Día 4 en Zurich: un récord del mundo y un bronce español

por JOAN PELAYO el 15 agosto, 2014 • 22:29

Indira Terrero consiguió la cuarta medalla para la representación española. Corrió muy bien, a su ritmo, la cubana nacionalizada española. El título fue para otra corredora nacida en Cuba, la italiana Libania Grenot, con 51.10. La medalla de plata fue para la ucraniana Olha Zemlyak, con 51.36, y el bronce, para Indira, con la misma marca que la campeona olímpica Christine Ohuruogu, 51.38. Este registro supone la segunda mejor marca española de siempre, por detrás de Sandra Myers, que corrió en 49.67… en 1991. Cumplió Aauri Lorena Bokesa, que corrió por la calle 8 y fue octava con 52.39.

Los treintaicuatro marchadores que salieron por la mañana en la última prueba de marcha del campeonato de Europa tuvieron el privilegio de ser testigos de un récord del mundo que ni los más entendidos en atletismo esperaban.

Había llovido por la noche y el suelo estaba mojado, una dificultad más para los participantes, ya que el circuito no era de su agrado. Los rusos no querían sorpresas y Mikhail Ryzhov e Ivan Noskov se pusieron en cabeza seguidos, a unos 30 metros, por el francés Johann Diniz. Detrás, un grupo perseguidor con el campeón del mundo en Moscú’13 Robert Heffernan, Grzegorz Sudol (ambos no acabaron la prueba) y Matej Tóth. García Bragado marchaba en el puesto decimocuarto y Francisco Arcilla, en el vigésimo quinto.

En el décimo kilómetro seguían los dos rusos y el francés en cabeza de la prueba con 43.44. Bragado y Arcilla seguían en el mismo lugar. Diniz empezó a sufrir problemas estomacales, aunque se quedó solo con Ryzhov y Noskov a unos cinco segundos. Cinco kilómetros más tarde apareció la lluvia de manera contundente. Noskov estaba a unos quince segundos detrás del Diniz y de su compatriota Ryzhov. En el paso por el kilómetro 20 seguían el ruso y el francés delante con Noskov y Heffernan a 26 segundos y Tóth y el ucraniano Hlavan a 45. Diniz seguía con problemas físicos y Ryzhov se marchó. A los 30 kilómetros, el ruso era primero con el francés a seis segundos y Noskov a un minuto y treinta cuatro segundos. Tóth era el cuarto a tres segundos del ruso. Bragado empezaba a remontar y se colocaba décimo tercero, con Arcilla vigésimo segundo. Mikhail empezó a acusar el fuerte ritmo de Diniz, que a falta de 10 kilómetros llevaba un ritmo endiablado y le sacaba a 39 segundos a Ryzhov y dos minutos y medio al eslovaco Tóth y al otro ruso. Bragado marchaba en undécima posición y Arcilla en la vigésima.

Hundimiento total del dúo ruso; Diniz se fue lanzado en busca del récord del mundo y el eslovaco se colocó segundo. El francés se dió un paseo triunfal en la última vuelta, incluso parándose a coger una bandera portuguesa, aún así le dio un buen bocado al récord que tenía el ruso Denis Nizhegorodov con 3:34.14 desde hace seis años. Con un registro de 3:32.33, otro francés ya tiene un récord del mundo. Matej Tóth batió el récord de Eslovaquia con 3:36.21 y se llevó la plata. Los rusos se conformaban con un bronce y la marca personal de Ivan Noskov (3:37.41).

Lo de Jesús García Bragado no tiene límites: consiguió su mejor marca del año con 3:45.41 y llegó octavo, un nuevo puesto de finalista. En su segunda actuación en un 50, Paco Arcilla ha sido vigésimo primero con 4:00.57.

Dieciséis lanzadoras sufrieron las inclemencias del tiempo en la prueba de peso. Cuatro fueron las eliminadas, una de ellas la representante española, Ursula Ruiz con 15.79. La alemana Christina Schwanitz demostró una gran superioridad con 19.35. En el disco tampoco tuvo suerte Sabina Asenjo, ya que llovía mucho y realizó tres nulos. 63.93 fue el mejor registro de la croata Sandra Perkovic.

Blanka Vlasic ha sido la gran ausencia de la clasificación de esta mañana en la prueba de salto de altura. Quince saltadoras estarán en la final del domingo. Se pedía 1.94, pero con 1.89 ha bastado para estar en la final. Ruth Beitia luchará por las medallas.

Dos españolas corrieron las semifinales de 3000 metros obstáculos por la mañana, con distinta suerte. Teresa Urbina se retiró a falta de dos vueltas en la primera carrera, mientras que Diana Martín corrió muy inteligentemente y pasó a la final al entrar en quinta posición con 9:52.63. La bielorrusa Sviatlana Kudzelich realizó el mejor tiempo con 9:46.89.

En la jornada matinal también se celebraron las semifinales de 1500 en categoría masculina. En la primera de las mismas fue muy valiente Adel Mechaal, que se puso en cabeza, pero no pudo aguantar en la última vuelta, terminando con 3:47.60 en duodécima posición. En la segunda, muy bien Manuel Olmedo hasta los últimos metros, pero se hundió en la recta final y acabó séptimo con 3:40.48. David Bustos se cayó junto al italiano El Kabbouri, aunque ambos llegaron a meta. Con posterioridad descalificaron al austríaco Andreas Vojta y el transalpino y el español estarán en la final.

