Al final no bastó

por ALBERTO LOPEZ FRAU el 15 mayo, 2016 • 12:38

1.- El Real Madrid saltó a la hierba de Riazor con las ideas muy claras. Tenía que ganar y esperar un tropiezo del Barcelona en Granada. Durante los primeros cuarenta y cinco minutos el Madrid jugó muy bien al fútbol. Presionó arriba, incorporó permanentemente sus laterales al ataque, defendió con los centrales muy arriba y llegó muchas veces creando superioridad en banda. Fruto de ellos llegaron dos goles, ambos de Cristiano Ronaldo. En el segundo tiempo, conociendo el resultado de Granada, se dejó llevar. El partido se convirtió en un ida y vuelta y ahí apareció Keylor Navas. Él no entiende de relajaciones. Estuvo de nuevo a un nivel soberbio.

2.- Zinedine Zidane dispuso un once que diferirá muy poco, si no hay problemas físicos, del que puede presentar el próximo día 28 en la final de Milán. Con Casemiro en el mediocentro, dando libertad a Kroos y Modric, con Pepe y Ramos en el centro de la defensa y con los tres de arriba: Bale, Benzema y Cristiano, con los pros y contras que tiene jugar ese 4-3-3 con tres futbolistas de ataque a los que les cuesta mantener la actividad y concentración defensiva durante muchos minutos seguidos.

3.- El Dépor saltó al césped con el veterano portero Pletikosa. Dispuso un mediocampo con sus dos mediocentros de cabecera, Bergantiños y Mosquera, más la ayuda de Faj;, desde los costados arrancaban Fede Cartabia y Luis Alberto, con Lucas Pérez arriba. Un 4-5-1. En la primera parte casi no se pudo desplegar, en la segunda, con el partido más abierto, y de la mano de un Fede Cartabia que ha crecido mucho en el tramo final de temporada, sí tuvo capacidad para estirarse y crear peligro en la porteria de Keylor Navas.

4.- El Madrid fue muy superior en la primera parte. Carvajal y Marcelo llegaron mucho y bien arriba, controlando muy bien los tiempos en ataque, doblando siempre a Bale y Cristiano cuando ambos iban hacia dentro. Cristiano se hizo el dueño del área, logró dos goles, exhibió su ambición por hacer más y puso el broche final a una gran temporada por su parte, con las virtudes y defectos de siempre, pero con unos registros al alcance de casi nadie. Es la voracidad hecha futbolista. Se fue en el descanso con molestias físicas.

5.- Víctor dio la titularidad a Manuel Pablo el día de su adiós. Un ejemplo. El lateral canario completa una longeva carrera. Siempre ha rendido de maravilla y durante varios años fue uno de los mejores laterales del fútbol español. La ovación de Riazor fue un justo reconocimiento a un jugador de los que dignifican la profesión de futbolista.

6.- El Madrid saltó al campo en la segunda parte sabedor que la liga estaba imposible, el Barça ya ganaba 0-2 en Granada. El bajón de tensión se notó. El Dépor creció poco a poco y aparecieron las lagunas defensivas habituales en los de Zidane. El Dépor encontró espacio a la espalda de los medios del Madrid y llegó en varias ocasiones arriba. Keylor Navas evitó el gol con en varias ocasiones. La temporada del portero tico ha sido extraordinaria.

7.- Entraron James, Isco y Jesé en el Madrid. El Madrid fue un equipo más vertical si cabe, perdió el control del juego, permitió que le crearan ocasiones y siguió generando las suyas con Benzema en su salsa. El francés entre líneas flota, desliza pases e inventa fútbol con una facilidad pasmosa. Es un ’10’ vestido de ‘9’, un futbolista de una categoría descomunal.

y 8.- El partido no dio para más. El Madrid tuvo el mérito de engancharse a la liga cuando parecía imposible. Su temporada fue un tíovivo, con altibajos permanentes y un buen final liguero, pese a no quedar campeón. Le falta la final de Champions. Lo más difícil será a la hora de sacar conclusiones: el resultado de Milán debería mantenerse al margen de la radiografía general del equipo. Solo así se acertará con el camino a seguir.