Su fabulosa recta final de año y en especial su rendimiento en la repesca mundialista ante Suecia y en la fase de grupos de la Champions dio a Cristiano Ronaldo su segundo Balón de Oro pese a no ganar ni un solo título.
Es el séptimo Balón de Oro que recibe un jugador madridista, pero el primero que lo consigue militando todo el año en el club blanco desde Alfredo Di Stefano en 1959.
Hay varios casos de premiados que no han logrado ningún título durante el año. Le ocurrió a Stanley Matthew (1956, la primera edición), Dennis Law (1964), Gerd Müller (1970), Kevin Keegan (1978), Luis Figo (2000) y Ronaldinho Gaúcho (2004, pero no en el Balón de Oro, sino en el FIFA World Player).
Lionel Messi, segundo, sumó su séptimo podio, todos consecutivos. Es el récord histórico del premio, superando los seis de Cristiano Ronaldo y también los seis de Zinedine Zidane, pero este último en el FIFA World Player.
La maldición del triplete también persiguió a Franck Ribéry, que terminó tercero. Siete clubes han ganado liga, copa y Copa de Europa en una misma temporada, pero solo el Barça, con Messi en el 2009, añadió el Balón de Oro o FIFA World Player. Al francés le queda el consuelo de ser el primer futbolista de la Bundesliga en el podio del premio desde Oliver Kahn en el 2002 (segundo en el FIFA World Player y tercero en el Balón de Oro).
La incertidumbre sobre el premio al jugador no existió en el galardón al mejor entrenador, que se llevó Jupp Heynckes, ya retirado pero campeón de Bundesliga, DFB-Pokal y Champions League con el Bayern Múnich. Es el primer alemán, y el tercer entrenador de club en tan solo cuatro ediciones, que se lleva el premio.
La extraordinaria actuación en la Eurocopa de la guardameta alemana Nadine Angerer le permitió hacerse con el FIFA World Player femenino. Nunca antes una cancerbera se había llevado el premio, y además lo hizo superando en la votación a Abby Wambach (vencedora en 2012) y a Marta (diez veces en el podio en trece ediciones, récord histórico).
La elección de entrenador mundial del año en fútbol femenino estaba entre Ralf Kellermann, que hizo triplete con el Wolfsburgo, y Silvia Neid, que ganó la Eurocopa con Alemania. El galardón fue para esta última y, como ya lo había conseguido en 2010 (pese a que en ese año no hubo ninguna gran competición de selecciones), es la primera que lo gana dos veces.
En el XI FIFPRO, once mundial del año según el sindicato de jugadores, hubo la variedad que faltó en el 2012, puesto que todos los elegidos fueron de la liga española. Esta vez hasta tres ligas tuvieron representación –Alemania, Francia y España– tras elegir a Neuer, Alves, Ramos, Thiago Silva, Lahm, Xavi, Iniesta, Ribéry, Messi, Ibrahimović y Cristiano Ronaldo. La liga francesa nunca había tenido jugadores en el once ideal, y la anterior vez con más de dos ligas representadas fue en 2008 (también tres).
En 1995, la revista France Football otorgó un Balón de Oro honorífico a Diego Armando Maradona, que nunca optó al premio por su condición de no europeo. El otro genio del fútbol que tampoco lo tenía, Pelé, también ha visto reparada esta injusticia recibiéndolo en el año que Brasil vuelve a organizar el mundial.
El resto de premios fueron el presidencial para el belga Jacques Rogge, expresidente del Comité Olímpico Internacional, el de fair play para la federación de Afganistán y el Ferenc Puskás para el mejor gol para Zlatan Ibrahimović, pese a que lo anotó en noviembre de 2012.
Y además…
La ausencia de su máxima estrella, Sven Kramer, no se notó en los resultados del equipo de los Países Bajos, que logró el oro y la plata tanto en la competición masculina como en la femenina. Es la primera vez que un mismo país copa los dos primeros puestos en dos ediciones seguidas de este campeonato creado en 1892 y con pruebas femeninas desde 1970.
