Transcripción íntegra de la rueda de prensa de Marcelo Bielsa tras el Athletic Bilbao (0-4) Español en San Mamés por la Liga BBVA.
Pregunta.- ¿Qué se puede decir después de que su equipo, perdiendo 0-1 no mereciéndolo, haya acabado perdiendo por 0-4?
Marcelo Bielsa.- Una diferencia tan amplia inhibe cualquier intento de explicación. Las cuestiones que se evalúan para indicar los merecimientos más allá de lo concreto, que es el resultado, como en otras ocasiones no han sido desfavorables para nosotros. El resultado es de una contundencia absoluta, pero comentar el resultado es distinto a comentar el trámite, el desarrollo y lo que cada equipo produjo. Pero insisto, cuando uno pierde de local con cuatro goles de diferencia un partido accesible es difícil expresar justificaciones.
P.- Una día más el equipo rival ha necesitado de no demasiadas cosas para meter muchos goles.
MB.- Sí, yo el partido lo imaginaba con un grado de dificultad mucho mayor al que tuvo hasta que se resolvió cuando hicieron el segundo y el tercer gol. Hasta ese momento estábamos jugando un partido con una dificultad inferior a la que yo imaginé que íbamos a enfrentarnos.
P.- ¿Cómo valora la reacción del público a la actuación de Gorka Iraizoz en el partido y cómo valora la actuación de Gorka en el partido de hoy?
MB.- El público de San Mamés claramente en otras ocasiones ha demostrado poca tolerancia hacia nuestro arquero. Algunas actuaciones importantes que ha tenido a lo largo de esta campaña acallaron esos reclamos, pero en un resultado como el de hoy, con una diferencia tan importante, se focaliza el reclamo en nuestro arquero yo creo que de una manera exagerada y tal vez un poco injusta.
P.- Si el equipo está donde está ahora mismo en la clasificación es en gran medida a una circunstancia que se repite continuamente: cuando se puede encarrilar los partidos el equipo los deja sueltos, los deja vivos y ahí se está pagando ¿no?
MB.- La dinámica en este año es que los rivales no necesitan dominar el juego ni crear demasiadas situaciones de gol para imponerse. Lo natural es que el equipo que más opciones de gol crea y que más dominio del trámite y de la pelota tenga es el que está más habilitado para ganar, pero esa lógica no se ha dado nunca, o muy pocas veces. En el caso de hoy nosotros creando entre el doble y el triple de opciones de gol que el rival no convertimos, y el rival creo que fueron pocos los goles que erró.
P.- Daba la sensación que el equipo en los últimos partidos estaba ganando confianza y cada vez creía en su juego y en sí mismo. ¿Qué puede suponer un palo tan duro como el de hoy?
MB.- Necesariamente no podemos imaginar que eso es un estímulo para la tendencia que estábamos tratando de revertir, sino que es un paso atrás, pero nuestra obligación, nuestro deseo, nuestra necesidad es reintentarlo cada vez y es lo que vamos a hacer. Lo que no puedo decir es que perder 4-0 de local contra un rival que está en una situación similar a la nuestra pueda pasar desapercibido como un elemento a no considerar, todo lo contrario.
P.- Esta semana Herrera dijo que el equipo sabía reaccionar cuando peor se ponían las cosas; sin embargo, Aduriz decía que jugabais mejor cuando estabais menos apurados. La opinión suya con respecto al equipo en esta situación en la que no acaba todavía de salir a flote, ¿cuál es?
MB.- Hay elementos o circunstancias que desequilibran los partidos que son justificadas y otras que son aisladas. Por supuesto que cuando vamos perdiendo el escenario que preferimos para desarrollar el juego es ir ganando, no ir perdiendo. Hay equipos que a pesar de ir perdiendo saben comportarse, nosotros sin decir que no sabemos comportamos cuando vamos perdiendo, nos sentimos como equipo más cómodo por nuestras características cuando vamos ganando. Evidentemente, los elementos que nos ponen en situación de derrota son aislados, no son producto de que el rival nos supera y que merece el desequilibrio. Nosotros hacemos mucho para que el desequilibrio se produzca, a veces no defendiendo como corresponde y otras veces no logrando rentabilizar las opciones que tenemos. Cuando uno tiene muchas opciones y no convierte y el rival tiene pocas y convierte, esa ecuación es muy difícil de revertir, y esa ha sido la dinámica de casi toda la temporada, muchas opciones para pocos goles y muchos goles para un alto porcentaje de acierto de las ocasiones que nos crean.
P.- Y a día de hoy en base a eso ¿qué es lo que más le preocupa, la falta de acierto o la escasa contundencia defensiva?
MB.- Los dos aspectos nosotros tenemos que cuidar. Obviamente ojalá convirtiéramos en una proporción mayor. Lo que pasa es que un equipo rival cree cuatro o cinco situaciones de gol en noventa minutos no es exagerado. Normalmente en partidos más o menos parejos no se puede pensar que el rival no cree esa cantidad de opciones de gol, y nosotros creamos diez para no convertir. Al equipo que va ganando le resulta más fácil atacar porque cuenta con mayores espacios, con la desesperación del que va perdiendo, con las licencias que otorga el equipo que necesita revertir, licencias que facilitan el ataque del que está con ventaja. De todas maneras, en el primer tiempo hicimos lo suficiente como para tener un resultado claramente favorable. Al comienzo del segundo tiempo seguimos en esa dinámica, pero bueno, le repito, cuando uno pierde con cuatro goles de diferencia de local con un equipo similar, que está en el mismo sector de la tabla que nosotros, y que encima especialmente hoy no tuvo un comportamiento que se corresponda con lo mejor que ha mostrado en esta última etapa, justificar todas estas cosas cuesta mucho. En ese sentido cuando tengo que justificar este tipo de cosas y con todas las veces que me ha tocado expresarme del mismo modo a lo largo de esta temporada, sinceramente, me da un poco de vergüenza porque el que escucha ya tiene muy poca tolerancia a algo que se reitera tantas veces.
P.- Tampoco ha ayudado los contratiempos que han sufrido en forma de lesión primero Muniain y luego Ibai.
MB.- Sí, pero nosotros con Muniain, con Ibai, con Martínez, con Toquero… siempre erramos diez goles por partido y los rivales tienen un porcentaje de efectividad muy, muy alto. Claro, cómo decir que un equipo que recibe cuatro goles defiende bien y cómo decir que un equipo que hierra diez goles ataca bien. Finalmente lo que se evalúa es la contundencia ofensiva y la contundencia defensiva. Evidentemente esas cosas no se analizan, son de un solo modo. Sobre lo que se puede opinar es el trámite, el dominio y las ocasiones generadas y recibidas pero el juego no se define por ese tipo de cosas sino por lo que se efectiviza. En ese aspecto el análisis es deficitario y yo contesto porque tengo que contestar pero no porque entienda que convenzo o que tiene valor lo que digo.
P.- ¿Nos puede adelantar algo de las molestias o las dolencias que tienen Iker e Ibai?
MB.- Iker tiene un problema de distensión en el ligamento de la rodilla cuya gravedad no está determinada. Ibai tiene un golpe, una contusión que le impidió continuar en el partido.
*Alberto Egea
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