Cartas a Europa del Este (I): La vida sin Puyol

por CARLOS ZUMER el 9 junio, 2012 • 10:33

Desde algún lugar de España,

No te voy a mentir: no las tengo todas conmigo. La principal razón de mi desconfianza es Carles Puyol, que esta vez no va a estar. Al igual que muchos aficionados, yo también creo que sin Puyi la defensa española queda desguarnecida. Y puedo decir más: sin él, España baja enteros como candidata al título. He oído decir esto a Arsène Wenger y no puedo estar más de acuerdo. Podrás pensar que es exagerado, lo entiendo, pero nada más lejos de la realidad. ¿Has oído el tópico de los jugadores líderes, los que hacen vestuario y son sinergia para sus compañeros? ¿Aquello de los jugadores que imprimen carácter, sangre y obstinada implicación? Seguro que has oído acerca de ello. Pues bien, es cierto, y Puyol es todo eso con creces. Él hace que las cosas funcionen y él no va estar esta vez.

¿Recuerdas el gol frente a Alemania en Sudáfrica? Seguro que lo recuerdas. Lo fundamental de ese gol es que no es simplemente un tanto extraordinario. Lo revisito y veo un testarazo descomunal viniendo desde la segunda línea, un azote de la caballería de retaguardia cargando por sorpresa. Pero lo importante de ese gol es el convencimiento y la deliberación. Respecto a lo primero, sólo tienes que ver la fe con la que irrumpe desde fuera del área, metro setenta y ocho, y le gana el salto en el punto de penalti a una nube de hasta ocho jugadores mucho más altos que él. ¿Has visto desde dónde coge carrerilla? Y respecto a lo deliberado, el gol nace de la idea de Puyol, de su más genuina inventiva. No importa que fuese un movimiento importado de la pizarra del Barcelona. Lo que importa es que a él se le ocurre sugerirlo y ponerlo en práctica. Y el resultado es providencial. ¿Entiendes ahora lo que quiero decir? Puyol es la idea y su fuerza hecha fútbol a través de la mentalidad.

Entenderás que en un equipo de vocación atacante la defensa debe ser intachable. La retaguardia ha de funcionar como un reloj en sus tres, cuatro, cinco momentos cruciales a lo largo de los 90 minutos. Sin una activación febril y sin una gran concentración, la inversión ofensiva puede verse invalidada por el déficit defensivo. En efecto, Carles Puyol es el guardián de todo eso. Y quiero decir que sin Puyol la defensa de España está por graduar, como una componenda azarosa sin desenlace claro. Créeme que no es un descrédito hacia los que están. Más bien es un enorme y merecido reconocimiento al hombre capital que no estará este mes vestido de rojo.

Gerard Piqué es un central excelente, pero su rendimiento es variable. Su solvencia está muy ligada a la celosa vigilancia de Carles Puyol, que es su mentor y su infatigable centinela. El chaval se ha ganado el respeto de todos más allá de compañeros, qué duda cabe, pero la influencia del Gran Capitán es innegable. El rendimiento de Piqué sin su pareja de baile no es ninguna certeza, me temo que no puede ser de otra manera. Máxime después de su dubitativa temporada. Dirás con razón que me estoy olvidando de Sergio Ramos. Sergio es un chico excelente que este año ha crecido mucho en su nueva demarcación, es cierto. Justo cuando más languidecía el debate sobre su inadecuado uso del carril derecho, Mourinho le encomendó lo que siempre se le quiso a Ramos: el rol de central. Es de esperar que juegue con Piqué y que ellos sean la pareja de centrales (¡y qué pareja!), pero creo que ya vas viendo lo que quiero decir: estén los que estén, por buenos que sean, Carles Puyol no tiene recambio. Su obsesión es un activo escasísimo y me temo que sin él no podremos dormir igual de tranquilos. Permíteme que no mencione al resto de defensas de la Selección Española. No se trata de eso.

Y quiero decir que sin Puyol la defensa de España está por graduar, como una componenda azarosa sin desenlace claro. Créeme que no es un descrédito hacia los que están. Más bien es un enorme y merecido reconocimiento al hombre capital que no estará este mes vestido de rojo.

Mi idea es que sin Carles Puyol España es sensiblemente menos favorita. ¿Recuerdas el último Mundial? Hasta tres partidos ganados por 1-0. ¿Te das cuenta de hasta qué punto es importante la defensa jugando a marcadores tan cortos? Hay que pensar que España no ganará por 3-0 ni 4-0, ni mucho menos. Mantener la portería a cero es fundamental y el inicio de todas las cosas. Quiero, en cualquier caso, enviarte un mensaje optimista. Nunca hemos estado tan preparados para suplir una baja tan sensible. Será como intentar ganar la Séptima sin Fernando Hierro, pero sé que los retos gustan y estimulan. La vida sin Puyol es un desafío grande, mayúsculo, a la altura del objetivo de repetir Eurocopa con un Mundial victorioso de por medio. No tengo dudas de que España jugará estupendamente. En su capacidad defensiva, sin embargo, creo que estará la clave de su éxito o su fracaso.

Por favor, guarda esta carta hasta el 1 de julio. Pase lo que pase, mantén la correspondencia. Afectuosamente,

* Carlos Zúmer es periodista. En Twitter: @CarlosZumer

– Foto: EFE