"Hay que recordar que quienes escriben para los imbéciles siempre tienen un numeroso público de lectores". Arthur Schopenhauer
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La ilusión de seguir soñando con algo grande es lo que esta selección quiere transmitirnos a todos. Ni la favorita y temible Francia pasó por encima de un conjunto español que compitió, que estuvo siempre con vida y que realizó un enorme trabajo defensivo comandado por una Sandra Vilanova on fire. Recital de cómo tiene que jugar una pivote que se multiplicó en defensa para atajar todo el peligro francés.
Ganar a esta Francia pasaba por repetir el excelente trabajo defensivo del Wolfsburg en la final de la Champions League. Y ha estado en ese nivel, que era la base para construir el partido y tener al rival muy cerca. Siempre ordenadas, evitando que Francia montase una transición defensa-ataque rápida, sobre todo en el segundo tiempo, cuando salió Thomis, que apenas ha tenido espacios por el gran orden defensivo del conjunto español. Sandra Vilanova ha llegado a todos los desdoblamientos y ha realizado unas coberturas extraordinarias, secando junto a las centrales a una Delie que no ha podido aparecer en todo el choque.
Bruno Bini sacó un once con clara tendencia a buscar la combinación por dentro. Con respecto a Rusia, dejó fuera a Le Sommer y metió a Necib. Mediocampo para combinar por dentro y dejar toda la banda a las laterales. España sufría por dentro porque las francesas eram más: Abily, Thiney y Necib contra Sandra Vilanova y Meseguer. Un tres contra dos que tenía a España maniatada. Y todo esto con un 1-0 en contra a los cinco minutos de partido. Renard, en la primera acción de su imponente partido, ganó una acción en un córner y adelantó a su equipo. Por arriba, a balón parado, fallo en la marca y el temor hecho realidad. El peor comienzo posible para España, que tenía que ir a remolque desde el inicio.
Con todo lo que Bini montó por dentro, Francia comenzó a hacer daño a España. Thiney y Necib fueron hacia dentro con Abily y el doble pivote español sufría porque tenía una jugadora menos. Francia combina y llegaba por fuera con sus laterales muy desplegadas. España apenas podía salir, porque Francia la tenía atrás, ahogada, y no le permitía salir fácil con el balón. Además, si se desplegaba, un posible robo francés y una transición rápida hacía que España dudase al salir, si ir más arriba o no. Había poca fluidez y la circulación de balón era muy espesa. Francia llegaba con sus laterales, que se desplegaban porque Bussaglia y Soubeyrand le hacían unos perfectos desdoblamientos defensivos para que no estuviese partido en la transición. Eran minutos en los que a España le costaba asentarse, pero seguía viva por un enorme trabajo defensivo robando numerosos balones en la zona final del ataque francés.
Bini buscaba sentenciar primero con Thomis y después con Le Sommer. A cambio de ello sacrificaba juego y combinación interior por dentro quitando a Soubeyrand y Necib. España respiraba más por dentro, podía tocar más fácil y buscaba balones largos, pero sin llegada de las mediapuntas. El trabajo defensivo de España restaba presencia en ataque. Vero Boquete no podía con las centrales francesas, sobre todo con Renard, que ha sido un muro como Sandra Vilanova en España. Balón arriba y segunda jugada, pero Jenni, Adriana y Sonia estaban demasiado lejos. A España le costaba desplegarse para hacerle daño a Francia. Hay dudas sobre la posición de Vero, si tiene que jugar arriba o más retrasada y aparecer más libre entre líneas, con gente por delante arrastrándole rivales y generándole espacios. Su tarea hoy era una odisea contra el poderío físico de las centrales francesas.
España pedía a gritos gente de refresco. Quereda no hizo cambios hasta el minuto 75 con la entrada de Vicky y Alexia, que volverían a darle un mayor ritmo al choque como sucedió el pasado viernes. Vicky y Alexia mejoran la fluidez del pase, mayor velocidad, y España llegaba con mayor peligro, pero ya con poco tiempo para buscar el empate. La entrada de Erika retrasó a Vero Boquete, movimiento que pedía ser hecho varios minutos antes. Francia, tras la pérdida de la gente interior, no conseguí dominar y finalizó defendiendo el 1-0 ante el último empuje de España.
El gol inicial hizo que España estuviese a remolque en el marcador durante todo el partido, pero mantuvo sus opciones hasta el último segundo. Sufrió para inquietar a Francia en ataque, pero dejó unas sensaciones muy buenas, con un fantástico orden y trabajo defensivo, cerrando cualquier vía de pase final a la temible línea interior que presentó Bruno Bini. Imagen muy buena, derrota competida, creciendo cada día en la Eurocopa y con pie y medio en cuartos. Un punto el jueves ante Rusia hará que España sea segunda de grupo. Pies en el suelo pero con la máxima ambición de que compitiendo así se podrá llegar muy lejos.
* Fran Moreno es periodista.
– Foto: AFP
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