"El modelo de juego es tan fuerte como el más débil de sus eslabones". Fran Cervera
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Romano y canterano giallorosso. Tras un paso por el Crotone, en la Serie B, este joven centrocampista convenció a Zeman, no sólo para quedarse en la plantilla, sino para ser uno de los fijos en el once del bohemio. La marcha del checo y la llegada del interino Andreazzoli significó una pequeña pérdida de estatus, ya que prefirió a la vieja guardia. Aun así, no pudo dejar de contar con un pequeño gladiatore que había enamorado al público gracias a su pundonor, lucha, resistencia e, incluso, liderazgo. Todo ello sumado a una pierna derecha correcta y una polivalencia que le han permitido ser el extremo derecho titular con Rudi Garcia al mando. Muchos le comparan con Simone Perrotta.
Ámbito físico
Sin duda es uno de sus puntos fuertes. Florenzi posee una resistencia bastante buena y está capacitado para aguantar un ritmo alto de carrera durante el partido completo. Incansable e infatigable, se desfonda en cada partido. A su vez, tiene una punta de velocidad extra al jugador común y su tren inferior le permite ganar carreras cortas. Esa suma provoca que sea especialmente bueno en el pressing o que llegue antes a los balones largos que busca con sus continuas diagonales. Su altura le impide ir sobrado en el juego aéreo, pero intenta suplirlo con ganas y anticipación, algo que imprime en cada jugada del encuentro. En definitiva, un jugador al que nunca se le puede reprochar la falta de ganas. Debería aprender a contemporizar más sus acciones para no desfondarse tan pronto. Incluso sin tener partidos intrasemanales, Florenzi no ha completado ningún partido con Rudi en el banquillo, a pesar de haber estado presente en cada jornada liguera.
Ámbito psicológico
Se podría definir como un luchador. Si el balón está próximo y lo posee un adversario, Florenzi intentará por todos los medios recuperarlo. Aguanta realmente bien el cansancio y es raro verle bajar los brazos en la derrota o ante la adversidad, por lo que se trata de un futbolista de sangre caliente con una mentalidad ganadora. A sus casi 23 años, se le intuye una capacidad de liderazgo innata (sobre todo si sigue en la escuadra que le ha visto crecer), aunque por ahora no asume ese papel por tener por delante a los mayores (Totti, De Rossi, Burdisso o incluso Balzaretti, que ya ha sido capitán). No en vano, Alessandro ya fue capitán del primavera justo antes de partir hacia el Crotone (2011/12) en calidad de cedido. Otro punto que destaca es su inteligencia para los movimientos sin balón. Suele aparecer donde nadie le espera y en los sitios oportunos, y traza diagonales que, gracias a su físico, son muy dañinas para el rival. En esta temporada, en la que está jugando de extremo, se está viendo cómo de difícil es cazarle en fuera de juego.
Ámbito técnico
Jugador diestro, con aceptable capacidad de conducción y pase. No es un virtuoso, pero sí correcto en la toma de decisiones. Colabora en el juego, pero no está capacitado para la creación. Prefiere el pase en corto que en largo; asegurar antes que errar. Con todo, hay que recordar que es un jugador en evolución al que se le presupone un amplio margen de mejora. A pesar de estar jugando en la banda de su pie natural, no se prodiga en el regate hacia fuera para luego buscar el centro, él prefiere combinar por dentro con los interiores o el resto de atacantes, o buscar el balón a la espalda de los defensas. Su capacidad de definición es mejorable, ya que su porcentaje de acierto de cara a puerta es bajo en un jugador que disfruta casi siempre de un uno contra uno ante el portero. No obstante, ya ha mejorado sus cifras del curso anterior (4-3), aunque están lejos de los 11 goles (en 35 partidos) que consiguió en Serie B.
Ámbito táctico
Por juventud y versatilidad, es difícil catalogar a Florenzi en una posición. Con Zeman y su 4-3-3 jugaba de interior (izquierdo o derecho); Andreazzoli, quien no confió tanto en él (fue suplente en la final de Coppa, por ejemplo), también lo probó como extremo, aunque jugó más veces de interior. Devis Mangia, el seleccionador sub-21 italiano, lo colocó como jugador de banda derecha en el 4-4-2 que utilizó en la Eurocopa de Israel. Y, por último, con Rudi Garcia ha actuado siempre de extremo derecho, también en un 4-3-3.
La polivalencia y esas capacidades físicas y psicológicas le permiten rendir bien en cualquier posición por su inteligencia, resistencia y motivación. Sin conocer exactamente cual es su mejor posición, ni tampoco cuál sistema le beneficiaría más, sí podemos intuir que nunca será un mediocentro creativo ni un trequartista porque carece de cualidades para ello. Su evolución determinará en qué se convierte.
Estamos ante un jugador vertical. Durante la temporada pasada (la primera al máximo nivel), actuando casi siempre de interior, Florenzi dejó ver que uno de sus puntos fuertes eran las llegadas desde la segunda línea. Su pobre rendimiento goleador por malas definiciones (empezó muy fuerte en ese aspecto, pero se diluyó con el paso de los partidos) provocó que no apareciese más en las portadas. Hoy en día, con Rudi Garcia colocándole de extremo y aprovechando mejor esas llegadas, ha vuelto a ponerse en primera plana y es uno de los máximos artilleros de un equipo donde el gol está muy repartido. Ya sea como interior o como extremo, Florenzi aporta soluciones al poseedor de la pelota tanto en corto como en largo. En definitiva, un jugador que no es imprescindible, pero siempre suma cuando está en el campo.
Es uno de los jugadores más luchadores de la plantilla. En cada partido juega como si fuese el último que fuera a disputar en el equipo y tuviese que ganarse el puesto. Esto provoca que sea uno de los primeros en bajar para recuperar (o presionar arriba si es esa la decisión de Rudi Garcia). La titularidad de Florenzi con el entrenador francés desde el extremo es entendible por diversos factores. Además de que la Roma cuenta con dos excelentes interiores como Strootman y Pjanic (y Bradley en el banquillo) que bloquearían su titularidad, Garcia ha preferido contar con un jugador implicado en labores defensivas. Con Florenzi consigue más equilibrio defensivo en una banda en la que el lateral es un carrilero como Maicon, aunque también hay que recordar que los otros cuatro delanteros de la plantilla han estado lesionados, más o menos tiempo, a lo largo de la temporada. Su físico le permite realizar buenos marcajes a su par. No sería raro que algún día actuase de lateral.
* Rafael Medel.
– Foto: Alberto Lingria (AFP)
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