de 50 espalda para centrarse exclusivamente en esta final. Fue un acierto, sobre todo por su mal rendimiento en las series de la prueba corta de espalda, donde apunto estuvo de quedar eliminada a la primera.

Con todas sus energías centradas en una sola carrera, Franklin ganó con autoridad a la vigente campeona europea y mundial. Estados Unidos no conseguía el oro en 200 libre femenino desde Berlín’78 con Sippy Woodhead. Además, Franklin es la primera persona que se proclama campeona mundial de 100 espalda y 200 libre en piscina larga (en el total de los mundiales, no solo en una misma edición).

Federica Pellegrini lo fió todo a su recta final, pero ante alguien de la calidad de Franklin eso es insuficiente, y tuvo que conformarse con la plata. Es la quinta medalla mundial de la italiana en esta prueba, igualando el récord en una misma prueba individual que ahora comparte con Michael Phelps (100 y 200 mariposa), Grant Hackett (400 libre) y Leisel Jones (100 braza).

Con su bronce, Camille Muffat iguala a Catherine Plewiński como las francesas con más medallas mundiales en piscina larga y ningún oro (3).

NATACIÓN. 50 BRAZA (MASCULINO)

Oro: Van der Burgh (SDF); Plata: Sprenger (AUS); Bronce: Zorzi (SDF)

Cameron van der Burgh tiene fama de realizar salidas imponentes. Esta vez fue ganado en esta suerte por Christian Sprenger, que iba lanzado a por el oro, pero en la última brazada el sudafricano metió la mano y consiguió su cuarta medalla en la prueba (récord histórico) y su segundo oro, empatando con Oleg Lisogor, el único que había sido bicampeón.

La prueba fue tan ajustada que solo una centésima separó al oro y la plata. Una diferencia tan mínima solo se había dado en otra prueba de braza (masculina o femenina), ya que nunca ha habido empate por el oro, y se vio en el 200 braza de Roma’09 con la victoria de Gyurta ante Shanteau.

Christian Sprenger se quedó a un paso de la gloria en una prueba que jamás ha sido ganada por nadadores australianos. Al menos Sprenger pasará a la historia como el primer medallista de su país, porque tampoco Australia se había subido antes el podio.

Giulio Zorzi completó la fiesta sudafricana del día. Dos oros en la misma jornada (Le Clos y Van der Burgh) y dos medallas en una misma prueba. Es la segunda vez que dos sudafricanos se suben al podio en una misma carrera: ya ocurrió en el 100 libre de Montreal’05 con Roland Schoeman (plata) y Ryk Neethling (bronce).

NATACIÓN. 800 LIBRE (MASCULINO)

Oro: Sun (CHN); Plata: McBroom (USA); Bronce: Cochrane (CAN)

Yang Sun, sabiéndose muy superior, esperó a los últimos 150 metros para aumentar el ritmo. Y cuando Sun se pone a nadar es inalcanzable para ningún otro ser humano en el medio fondo. Con este triunfo, el chino se equipara a Ian Thorpe (Fukuoka’01) y Grant Hackett (Montreal’05) como nadadores que ganaron 400 libre y 800 libre en el mismo mundial e iguala a Hackett (2003 y 2005) como los dos que han ganado dos veces seguidas la prueba.

Con esta nueva medalla, la séptima de su palmarés, Yang Sun iguala a dos mujeres, Xuejuan Luo y Yu Yang, como los chinos con más medallas mundiales en piscina larga.

La carrera del resto la ganó, sorprendentemente, el estadounidense Michael McBroom. Una plata que le permite igualar el mejor resultado de su país en la prueba: las platas de Larsen Jensen (2003 y 2005).

A tan solo una décima de la plata se quedó Ryan Cochrane, que se hizo con un bronce que le hace alcanzar a Brent Hayden como la persona canadiense con más medallas mundiales en piscina larga (5). Nunca antes en una prueba de fondo (800 libre y 1.500 libre, masculino o femenino) una décima había separado al segundo y al tercer clasificado.

WATERPOLO. SEMIFINALES (FEMENINO)

AUS 9-6 RUS. Partido igualado hasta que una serie de goles australianos, en los que la portera y la máxima estrella rusa (Anna Karnaukh y Ekaterina Prokofyeva, respectivamente) pudieron hacer mucho más para evitarlos, decidió el encuentro. Australia se mantiene invicta ante Rusia en el campeonato (cinco victorias y 1un empate), consiguió su octava victoria consecutiva (récord particular) y jugará su tercera final mundialista tras Madrid’86 (ganó) y Melbourne’07 (perdió). Rusia añadió a su poca intensidad defensiva una alarmante falta de ideas en ataque, tanto que se consiguió su menor anotación en partidos de eliminatorias desde la lucha por el bronce de Montreal’05 (3-8 ante Canadá).

Y capítulo aparte para una maldición que parece eterna. Las rusas han jugado siete semifinales en mundiales y una en Juegos Olímpicos y han perdido las ocho veces, en tres ocasiones ante Australia: Sídney’00, Melbourne’07 y Barcelona’13.

ESP 13-12 HUN. Partido de marcado carácter ofensivo. El primer cuarto acabó con empate a 5 y la primera parte terminó con 9 iguales. Sin duda, la superioridad de los ataques estuvo favorecida por la multitud de exclusiones (19 a favor de España y 13 a favor de Hungría). Al inicio de la segunda mitad, Hungría dio un pequeño tirón y se situó 9-12, pero entonces se le hizo de noche y no volvió a marcar en los últimos 9 minutos y 38 segundos de partido. España anotó cuatro goles sin respuesta húngara, defendió agónicamente la última jugada en doble inferioridad y se clasificó para la primera final de un mundial de su historia. Será el segundo mundial seguido con algún equipo estrenándose en la final (en el 2011 lo hicieron los dos: Grecia y China), algo que no había ocurrido antes.

España suma ya cuatro victorias consecutivas, la mejor racha de su historia. Hungría igualó su segunda cifra más alta de goles encajados (su récord es 16 ante Estados Unidos en la fase de grupos de hace dos años) y perdió por primera vez un partido mundialista tras marcar 10+ goles; siempre había ganado con una cifra de dobles dígitos: 31 de 31.

* David Fernández es estadístico.

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– Foto: Javier Soriano (AFP)