Liga BBVA 2013-2014 / España / Fútbol / Crónicas 2013-2014
1.- Ganar al Real Betis está barato. Incluso muy barato, se podría decir. De los otros diecinueve equipos de Primera División, doce le han ganado y el Real Madrid lo ha hecho ya dos veces. Su situación es triste y muy complicada, cada semana que pasa la soga está más tensa y ahoga a un club y una afición entristecidos. Hay una dificultad añadida a la dolorosa realidad verdiblanca: el evidente desencanto mutuo entre técnico y jugadores. Estos, desesperanzados, juegan un par de marchas por debajo del ritmo de cualquier rival. Perder contra el Madrid es lo normal, jugar sin ningún tipo de alma es hasta inmoral.
2.- Un simple gesto hace palpable la crisis deportiva e institucional del Betis. Rubén Castro, un jugador idolatrado por la parroquia bética por su aportación desde que llegó a Heliópolis, fue sustituido en el minuto 55 con el marcador de 0-3. Su caminar, parsimonioso y distante, hacia el banquillo, en vez de alcanzarlo al galope, no habla de un equipo unido en busca de un objetivo común, por muy complicado que este sea, sino más bien evidencia desidia.
3.- Raro será que el Real Madrid vaya a tener un partido más cómodo que el del Villamarín en lo que le queda de temporada. Con el Betis a medio gas (como mucho), al Madrid este primer encuentro de la segunda vuelta no le ha supuesto un desgaste excesivo, más bien ha resultado ser un partidillo suave de transición entre eliminatoria y eliminatoria de Copa, para no perder el ritmo competitivo. El partido se acabó en el minuto 25 con el gol de Bale; desde entonces existió una insufrible espera del Betis de ese final que no quería llegar.
4.- El partido deja para analizar la enorme calidad que tiene Leo Baptistão y lo muchísimo que habría disfrutado el Betis del brasileño en un momento menos crítico que el actual. El todavía jugador del Atlético tiene algo más, diferente a lo que tiene el resto del equipo. Desborda, se atreve, rompe con el orden (o, más bien, desorden) establecido en el Betis de Garrido. De forma individual, esta cesión al Betis le va a venir de maravillas para seguir pudiendo demostrar su calidad semana tras semana sin sufrir en el banquillo, y el Betis necesita y mucho de él para tener vida hasta el final.
5.- Isco, aparentemente, ya es suplente en el equipo de Ancelotti. Carletto ha encontrado, según su criterio, cierto equilibrio en el centro del campo con Di María ejerciendo de acompañante de Alonso y Modrić y de guardaespaldas de Marcelo, y el italiano concluye que ese nivel de sacrificio no lo puede aportar el andaluz. Eso sí, Di María todavía no ha jugado en el Bernabéu después de aquel gesto famoso, puede que en casa no tenga la misma predisposición que en estos partidos que ha disputado lejos de Madrid.
6.- El Madrid había marcado dos goles y Andersen todavía no había tenido la oportunidad de hacer una estirada, una palomita con la que adornarse. El torpedo de Cristiano Ronaldo era inalcanzable, de factura absolutamente inmejorable. Pero si Andersen, como muestran las imágenes, no veía en el lanzamiento de libre directo de Bale, la responsabilidad es suya. Al colocar la barrera, un portero tiene que tener claro en todo momento dónde está el balón, y bien parecía que el danés lo tenía desorientado. Eso, por supuesto, no quita méritos al magnífico golpeo de Bale.
7.- Un día más, Luka Modrić ha abierto su manual de teoría práctica del centrocampista y, subido a su púlpito, ha impartido una lección de cómo se debe comportar un volante. Es como si un día hubiese adquirido por intercesión de la Providencia el don de la ubicuidad y se multiplicase para ser mucho más que un único jugador. Es complicado pararse a destacar una cualidad de los últimos partidos de Modrić, los mejores posiblemente de toda su carrera. Es el jugador que más balones recupera, el que más presiona, el que crea y el que asiste. Es un todo en uno preparado para cualquier inclemencia.
8.- Cierto que todo se simplifica considerablemente cuando la defensa del adversario tiene más agujeros que Santino Corleone en esa trágica escena de las cabinas de peaje. “Mira lo que han hecho con mi hijo –dijo Vito a Bonasera–”. Esa misma frase ideada por Mario Puzo la podría utilizar cualquier seguidor del Betis en referencia a la zaga de su equipo. Si el Madrid hubiese querido hacer sangre, el encuentro de hoy podría haber pasado a los anales de la historia blanca. Cristiano Ronaldo, Bale y Benzema encontraban espacios en cualquier momento y en cualquier situación. Y más incluso encontró Morata cuando entró a falta de quince minutos. En ese tiempo desbordó en varias ocasiones a Chica y marcó un gol ante la mirada impasible de la defensa verdiblanca.
y 9.- El de hoy es el quinto partico consecutivo que el Real Madrid acaba con su portería a cero entre la liga y la Copa del Rey. De hecho, todavía está imbatido en este 2014. Da igual que juegue Arbeloa o Carvajal, Coentrão o Marcelo, Nacho o Ramos, Iker o Diego. Ancelotti ha encontrado la fórmula para cerrar el grifo de principio de temporada, y seguir con esa seguridad atrás blindará muchos puntos de aquí al final del curso.
* Jesús Garrido es periodista.
– Foto: Jorge Guerrero (AFP)
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