La ausencia del belga Jonathan Borlée dejó el camino libre a los británicos en la vuelta a la pista. Mejor marca europea del año con 44.71 para Martyn Rooney y marca personal para Matthew Hudson-Smith, con 44.75. Donald Sanford batió el récord de Israel y para ese país se fue la medalla de bronce con 45.27. Samuel García llegó en última posición (séptimo por la ausencia de Borlée) con 46.35 debido a que corrió demasiado rápido los primeros 300 metros. Gran campeonato el del cuatrocentista canario.

Los Países Bajos consiguieron una nueva medalla de oro, esta vez en el 1500. Sifan Hassan, en la última recta, pudo con la sueca Abeba Aregawi (4:04.18 a 4:05.08). El tercer lugar del podio recayó en la británica Laura Weightman, con 4:06.32.

La final masculina de 800 metros deparó una gran sorpresa. Los polacos la podían dar, y lo hicieron. El francés Pierre-Ambroise Bosse se colocó el primero desde el disparo de salida, y a su rueda se puso Lewndowski. En la contra recta parecía que el francés iba a poder con todos, pero surgió en los últimos 100 metros Kszczot y se fue a por el triunfo con 1:44.15, mientras que Bosse y Lewandowski se hundían. En el último momento apareció el tercer polaco, Kuciapski, que mejoró su marca personal hasta 1:44.89, con el irlandés Mark English llevándose el bronce con 1:45.03.

La final de longitud se celebrará el domingo y habrá representación española. Se pedían 8 metros y Eusebio Cáceres llegó en su segundo intento hasta 8.05. Con 7.78 se pasó a la final, al alcance de Jean-Marie Okutu, que saltó 7.64. Luis Felipe Méliz hizo unos pobres 6.85. El mejor salto fue para el griego Louis Tsátoumas con 8.19. El campeón mundial en Moscú’13, Aleksandr Menkov, se quedó fuera al saltar solo 7.78, por lo que aumentan las posibilidades de medalla de Cáceres.

Al igual que lo consiguiera Fanny Blankers-Koen en 1950 en Bruselas, su compatriota Dafne Schippers firmó el doblete en 100 y 200 metros con una marca de auténtico lujo: 22.03, mejor registro mundial del año y récord de su país. Lejos quedó la británica Jodie Williams con 22.46 (marca personal) y la francesa Myriam Soumaré, con 22.58.

El estadio Letzigrund de Zurich enloqueció con la prueba de los 400 metros vallas. Su compatriota Kariem Hussein le dio el oro al país organizador con una plusmarca personal de 48.96. Para Estonia fue la plata con Rasmus Mägi a diez centésimas y para Rusia, el bronce con Denis Kudryavtsev corriendo en 49.16.

La primera prueba de la segunda jornada de heptatlón fue el salto de longitud. La alemana Claudia Rath fue la mejor con 6.32 y 949 puntos. La penúltima prueba de la combinada femenina fue el lanzamiento de jabalina. En el último intento, la francesa Antoinette Nana Djimou envió el dardo de 600 gramos a 54.18 metros, lo que le dio 941 puntos, y se colocó primera a falta del 800, donde consiguió marca personal la francesa Antoinette Nana Djimou con 2:15.22. 6551 puntos fue la suma total de las siete pruebas, por 6498 de Broersen y 6423 de la belga Thiam. Un total de veinte atletas terminaron la combinada en categoría femenina.

Al final, el francés Christophe Lemaitre se quedó sin ningún oro en velocidad. No lo consiguió en 100 y tampoco en 200, al ser segundo con 20.15. El ganador fue el británico Adam Gemili con 19.98, y el bronce fue para Ucrania, con el 20.30 de Serhiy Smelyk con 20.30, marca personal. El vencedor fue un destacado futbolista hasta categoría juvenil, militando en las filas del Chelsea.

Se esperaba mucho de la final de salto de altura. La tarde no fue propicia para realizar buenas marcas con la lluvia a lo largo de la misma. Doblete ucraniano con Bondarenko saltando 2.30 y 2.35 a la segunda y Protsenko el único en poder con los 2.33. Ukhov le dió otra a medalla a Rusia, pero con apenas 2.30. ¿Se batirá este año el récord mundial de Javier Sotomayor?

La polaca Anita Wlodarczyk realizó un registro de auténtico relumbrón con 78.76, nuevo récord de los campeonatos, récord de Polonia y convirtiéndose en la tercera mejor martillista de siempre, detrás de la alemana Betty Heidler (79.42) y de la rusa Tatyana Lysenko (78.80). Martina Hrasnová se llevó a Eslovaquia la plata con 74.66, y otra medalla para Polonia, en esta ocasión Joanna Fiodorow con 73.67. Heidler, la plusmarquista mundial, solo fue quinta con 72.39. Con la forma de Wlodarczyk, es posible que pierda el récord este año.

* Joan Pelayo es juez-árbitro de atletismo, especialista en pértiga y miembro fundador de la AEEA.

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– Foto: Getty Images – Zúrich 2014