En chicos ganó Jan Blokhuijsen. El neerlandés se impuso en las pruebas de fondo (5.000 y 10.000 metros) y eso fue suficiente para superar por escasas seis centésimas a su compatriota Koen Verweij (la clasificación final se hace según los tiempos de cuatro pruebas).
Blokhuijsen por fin ganó un oro tras haber sido plata en las tres ediciones previas, pero quien tendrá que seguir esperando para hacerse con el título es el noruego Håvard Bøkko, bronce por cuarta ocasión y medallista por sexta vez. Solo otra persona, Renate Groenewold, tiene tantas medallas y ningún oro como Bøkko, también seis.
Ireen Wüst dominó la competición femenina ganando en 500, 1.500 y 3.000 metros y logrando su séptima medalla, tercera de oro. Con esta nueva presea, Wüst se queda en solitario como la mujer neerlandesa con más medallas en el evento. Y además es la segunda mujer de su país en ganar dos oros seguidos tras el triplete de Atje Deelstra (1972-1974).
La nota final de Wüst fue la mejor de siempre, 159,736, y su ventaja de 2,52 puntos sobre la subcampeona, la desconocida Yvonne Nauta, fue la más amplia entre oro y plata desde que en 1995 Gunda Niemann sacase 3,86 puntos a Annemarie Thomas.
Seattle Seahawks 23-15 New Orleans Saints. Seattle demostró que su fortaleza en casa no es casualidad (6-0 en sus seis últimos partidos de playoff como local y 16-1 en sus 17 últimos encuentros en Seattle) y desesperó a los Saints, que fueron incapaces de anotar durante los tres primeros cuartos. Nueva Orleans no se quedaba a cero tras tres periodos desde 2002 y nunca le había ocurrido en postemporada. Aun así tuvieron el último balón para intentar un empate milagroso, pero Seattle acabó metiéndose en la tercera final de conferencia de su historia (1985, 2006 y 2014).
New England Patriots 43-22 Indianapolis Colts. Los de Indiana volvieron a naufragar en defensa (encajaron 44 puntos, pero ganaron, la semana pasada) y eso ante los Patriots es garantía de derrota. Los de Nueva Inglaterra optaron por las carreras de LeGarrette Blount en detrimento de los pases de Tom Brady, y fue todo un acierto. Brady solo completó trece pases, su segunda menor cantidad en playoff (hizo doce en 2002 en su segundo partido de postemporada) pero Blount lo compensó con un partido histórico de 166 yardas y 4 touchdowns en carrera.
Carolina Panthers 10-23 San Francisco 49ers. La alergia de San Francisco a los partidos de playoff como visitante, solo dos victorias hasta el año 2012, ha desaparecido bajo el liderazgo de Colin Kaepernick, y en el último año ha logrado tres. Carolina ha llegado perdiendo al descanso en cinco partidos de postemporada, incluido este encuentro, y nunca ha remontado.
Denver Broncos 24-17 San Diego Chargers. Denver no mostró el potencial ofensivo de la temporada regular y esto dio opción a los Chargers pese a que no hicieron absolutamente nada durante los tres primeros periodos, de hecho fue la primera vez que Denver dejaba a un rival a cero durante los primeros cuarentaicinco minutos de un partido de playoff. San Diego reaccionó en el último cuarto, pero no pudo evitar que Peyton Manning sumase su primera victoria de playoff con Denver y también la primera de su carrera ante los Chargers en postemporada.
El TSV Pfungstadt ganó con tanta facilidad el título que resulta increíble que llevase veintiocho años persiguiéndolo desde aquel lejano éxito de 1986. El equipo alemán fue un ciclón en la localidad austriaca de Grieskirchen ganando tanto en semifinales como en la final por cuatro sets a cero (incluyendo un 11-0 en el último parcial de semifinales).
Con este título, su décima Copa de Europa como club, tercera en la modalidad indoor, el TSV Pfungstadt iguala al ASKÖ Linz como el segundo equipo con más títulos europeos en este deporte, aun muy por detrás de los veinte del TSV Hagen alemán.
