Boasson Hagen gana en Tarare antes de ponerse el mono de trabajo
1.- A sus 26 años Edvald Boasson Hagen ronda las 50 victorias como profesional, entre las que se encuentran etapas en grandes vueltas (dos etapas en el Tour y una en el Giro), carreras por etapas de categoría World-Tour (dos ediciones del Eneco Tour) o pruebas de un día de este mismo nivel (Gante-Wevelgem, GP Plouay y Vatenfall Cyclassics). Es decir, sin haber llegado, a priori, al ecuador de su carrera, cuenta con un palmarés al que muchos ni se acercarán una vez se retiren.
2.- Sin embargo, parece que Boasson Hagen, que lleva cuatro años consecutivos entre los veinte mejores ciclistas del mundo según el prestigioso CQ Ranking, no termina de explotar. Pese a sumar numerosos triunfos temporada tras temporada, para muchos el noruego no logra dar todo lo que se espera de él, quizá debido a que todavía no ha destacado en ninguno de los cinco monumentos –su mejor posición es el 17º puesto que logró en el Tour de Flandes de este año–.
3.- Hoy llegó un nuevo triunfo que añadir a su palmarés, el tercero de una temporada en la que se estrenó hace menos de un mes –ganó la etapa que llegaba a su casa, Lillehammer, en la Vuelta a Noruega, además de la general–. Para ello, Edvald Boasson Hagen fue el más rápido del pelotón, que llegó con un gran número de integrantes.
4.- Esto fue debido a que el Dauphiné vivió una jornada algo insulsa un día más, a la espera de que mañana, en la contrarreloj, comience la lucha entre los candidatos a la clasificación general. Una vez atrapada la fuga –formada por Jacob Rathe, Juan Antonio Flecha, Fumiyuki Beppu y Sander Cordeel–, solo De Clerq y Kwiatkowski intentaron sorprender, sin éxito. De este modo, la tercera etapa, de 167 kilómetros entre Ambérieu-en-Bugey y Tarare, se resolvió al sprint.
5.- En la llegada masiva se dieron cita dos tipos de corredores, aquellos con un perfil de clasicómano y los velocistas puros. Y en esa mezcla surgió Boasson Hagen, capaz de ganar en ambos casos, después de ser lanzado a la perfección por su compañero Geraint Thomas.
y 6.- Esta es la tercera victoria del campeón noruego en el Dauphiné en cuatro participaciones, quedándose sin triunfo únicamente en el 2011. Sin embargo, desde hoy tendrá que ponerse el mono de trabajo y pelear por la victoria de Froome (o incluso Porte), disfrutando de poca libertad para buscar su propio beneficio, situación que se prolongará hasta el próximo Tour de Francia y que demuestra el potencial del equipo Sky.
* Ricardo Alonso-Bartol es periodista.
– Foto: Sirotti
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