Velocidad y rapidez, astucia y olfato, juventud y descaro son los rasgos más característicos de Lacazette. Tras la casi nula salida de talentos en la cantera del Lyon, Lacazette quiere convertirse en el líder del barco, en el líder del Olympique. Cumple todos los requisitos para triunfar en Francia; la banda derecha es suya, no hay nadie que se oponga a él. Va camino de ser el jugador que guíe a Francia a su segundo Mundial en un futuro no muy lejano.
FICHA TÉCNICA
Con seguridad, la cualidad de la que más carece Lacazette. Su escasa altura combinada con su poca corpulencia hacen que no destaque por el físico. Sus piernas robustas y fuertes le permiten muchas cosas a la hora de resistir los 90 minutos del partido, pero ni por asomo Lacazette es un jugador dueño de una gran resistencia. Cuestionado siempre por su escaso cuerpo y poca garra, Lacazette tiene una velocidad envidiable; su gran capacidad aeróbica le permite ser uno de los jugadores con más agilidad de toda la Ligue1. Eso, combinado con una gran capacidad de movimiento, hacen de Lacazette un jugador más técnico que físico. Nunca ha jugado de mediapunta por su escasa presencia física: es el clásico extremo de toda la vida.
Sufre mucho la dependencia táctica por el hecho de arrancar siempre desde una posición concreta. Aún así sabe interpretar este fenómeno a la perfección. Lacazette es un extremo pegado a la línea de cal, pero sabe moverse muy bien entre líneas y tiene tendencia a tirar diagonales hacia adentro para coger la espalda a los defensas, donde desarrolla su mejor arsenal. Su capacidad de movimiento constante le ayuda mucho a hacer un 2 contra 1 donde casi siempre suele salir ganando. Es un extremo puro, dinámico y con movilidad, que sabe interpretar y adaptar sus condiciones a cualquier estilo de juego y sistema, pero es preferible que juegue en un sistema táctico que use los extremos.
Si encorsetamos este ámbito a la capacidad de Lacazette a dar un último pase o sacarse una jugada para enmarcar en la historia del fútbol estamos equivocados. Lacazette destaca mucho por cosas ambiguas y contrarias a la técnica. Eso sí, goza de un excelente golpeo de balón y sus centros no llegan a ser desperdiciables en ningún caso. Posee un golpeo de balón elogiable, pero le falta ser un jugador con un criterio de pase superior al que exhibe actualmente. La cualidad de la técnica es uno de los puntos donde tiene todavía mucho que trabajar. La temporada que viene deberá ser el año de Lacazette, aunque todavía tiene mucho margen de mejora y muchos aspectos que pulir. Es joven y no ha hecho más que empezar en el mundo del fútbol.
* Andrés Onrubia.
– Foto: C. Villemain / 20 MINUTES
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