La competición femenina se la llevaron, por quinta edición consecutiva, las austriacas del Union Arnreit. Es la novena Copa de Europa en la historia del club (cinco de ellas indoor) y es el segundo club que gana una misma competición europea de fistball en cinco ocasiones consecutivas, tras el TSV Hagen, que ganó trece seguidas indoor entre 1989 y 2001.
La máxima competición europea de clubes, hasta que el año que viene se reanude la Champions League, tuvo un desenlace sorprendente. En el último partido, el Donbass Donetsk tenía que ganar al Rouen Dragons, anfitrión pero sin opciones de título (el formato de competición no es eliminatoria directa, sino fase de grupos), pero perdió en shooutouts, los lanzamientos de penalti. Y eso dio el título a Stavanger Oilers, el primer club noruego que gana una competición europea de hockey hielo.
El Olympiacos, vigente campeón continental, vio truncada su excelente racha de catorce victorias consecutivas en la competición con una humillante derrota en la pista del Olimpia Milán por 81-51. El campeón de Europa en ejercicio no perdía por treinta o más puntos desde 1995 (Olympiacos 84-53 Joventut de Badalona), mientras que el equipo griego no anotaba tan poco en un partido europeo desde que perdiese por 95-51 en 1979 en La Mano de Elías ante el Maccabi Tel Aviv.
Por vigesimoprimera vez en apenas treintaisiete ediciones del torneo de la British Darts Organisation, la final masculina enfrentó a dos jugadores ingleses, Stephen Bunting y Alan Norris, que nunca antes habían llegado a semifinales, con victoria para el primero por 7-4. La edición anterior cuya final enfrentó a jugadores que nunca antes habían estado entre los cuatro mejores fue la de 1995.
La final femenina se disputó por primera vez a la mejor de cinco sets (en lugar de los tres habituales) y enfrentó por segunda vez en la historia a dos jugadoras del mismo país, dos inglesas, como ya ocurriera en 2001, también con dos inglesas. Lisa Ashton, subcampeona de la pasada edición, venció a Deta Hedman, cuya derrota la convierte en la segunda mujer en jugar y perder dos finales, tras la galesa Rhian Edwards.
El alemán Felix Neureuther, especialista en eslalon, sorprendió ganando el eslalon gigante en la estación austriaca de Altenmarkt/Zauchensee. Pero mucho más sorprendente fue ver triunfar a un alemán en esta especialidad: habían pasado casi 41 años –Max Rieger en Mont Sainte Anne en marzo de 1973– desde el único triunfo alemán en eslalon gigante.
Superado el torneo de los cuatro trampolines, la Copa del Mundo se reanudó en Austria con triunfo del japonés Noriaki Kasai. A sus 41 años y 219 días, Kasai es el más veterano de la historia en vencer en la competición, superando el récord de su compatriota Takanobu Okaba, que venció en Kuopio hace cinco temporadas con 38 años y 135 días.
La carrera que tomó el relevo del Rally Dakar volvió a coronar a Jean Louis Schlesser como ganador en la categoría de coches por sexta vez en otras tantas ediciones. En motos siempre hay un ganador diferente y en esta ocasión fue el francés Michael Pisano. En camiones, el húngaro Miklós Kovács se convirtió en el primero en ganar más de un título con este vehículo.
Bélgica tiene tantos buenos corredores que este campeonato no tiene nada que envidiar a un mundial, por ejemplo. Y fue precisamente el vigente campeón mundial, Sven Nys, quien se hizo con el título en Waregem. En su noveno entorchando, a uno solo del récord de Roland Liboton, que ganó diez consecutivos (1980-1989).
Un tumor cerebral acabó con la vida del Gran Maestro Vugar Gashimov, de tan solo 27 años. Gashimov participó en la primera medalla lograda por Azerbaiyán en el campeonato de Europa por equipos (bronce en 2007) y también en el primer título (2009).
* David Fernández es estadístico.
– Foto: dpa
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