Barça B y Elche empatan en un partidazo

por DAVID GONZALEZ el 8 diciembre, 2012 • 19:36

1.- Partidazo entre dos pesos pesados de la Segunda División. Visitaba el Mini Estadi el líder, que venía de conseguir nueve puntos ante tres rivales directos (Alcorcón, Girona y Villarreal). El partido se presumía, a priori, uno de los más atractivos de la categoría. Por un lado, el Barça de Eusebio, que emula a su hermano mayor a base de toque y movilidad, pero que le otorga un punto más de anarquía; por el otro, el Elche, un equipo que no deja de crecer a base de orden, transiciones rápidas y mucho sentido común bajo la batuta de Escribá. Si en los 16 partidos de los ilicitanos hasta la fecha solo se habían vivido 33 goles, en los del Barça B habían presenciado nada menos que 59. Dos estilos contrapuestos aunque igualmente válidos que dejaban la incógnita de cómo sería el partido.

2.- No tardaría ninguno de los dos equipos en presentar sus credenciales. El filial azulgrana comenzaba tocando y tocando (con momentos por encima del 75 % de posesión) y adelantando mucho la línea de presión para tratar de complicar la salida de balón del rival. El Elche, fiel a su estilo fuera de casa, no se sentía incómodo en ese escenario: recuperación y balones directos a los cuatro de arriba, con Berry Powel de referente, batallando una y otra vez con unos Lombán y Planas muy acertados .

3.- Primer movimiento de fichas de Eusebio pasado el primer cuarto de hora. Deulofeu pasa a la banda derecha dejando a Kiko Femenía todo el frente izquierdo. De esta manera, el equipo aprovecharía la influencia y diagonales del de Riudaneras para provocar el factor sorpresa de Patric, incombustible en ataque durante toda la primera mitad. En el primer balón que cogió Deulo en banda derecha rompe a Albacar y encara a Rivera, que intercepta con la mano un centro al área pequeña que el árbitro acierta a ver. Penalti que mandaría a la escuadra derecha de la portería de Manu Herrera el propio delantero, que ya suma 10 goles esta temporada.

4.- Ir por debajo en el marcador era un escenario nuevo para el Elche, que en 12 de los 17 partidos ha comenzado ganando el encuentro. Hoy ya no podría especular. A pesar de las urgencias, en el ataque del líder faltaba mucho orden y precisión, y únicamente Carles Gil (en una nueva exhibición) llevaba verdadero peligro a la portería blaugrana. El Barcelona B, más cómodo que nunca, daba a Gustavo, Lobato y Sergi Roberto la manija del encuentro, pese a que la intensidad del choque no bajaba un ápice.

5.- En la segunda parte se invertirían los papeles. Elche hacía honor a la posición que ocupa en la tabla y asumía la iniciativa del encuentro. El Barça B, una vez sustituido Sergi Roberto, lo confiaba todo a Deulofeu, que rompía una y otra vez a los laterales, y a un Luis Alberto inspirado que probó suerte en varias ocasiones.

6.- El cambio de Xumetra en el minuto 65 dio otra velocidad al encuentro. Puesto que Carles Gil hacía pasar un muy mal día a Grimaldo en el lateral izquierdo, y que Xumetra sale de una lesión, Escribá decidió que el gerundense no ocupara su puesto natural y compartiera el frente de ataque junto a Corominas. Volvían los cuatro de arriba a coincidir sobre el campo, y solo un minuto tardaría en llegar el empate. Fallo de Kiko Femenía al proteger mal un balón en la línea de fondo blaugrana, roba Damián Suárez y da el pase atrás a Fidel, que define ajustado al palo izquierdo de Oier.

7.- A partir del empate llegarían los mejores minutos del Elche en el último mes, y posiblemente de toda la temporada a domicilio. Ese equipo que recordaba al de inicio de temporada, con un ataque imprevisible y veloz, muy difícil de frenar. Mantecón y Coro tuvieron ocasiones claras para poner el 1-2 en el marcador.

8.- Superados esos minutos de asedio en los que los blaugrana salieron vivos, Eusebio seguía sin renunciar a la victoria, y acabaría el encuentro con Luis Alberto, Kiko Femenía, Deulofeu, Sergio Araujo y Rafinha Alcántara. Talento, frescura y juventud para contrarrestar la experiencia y veteranía de Rivera y Mantecón, que se habían convertido en dueños absolutos del encuentro.

y 9.- Tablas en un partido propio de Primera División, por calidad e intensidad, donde el balón corrió mucho y el reloj paró poco. Dos de los mejores equipos de la categoría demostraron en 90 minutos épicos que en Segunda División también se puede practicar buen fútbol.