Carles Gil: el zurdo travieso

por OSCAR ATO el 29 enero, 2014 • 10:05

Si hablamos de Carles Gil, hablamos de talento, de calidad técnica, del jugador distinto que puede hacer que un aficionado neutral se anime a ver un partido del Elche C. F. En este mediapunta valenciano nacido en noviembre de 1992 se depositan parte de sus esperanzas de salvar la categoría sufriendo lo menos posible. Asimismo, su club de origen, el Valencia, espera que se convierta en un futbolista importante para ellos durante los próximos años. El escenario será complicado y particular, así que para conseguirlo no parece esperarle un camino de rosas. Ya en su periplo por las inferiores che, gozó de pocas oportunidades en Tercera División con el Mestalla al ser relegado a la suplencia por Vicente Mir, curiosamente el actual entrenador del filial franjiverde. En esta etapa compartió equipo con jugadores como Isco, Bernat, Paco Alcácer o Fede Cartabia. Las lesiones musculares han sido su principal problema hasta hace bien poco, pero el año pasado siguió un plan especial de trabajo que nos está permitiendo disfrutar con continuidad de sus progresos en los terrenos de juego. Veamos en qué punto se encuentra el futbolista, sus virtudes y los aspectos por mejorar.

Se trata de un jugador internacional con la selección nacional sub-21, de la que viene siendo un asiduo en las convocatorias a pesar de contar con pocos minutos, ya que la competencia en su zona es feroz (Jesé, Deulofeu, Suso, Muniain…). Zurdo, con una depurada técnica y una buena visión y entendimiento del juego, Carles Gil vende cara la pérdida de balón al llevarla casi cosida al pie. Aunque su sitio natural –y donde más actuó en la temporada del ascenso– es la mediapunta, en esta 2013-14 convive más en el costado derecho del 4-4-2 que propone Escribá para ganar presencia ofensiva. También se debe a la no consolidación de un hombre de banda diestro, ya que Stevanovic no ha convencido y Aarón Ñíguez no ha demostrado un rendimiento continuado. Desde allí ayuda a dividir atenciones entre las marcas rivales y a asentar ataques posicionales, además de ceder espacio para las subidas de un impetuoso Damián Suárez que cuenta con el ’15’ para tirar paredes y trazar combinaciones. Partidos como los realizados ante la Real Sociedad, Real Madrid, Espanyol, Athletic (primera vuelta) o Rayo Vallecano (segunda vuelta) le han servido para que algunos clubes de prestigio europeo pongan el punto de mira en su fútbol. Su cláusula de rescisión es golosa: 8 millones de euros.

Evidentemente, no todo son alabanzas a la hora de establecer un juicio sobre el momento actual de su carrera. Carles Gil todavía debe madurar su juego y aumentar su ascendencia en los partidos, sobre todo en el marcador. No es deseable que el considerado por gran parte de la afición como el talento de su equipo llegue al ecuador del ejercicio liguero con dos asistencias y cero goles anotados. Su disparo no es muy destacable, sin ser lento no goza de una gran velocidad, y a veces abusa de las conducciones más de lo debido valiéndose de un regate que, siendo bueno, no termina de ser lo suficientemente determinante. Si bien es cierto que partir desde el costado y a pierna cambiada favorece este vicio y dificulta su presencia ofensiva, hay que achacarle a él su parte de responsabilidad, ya que cuando tiene el día esta circunstancia no le impide fluir en la mitad de campo rival y brillar por encima de la mayoría. Habrá que ver si la llegada del exótico Garry Rodrigues (extremo diestro procedente del Levski Sofia nacido en los Países Bajos e internacional por Cabo Verde) le posibilita alternar la mediapunta con mayor frecuencia o si, por el contrario, el fichaje invernal encuentra su lugar en la izquierda o se queda en un ocasional revulsivo para las segundas partes.

En definitiva, estamos ante una de esas perlas de la otra liga, un jugador muy joven y de gran proyección al que merece la pena seguir la pista desde ya. Imperfecto, pero especial. Intermitente a veces, pero por encima de la media. Algunos hablan del nuevo Silva. Mejor tengamos paciencia y ya veremos hacia dónde le lleva su carrera, lo que sí tengo claro es que sería interesante ser partícipe de ella. Y ojo, porque de su hermano Nacho, que milita en el Juvenil A entrenado por Rubén Baraja, también se hablan maravillas. Pero para eso ya habrá tiempo. Ahora es el momento de Carles Gil de Pareja Vicent.

* Óscar Ato.

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– Foto: EFE